Para pasar el rato

Capítulo 103

Gabrielle Patterson
2 de Noviembre, Viernes. 22.00
°
Salgo de la habitación agitando mi ya larga melena húmeda tras la ducha, veo como está sentado en el sofá con el portátil y con las noticias puestas.
Desde la noticia de esta mañana no hablamos, me quedé impactada, no sabía que decir pues las cosas han cambiado mucho y yo ahora no se que pinto en ese juicio de no der por Nicolle. ~
-¿Y Nicolle? -pregunto.
-Duerme con mi hermano hoy. -explica dejando el ordenador a un lado.
~
Saco pizzas de la nevera para cenar ambos, me sonrie asintiendo con la cabeza y cojo aire nerviosa.
~
-Hoy duermo yo en el sofá. -advierto.
-No. -me lleva la contraria.
-No vas a estar siempre en el sofá. -protesto.
-Hoy no iba a dormir, tengo que preparar el juicio. -dice seguro.
-No, vas a descansar porque te hace falta. -ordeno.
-Prefiero que descanses tú. -insiste. ~
Niego, me giro viendo comi se abre un botellín y rie cuando le pido uno.
~
-Con la pulmonía que tienes no te doy alcohol ni loco. -dice serio.
-¡Pero si no tiene nada que ver! -me quejo.
-No, usted zumito. -me hace reir.
~
Bebo agua riendo, él sonrie sacando un plato y agarro su brazo preocupada.
~
-Te acompañaré en el juicio si eso quieres. -digo segura.
~
Sonrie, me agarra las manos y muerde su labio.
~
-Gracias. -sonrie.
~
Miro a otro lado nerviosa, saco la pizza del horno poniéndola em el plato y la corto mientras escucho su dulce pero masculina voz tararea una canción.
1.00
Me rindo levantandome de la cama, salgo al salon viendolo con el ordenador sobre su abdomen mientras él está tumbado en el sofá dormido como un bebé con una camiseta de manga corta marcando sus brazos y su pelo revuelto haciendome sonreir.
~
-Estás loco. -susurro riendo.
~
Le quito el ordenador cerrandolo, agarro un par de mantas echandoselas por encima y coloco un cojin bajo su nuca con cuidado.
~
-Estabas cansado ¿lo ves bebé? -susurro.
~
Beso su mejilla cubierta por una barbita algo dejada, miro sus gruesos, rosados y carnosos labios llamandome, provocando un deseo el más fuerte que jamás haya sentido. Lo beso con suavidad, sin querer despertarle pero intentando aprovecharme de este beso al máximo.
~
-Te amo, amigo. -susurro negando.