Kuma 44

27.7K 3.6K 1.1K
                                    


—¿Así que no hay nada que pueda hacer por él para ayudarlo? —pregunto al hombre frente a él.

El psicólogo negó con su cabeza y dejó leer las notas que había tomado de Jimin.

—No hay mucho, solo debes de estar a su lado y apoyarlo siempre. Ya sabes que tienes que hacer si entra en crisis, todo lo demás depende de Jimin para salir adelante —explicó paciente—. Pero Jimin a mostrando grandes cambios desde que usted llegó a su vida, tal vez no se de cuenta o tal vez sí, pero hoy, antes de que entrara usted vi algo que me alegro.

—¿Qué cosa?

—Determinación. Jimin vino determinado a avanzar y superar todo, tanto sus crisis como su pasado y su autoestima. Le pedí una razón pero solo me sonrió mientras sus mejillas se tiñeron de rojo —sonrió ante el recuerdo de lo tímido que se había puesto su paciente.

Yoongi sonrió, su pequeño en verdad se estaba esforzando para salir adelante.

—Y ahora veo la razón, usted —señalo con una sonrisa.

Y saber que él le impulsaba a ello provocaba cierta calidez mezclado con orgullo que ciertamente iba bien en su ego.

—Él me hace tan bien como yo a él.

—Pero usted es famoso —señalo—, debe de tener cuidado con las malas personas a través de las redes y afuera, no todos aceptaran su relación y usted debe de estar con él dándole esa confianza que le falta, nunca debe de darle una razón para dudar. Trate de ser siempre honesto con él, sin importar que —aconsejó.

—Bien —volvió a colocarse su cubrebocas junto con su gorro y lentes—, gracias por todo —se despidió levantándose listo para salir e irse.

Afuera, Jimin esperaba mientras jugaba con su celular, sin atreverse a meterse a sus cuentas. No quería enfrentarse aún a los malos comentarios que rondaban en las páginas o blogs que seguía, recién se había decidido a cambiar como para recaer.

Y sí que sabía que tenía notificaciones respecto a Yoongi y su misteriosa pareja, desde ayer que su celular no dejaba de vibrar con notificaciones de sus diferentes cuentas en las redes.

Movió su nariz no muy acostumbrado a usar cubrebocas pero sabía que era necesario si aún no quería que las personas supieran que él era la misteriosa pareja, quería un poco más de tiempo antes de que le golpeara todo y afortunadamente, Yoongi estaba de acuerdo.

—Vamos pequeño —anuncio Yoongi. El menor guardo su móvil y observo al hombre frente a él que con una suave sonrisa estiraba la mano en su dirección.

—¿Tiene que volver a una sesión? —pregunto dejando que el mayor tomara su mano y entrelazara sus dedos.

—No, Nam quiere hablar conmigo así que iremos a mi departamento, ya le pedí permiso a tu madre para pasar la tarde juntos y así que no te preocupes —se adelantó.

Mientras seguían caminando, se dio cuenta de algunas miradas para nada indiscretas hacia ellos, notó como el pequeño cuerpo a su lado se tenso.

Quería gruñirles a aquellos que le estaban mirando en este momento mientras murmuraban cosas, incomodando a su pareja.

Tratando de mantenerse firme, Jimin ignoró aquellas miradas abrazando el brazo de su pareja que prácticamente ahorcaba con sus manitos, apoyó su cabeza en el hombro que apenas alcanzaba. El tacto del mayor le ayudaba a relajarse y distraerse.

—¿No es nada malo? —murmuro observando el suelo, retomando el tema de conversación.

—No, creo que es por la reunión que tuve ayer con mi jefe.

KumamonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora