«Y ese primer paso que damos juntos, el brazo de Alexander entrelazado al mío y su hijo acurrucado en mi pecho, me hace darme cuenta de lo vacía y gris que había sido mi vida antes de hoy, incluso entre tantos colores.»
(Destiny 20: Citas especiales)
[En el zoológico, día de la cita]
POV MAX
—Max... ¡Max! ¡MAX!
Papi está gritando, pero yo no puedo alejarme de Magnus, escucho su corazón recostado en su pecho y puedo verlo desde aquí, cuando él mira hacia abajo y sonríe, y sus ojos casi se cierran... ¡Y los brillos de sus párpados destellan!
Y, además, huele rico.
Magnus se ríe y su pecho vibra, lo siento contra mí y me rio también.
—Déjalo, Alexander —le dice a papi, pasando su mano por mi cabeza y después se aleja, sigo el movimiento y veo sus dedos, con uñas brillantes y sus anillos, enredarse en el cabello de papi.
POV ALEC
Mis labios se fruncen –y no es un puchero porque soy un adulto, con su hijo, en una cita, por Dios– cuando Max me ignora épicamente y después Magnus simplemente se ríe y revuelve mi cabello justo como hace con el de Max.
Mi corazón no salta emocionado, no, no, no, porque Magnus es todavía un desconocido y uno no se vuelve loco por gestos así.
—Déjalo, Alexander —me dice, sus dedos tirando un poco de los mechones de mi cabello antes de bajar hasta mi nuca y masajear hasta casi hacerme ronronear.
Muerdo mis labios para no dejar salir ningún sonido ridículo y miro a mi hijo que sigue acurrucado contra el pecho de Magnus como si viviera para ello, como si estuviera hecho para sus brazos, como si le fueran familiares.
—No hagas pucheros, Alexander. Tal vez sólo está cansado —me encuentro con esos ojos verde dorado y Magnus me guiña antes de mirar de nuevo a Max y soltarme.
Dejo escapar un suspiro frustrado porque, por Dios, quiero que vuelva a mirarme, a mí, que vuelva a tocarme, a mí.
Estoy loco.
Estoy completamente loco.
Magnus comienza avanzar y, aun cuando podría ser un secuestrador y llevarse a Max, tardo en salir de mis pensamientos y correr tras ellos.
POV MAGNUS
—Mira, monstruo —le señalo a Max una enorme pecera llena de diminutos pececillos de colores, rosas, morados, amarillos, azules, ¡hay incluso algunos transparentes!, de esos cuyos esqueletos son visibles y parecieran brillar.
La mano de Alexander en mi hombro me sorprende y me hace saltar en mi lugar, provocando que Max se mueva también.
Alexander, completamente inconsciente de lo que ha provocado en mí, mira hacia los peces con el ceño fruncido. —Te juro que él ama venir aquí, le encanta el acuario... ¡Se vuelve loco con los colores y las luces! Siempre sale llorando y me rompe el corazón...
Su tierno puchero me tiene con ganas de besarlo.
—De verdad —Alexander insiste, moviendo mi atención de esos labios carnosos a sus hermosos ojos azules que ahora brillan más que nunca por los reflejos de las luces de colores.
—Te creo —me giro lo suficiente para poder llevar una mano a su suave rostro que, por supuesto se enciende al instante—, pero tal vez conmigo basta, ¿no?
—¿Q-qué?
—Con mis brillos —le guiño y es mi corazón el que se vuelve loco, y mi estómago el que se llena de mariposas, cuando una sonrisa tímida curva sus labios.
Estoy tan perdido... ¿O es encontrado?
* * *
Es corto, lo sé 😞💔 esta semana estoy sin tiempo, igual espero les guste 😌💙
Y también hubo actualización de Ángel cautivo por si wattpad no les avisa 😅
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Destiny (Malec Mpreg)
FanfictionTERMINADA» Todas las mañanas Alexander Lightwood y Magnus Bane se encuentran en el mismo vagón del metro. Todas las mañanas el pequeño Max, en brazos de su padre, mira al chico brillante frente a ellos. Todas las mañanas Magnus mira al pequeño ojia...