Capítulo 116

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No podía con el peso de Bruno y me tiré en el suelo, en mi regazo estaba él, todo se estaba llenando de sangre, me quité la chaqueta y fui a su espalda, haciendo presión para que no saliera la sangre para que se contuviera en su cuerpo.

Sus ojos se abrieron - eres idiota, porque me has girado, porque¡ - le decía mientras mis ojos se llenaban de lágrimas - idiota, te odio - busqué mi móvil - mierda está en el coche - me maldecía.

Cada vez el charco de sangre aumentaba, cada vez era más grande.

Escuché como la gente subía - AQUI, ESTAMOS, AQUI - gritaba, la policía entró por la puerta.

Una ambulancia para el Linda Vista Community Hospital - parecía que escuchar esas palabras me tranquilizaba, el policía fue directo al cuerpo de Marian, le cogió el pulso y negó con la cabeza, eso me hacía feliz, hija de puta, pensaba.

Amor, ya viene una ambulancia - le sonreía entre lágrimas.

Bruno no apartaba su mirada de la mía, levantó su mano ensangrentada y tocó mi mejilla - lo diste todo por mí, te fuiste de España por estar conmigo, dejaste tu vida, para unirte a la mía, un día en Hawai, en casa de mis padres - sus palabras se silenciaron, empezó a toser.

No hables, Bruno, no hables - le suplicaba.

Un día en Hawai, en casa de mis padres, me dijiste que no había dejado nada por ti, pero creo que el destino me tenía reservada la mejor parte, porque Ari, estoy dando mi vida por ti - Bruno no paraba de tocar mi mejilla, con su pulgar secaba mis lágrimas, dejándome la cara más húmeda por su sangre.

Bruno, no digas eso, no te despidas de mí, ahora vendrá la ambulancia y te pondrás bien - no podía ni hablar, lo estaba perdiendo por momentos, mi pecho me dolía, al final Marian me lo estaba arrebatando.

Te he ganado, ahora ya no podrás decir eso - Bruno tenía ganas de sonreírme.

Sí, me has ganado, y de mucho - mis dedos rozaban su boca - ahora cállate, no uses fuerzas.

He sido el hombre más feliz del mundo, desde el momento que te vi por primera vez - cada vez Bruno tosía más, cada vez su boca derramaba más sangre.

MIERDA, DONDE ESTA LA AMBULANCIA - miraba a todos los policías que estaban mirando la situación.

Amor, olvídate de la ambulancia, olvida la gente, céntrate en mi - volvió a toser, sacando más sangre de la que ya había derramado - te quise desde el primer momento que te vi, te quiero ahora y te querré siempre, cuando mires al cielo por la noche, piensa que me tienes delante - hizo una pausa, para coger aire - piensa que me tienes delante, porque en la oscuridad de la noche, la luna te escuchará, y ese seré yo, no me olvides nunca, amor, y piensa siempre en mí, pero saca esa sonrisa que me vuelve loco, háblame siempre con ella en tu rostro, yo te voy a proteger siempre.

Bruno, no, por favor, no me digas eso, te vas a poner bien, yo me muero sin ti - le decía mientras hacía que su cuerpo viniera a mí, para que estuviera más cerca de mi corazón.

Tienes que ser fuerte - Bruno tosió, derramando su sangre - tienes que hablarles de mi a las niñas, diles que su padre siempre las quiso, aunque no me conocieron, que les cambie los pañales, enséñales los videos, que escuchen mi música, y déjalas ser lo que quieran ser en la vida, porque así serán felices - yo afirmaba con la cabeza, mis ojos apenas lo veía, por la cantidad de lágrimas que estaba derramando - y la puerta abierta, amor, no seas muy permisiva con los chicos, que como sean como la madre, serán muy bellas.

Te quiero, Bruno - no quería una despedida, alcé la vista y todos estaban con las lágrimas en los ojos - JODER, ES UN HOSPITAL, JODER, PORQUE NO BUSCAN ALGO, JODER¡¡¡¡¡¡ - les gritaba, Bruno cogió mi cara e hizo que le volviera a mirar.

Amor, te acuerdas de nuestra boda, de cuando bajabas por esas escaleras llenas de flores - yo afirmaba con la cabeza, Bruno empezó a cantar el estribillo, y cada vez mis llantos iban a más.

Because all of me

Loves all of you

Love your curves and all your edges

All your perfect imperfections

Give your all to me

I'll give my all to you

You're my end and my beginning

Even when I lose I'm winning

Because I give you all of me

And you give me all of you

Amor, te quiero como nunca he querido a nadie, más que a mi vida - sonrió para mí, sus dientes estaban ensangrentados - se feliz, se muy feliz, aunque sea sin mí, encuentra a alguien que te haga sonreír, intenta quererle, y que te quiera, aunque sea la mitad de lo que te quiero yo, porque si ya es la mitad, me sentiré contento, no le pidas que te quiera como yo te quiero, porque como yo te quiero nadie te podrá querer, mi amor por ti es infinito.

Yo no voy a querer a nadie, nunca, Bruno, nunca - mis labios fueron hacia los suyos - te quiero, te quiero, te quiero - le repetía constantemente - te quiero, aguanta, no te vayas, Bruno, por favor.

Ari, búscame, búscame, porque cuando sepa que has llegado, te voy a buscar, y ya nadie nos volverá a separar, nunca más, porque te voy a abrazar tan fuerte, que nunca te iras - sus lágrimas brotaron en sus ojos, nos quedamos mirándonos el uno con el otro, parecía que el tiempo se paraba, que los minutos no avanzaban.

Dile a mi padre, que lo quiero, a mi hermano que lo adoro, dile a mis hermanas que las amo, y dile a Tahití que no se sienta culpable por nada, porque ella no tiene la culpa - Bruno tosía sin parar, lo incorporé un poco para que no se ahogara - acuérdate de hablarme cada noche, Ari, te quiero amor, te amo.

En ese instante, empezamos a escuchar las sirenas de la ambulancia - Bruno, ya están aquí, ya vienen, ya está te vas a poner bien, ya verás - mi sonrisa apareció en mi rostro, mis manos acariciaban su cabello.

Bésame - me suplicaba.

Mis labios fueron a los suyos, acariciándolos, sintiendo su amor por mí, mis manos acariciaban su mandíbula - te quiero - le susurraba - te quiero - le repetía, mis besos tiernos no terminaban, nuestros labios se movían como si no hubiera final, hasta que note que sus labios se pararon, que no respondían, me separé de ellos - Bruno - le decía, sus ojos estaban cerrados - Bruno - le zarandeaba - Respóndeme - no podía creerlo - BRUNO, SI ESTO ES UNA DE TUS BROMAS, NO TIENE GRACIA - le gritaba, mientras me destrozaba por dentro, mientras que mis lágrimas aumentaban por segundos.

Me di la vuelta y vi como alguien entraba por la puerta, a prisas, me empujaron de su lado, haciendo que me quedara en una esquina, miraba su cuerpo sin voluntad, estaba en el suelo, sin mí a su lado, solo, junté mis piernas y mis brazos las abrazaron, vi como intentaban reanimarle, vi como intentaban hacerle todo, cogieron el desfibrilador, y se lo ponían en el pecho, haciendo que su cuerpo diera saltos encima del suelo, pero no respondía, uno de ellos se giró a mí, negando con la cabeza.

Hora de la muerte 17:26 - dijo uno de ellos.

OTRO CAPITULO¡¡¡ YA SE QUE ME ODIAS¡¡¡ NO?????

HORA DE LA MUERTE 17:26 SOLO DIGO ESO.

ESPERO VUESTROS COMENTARIOS, OPINIONES, GRITOS, LLOROS, DE TODO UN POCO POR FAVOR, DE VERDAD EN ESTE CAPITULO LOS NECESITO¡¡¡¡¡ PLS

NO HE PUESTO FIN, ASI QUE CONTINUA.................

Bruno mi pasión 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora