Capítulo 76

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Ya estábamos en el sofá, desnudos, yo encima de él, mis movimientos lo volvían loco, mis manos apoyadas en sus muslos, hacían que estirara mi cuerpo, Bruno estaba tumbado, experimentando todo lo que le estaba provocando, hacía tiempo que no estábamos así, por lo que mi cuerpo no se podía aguantar las ganas, sus manos apretaban mis muslos, mi imaginación fue a más y me paré de golpe - ahora vengo - me fui a la cocina abrí la nevera y empecé a rebuscar, y cogí dos botes, Bruno se quedó en el sofá con las manos en sus ojos, sin saber lo que me pasaba.

Fui hacia él ocultando lo que llevaba en mi manos - cierra los ojos - le decía mientras me acercaba a su cuerpo, Bruno obedeció a la primera, parecía que estás cosas le gustaban.

Mi lengua recorrió sus labios despacio mientras él los entreabría, en busca de mis besos, pero en ese momento no los iba a tener, mi lengua bajó por su cuello, escuchaba los suspiros de mi marido, pidiendo más, poco a poco bajé por su pecho, cogí un bote de chocolate líquido y derramé un poco en su pezón, el contacto con el frío hizo que su cuerpo se levantara un poco, pero con mi lengua calmé ese frío, relamiendo poco a poco el chocolate, hice lo mismo con su otro pecho.

Te has quedado con ganas de más postre? - me preguntaba,

Si, y lo voy a comer sobre tu cuerpo - los dos nos miramos, estábamos llenos de ganas el uno del otro.

Cogí el bote y manché mis labios con el chocolate, fui hacia su boca y mis labios rozaron los suyos, Bruno sacó su lengua y relamió mis labios, notando lo que llevaba en ellos - yo quiero probarlo en otra zona de tu cuerpo.

Dónde? - Bruno no habló su mano fue buscando mi excitación, cuando la encontró la tocó, y yo grité - si te portas bien - le dije y él sonreía.

El chocolate se desbordó por todo su torso, y yo fui lamiendo hasta llegar a su miembro, Bruno no dejaba de mirarme como mi lengua recorría su cuerpo y eso le excitarme, mirar cómo me relamía.

Su cuerpo estaba limpio, cogí su miembro y poco a poco, un hilo de chocolate cubrió una zona, Bruno cerró los ojos y gimió, mi lengua lamió la zona cubierta del dulce, mi lengua jugaba con toda su excitación, Bruno no paraba de moverse, suspiraba, se estremecía con mi contacto, empezó a jadear cuando mi boca cubrió por completo todo su miembro, bajaba y subía, lentamente, mientras mi lengua seguía moviéndose por el interior, Bruno levantó sus brazos y agarró los cojines del sofá, sus dedos se clavaban en ellos, mientras su respiración era más agitada y sus movimientos acompañaban mis entradas y salidas.

Bruno se levantó de golpe, vino hacia mí, jadeando - lo siento, quiero chocolate, creo que ya has comido mucho - en ese momento al haber comido dulce los bebes empezaron a moverse.

Creo que son niños, están contentos por lo que viene después de los besos - Bruno puso su mano y me sonrió al comprobar las patadas que daban, su cuerpo vino hacia mí, haciéndome tumbar en el sofá.

Bruno derramó un poco de chocolate en forma de corazón en mi barriga, su lengua recorría la línea de dulce, mientras sus ojos me miraban fijamente, yo acariciaba su pelo - chicos, mirad y aprended - dijo mientras mis ojos se abrieron, Bruno levantó el bote y un hilo de chocolate se derramó en mi zona intima, miró el suelo y vio el bote de la nata - mmm chocolate con nata - lo cogió, meneó el bote e incorporó un poco de nata donde había derramado el chocolate.

Su lengua salió y rozó toda mi zona llevándome gran parte del dulce que había puesto - Dios, creo que a partir de ahora comeré el postre de esta forma - mis piernas las abrió más y sumergió su cabeza entre ellas, dándome más placer, su lengua recorría todo mi sexo haciendo que mis suspiros se convirtieran en jadeos, en gemidos, estaba al máximo y Bruno ponía cada vez más nata y se la comía haciendo que mi placer subiera en cada contacto con su lengua.

Su mano fue subiendo hacia mi pecho, el cual agarró con fuerza, mientras que sus dedos acariciaban mi pezón.

Para, para - le decía, necesitaba, quería tenerlo dentro de mí.

Bruno levanto su cabeza y no pude controlar mi risa, tenía un bigote de nata - te ríes de mí?, yo le señala el bigote y él con su lengua se quitó una parte, se acercó a mí - me quieres quitar tú lo que me queda? - era tan sensual, tan sexy, que sólo con su voz, me trasportaba al cielo, yo afirmé, mi lengua salió y con la punta fui quitando toda la nata que tenía.

Bruno se sentó y yo me incorporé encima de él, su miembro eréctil entró dentro de mí, mientras mi cuerpo se empezó a mover, sus manos acariciaban en un principio mis muslos, subiendo por mis caderas, hasta llegar a mis pechos, Bruno cogió el bote de nata y colocó dos bolas en cada uno de mis pezones y su lengua los lamió, sus manos apretaron fuerte y sus labios estiraron el pezón haciendo que sacara de mi interior un pequeño gemido de dentro de mí, mis movimientos fueron cada vez más fuertes, apartó de un golpe el bote y se abalanzó a mi cuerpo, con ansia, devorando cada rincón de él, mordiendo mi piel - Ari, me excitas cada vez más - yo me estiré, mientras mi cuerpo daba círculos rozando todo mi zona con su piel, con su cuerpo, llegando a mi máximo placer gritaba su nombre, entre jadeos, Bruno con sus manos apretó mi trasero - así no pares - me decía - dios Ari, me encanta escuchar mi nombre en tu boca - mis movimientos no cesaban, cada vez entraba con mayor fuerza, cada vez mi cuerpo se retorcía, temblaba, Bruno se tensó, su cadera fue hacia arriba, su espalda se estiró en el sofá y su cabeza fue hacia atrás, cerró los ojos - ARI, SI, JODER ARI, JODER NENA - se estaba corriendo dentro de mí, Bruno me llenaba de su placer, estalló dentro, mientras miraba a mi marido retorcerse del placer que yo le estaba dando.

Mis movimientos seguían iguales, no cambiaban, subían y bajaban con ansia - ARI¡ PARA¡ PARA¡ - no podía controlar la sensación y poco a poco fui bajando de velocidad, mi cuerpo iba despacio, Bruno vino hacía mí y me besó - te quiero, y quiero estar así de bien contigo siempre - me acarició la mejilla.

Y yo amor - dejé de moverme.

Bruno se levantó y se llevó en brazos hasta el baño, abrió el grifo llenó la bañera, mientras se llenaba nos fuimos a la otra parte donde teníamos la ducha para limpiarnos del dulce en nuestros cuerpos, entre mimos, él me quitaba mis restos y yo a él, terminamos y nos fuimos a la bañera, allí nos relajamos mientras nos besábamos y acariciábamos.

OTRO CAPITULO, PARECE QUE BRUNO Y ARI HAN HECHO LAS PACES Y ESTAN YA BIEN JUNTOS, DENTRO DE NADA NOS VAMOS DE TOUR, ESPEREMOS QUE TODO SALGA, BIEN NO?? ESPERO QUE OS GUSTE LA NOVELA, ESPERO QUE ESTEIS HASTA EL FINAL, SERA DURO PARA MI TERMINARLA PERO NO PUEDE DURAR ETERNAMENTE, ESTO NO IMPLICA QUE SEA YA, PERO ... CADA CAPITULO ES UNO MENOS.

ESPERO VUESTROS COMENTARIOS, VUESTRAS IDEAS, OPINIONES, SUGERENCIAS.

MIL GRACIAS POR TODO LO QUE ME DAIS¡¡

Bruno mi pasión 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora