Capítulo 135

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Estábamos delante de la puerta de la casa de Bernie y Peter, mi corazón no dejaba de latir cada vez más fuerte, estaba allí plantada, al lado del coche, mis piernas no respondían, iba a verla, iba a volver a hablar con ella, eso me parecía tan surrealista, pero allí estaba a metros de estar con ella otra vez, pero ahora era totalmente distinto, nos conoceríamos de otra forma, ella no sabía nada de mí, en cambio yo lo sabía todo de ella.

Nerviosa - Bruno vino directo hacia mí, sus manos acariciaban mis brazos, mientras que yo afirmaba con la cabeza - tranquila, todo saldrá bien.

Mi cabeza fue hacia su pecho, necesitaba que me protegiera, que estuviera conmigo y que no se separara de mí, no entendía mi comportamiento, en días había cambiado, ya no era la misma, conocer a Bruno, sentir lo que sentía por él, había hecho que todo mi mundo, toda mi vida, se esfumara, y sólo pensara en los días con él.

Bruno me separó de mi cuerpo, me dio un beso tierno en mis labios, me cogió de la mano y empezamos a caminar hacia la puerta, allí Bruno la abrió - Hola¡ - exclamó - hay alguien en casa? - preguntaba, en ese instante, su madre salió de la cocina y fue corriendo hacia los brazos de Bruno.

Ariadna controla tus lágrimas, me decía a mí misma, que no parezca que eres una loca, cerraba mis ojos intentando controlar mis emociones.

Para, para, para¡ - decía Bruno, entre risas, su madre se separó de él, pero antes le dio varios besos en la mejilla - te presento a Ari - decía Bruno, Bernie me regaló una amplia sonrisa, se acercó a mí para darme dos besos.

Encantada - me dijo, mientras no dejaba de abrazarme - me alegra que Bruno haya traído a..... - Bernie alargó su a, esperando que Bruno siguiera la frase.

Como? ahora no lo he pillado¡ - Bernie y yo empezamos a reírnos, mientras que Bruno abría los ojos y se tocaba el pelo, como si no supiera que nos estaba pasando.

Lo siento hija, ya lo irás conociendo - me decía Bernie - Ari es una amiga? Ari es? - Bernie quería que Bruno dijera lo que era yo para él, la verdad es que Bernie no era tonta, y podría adivinar quien era yo, pero me daba la sensación que quería la confirmación por parte de su hijo.

Joder, pues pregunta claramente¡ - exclamó Bruno - mi novia, Ari es mi pareja - por primera vez veía a Bruno avergonzado, tímido al decir esas palabras.

Nos fuimos todos al comedor - supongo que después de la noche en la playa, os queréis duchar no? - al escuchar esas palabras de la boca de Bernie, miré a Bruno, sabía que no le había dicho nada de nuestro sueño, pero no me había dicho que ella sabía que esa noche la habíamos pasado en su playa - Ari - dijo Bernie, haciendo que mi mirada cambiara - te ha gustado la playa?

Por supuesto, es hermosa - le contestaba.

Es mi sitio favorito, en esa playa tengo casi mi vida, tengo tantos recuerdos de ella - sus ojos brillaban al hablar de su lugar favorito - un día podemos ir juntas y así te cuento algunas cosas vividas allí, te apetece?

Claro¡ - exclamé, en su momento nunca me contó nada de esa playa, ahora volvía hacia atrás para poder hacer todas las cosas que quise hacer con ella, y no pude por mis idas y venidas con Bruno.

Vale, pues cuando quieras, vienes y nos vamos un día entero juntas, de compras, vamos a comer, y luego a la playa, tomamos un poco el sol, y te voy contando y así nos conocemos mas - no podíamos dejar de sonreírnos, me alegraba estar allí con ella.

Lo siento por interrumpir, pero es mejor que nos activemos, sino a la hora de comer, vamos a estar con estas pintas - decía Bruno - te quieres duchar tu primero, luego voy yo? - yo afirmaba con la cabeza.

Bruno mi pasión 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora