«Nueva vida»

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Capítulo 43

*____________*

Estábamos camino al instituto las vacaciones habían terminado ya, no quería regresar al mismo lugar donde su presencia ya no estaría presente, después de todo lo vivido juntos que puede parecer tan poco tiempo para mí fue suficiente para poder darme cuenta que él no era como ningún otro chico, él era arte, sencillez, belleza, claridad, amor, compasión y sacrificio; sus ojos seguían en mi a cada paso que daba en mi vida pareciéndose un espejismo del que más podría perderme. Viera como lo viera no podría si quiera pensar en un fin para los dos, no así, me había imaginado varios escenarios junto a él pero ninguno como el representado por mi padre donde el obstáculo de nuestro amor era dinero, economía que aunque pareciera estúpida estaba allí, arrastrándonos en un vacío de amores no correspondido con el único afán de ser mayor que todos.

Pensar con amor y valor era dejar un lado todo esos afectos para enfocarnos en las personas que amamos sin distinción alguna, amor es amor sin importar las barreras, políticas, físicas, económicas o culturales, eso implicaba mirar desde otra perspectiva, pero había que aceptar que la vida no era así, cambiar a la sociedad de un día para otro era difícil incluso para aquellos regentes de un pueblo es costoso poder hablar con verdad y saber guiar con honestidad sin corrupción pero el mundo ahora es movido por ello; ¿Cuándo podremos cambiar?

— ¿Qué tanto piensas? — Me miro por el rabillo,—Ya te dije que puedes confiar en mí, estamos juntos en esto ahora.—manejaba con tranquilidad, sin perder la vista del carril.

—necesito hablar con él, Jos ¿Puedes marcarle? Tú tienes... —lo mire —Bueno, tienes todas las posibilidades de encontrarlo, dijiste que me dirías cualquier cosa sobre él, —me removí incómoda en el asiento apenada porque sus manos después de todo me hicieron sentir placer, —Pagué el precio.

—Odio que hables así, —miró el retrovisor y siguió adelante, —Recuerda que cuando me tomaste el teléfono a escondidas, te llevo a buzón ¿Qué pasará si solamente te evadió? ¿Has pensado en eso? —suspiró, esa idea me estrujo el corazón, —No quiero que lo tomes a mal pero.... —me miro rápidamente, —Tienes que tener los pies sobre la tierra, acepta que no podrás estar con él, tienes que olvidarlo, nada te conviene más que eso, no te hagas ilusiones, deja de soñar...

—No estoy fuera de la realidad, —mire el ventanal, —Tu no entiendes...

—Claro qué sí. Tú lo amas y no puedo hacer nada para cambiarlo, por más qué lo aborrezca y me duela aceptarlo él es el amor de tu vida y no yo, —freno ante el semáforo, busco su teléfono,—Márcale, —buscó el número, —Hazlo, antes de llegar al instituto. —Lo tomé, el semáforo encendió en verde y siguió el caminó, —vamos, antes que me arrepienta.

Mire la pantalla, su apellido allí estaba.

«No. Del imbécil Villalpando»

— ¿Era necesario el apodo?

—Sí.

Primer tono...

Segundo....

Tercero...

— ¿Bueno? —su voz, mi corazón desbocado por percibirlo, sentirle a pesar de la distancia, seguía allí para mí.

—A-alonso... —Sonreí al instante, por inercia miré a Jos, quién estaba plenamente concentrado manejando.

Voces se lograban escuchar, risas, pláticas, platillos y música, —¿________ eres tú? —su voz logro destabilizarse.

—Sí, Alonso soy yo, —mi mano sudaba con exceso, estaba nerviosa por lo qué le diría.

"Solo tú"(Alonso Villalpando Y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora