Después de la gran primera prueba del CIMM, los chicos se querían ir a festejar a las tres escobas, Harry tenía planeado ir con su capa y el mapa del merodeador que le obsequió Fred y George, pero antes de irse el profesor Lupin le pidió unos minutos para conversar y caminar, el acepto y les dijo a sus amigos que los vería en Hogsmade.
— Lamento lo de tu escoba, Harry... — comentó, Remus
— No es nada... — dijo, Harry
— ¿Se podrá arreglar? — preguntó
— No... — respondió — profesor, ¿por qué me afectan tanto los dementores? — preguntó — digo, más que a nadie.
— Los dementores son de las criaturas más viles que hay sobre la tierra. Se alimentan de todos los sentimientos buenos, todos los recuerdos buenos... — explicó — hasta que uno se queda sólo con las peores experiencias. Tú no eres débil, Harry — aclaró — Los dementores te afectan más porque has sufrido verdaderos horrores. Horrores que tus amigos difícilmente se pueden imaginar. No tienes de qué avergonzarte
— Tengo miedo, profesor... — confesó, Harry.
— Serías un tonto si no lo tuvieras — comentó, Lupin
— Necesito saber cómo combatirlos, usted me puede enseñar — dijo, Harry — hizo que se fuera el del tren
— Sólo había uno esa noche — explicó, Lupin
— Pero hizo que se fuera... — dijo tratando de convencerlo
— No me considero un experto, Harry — confesó — pero como los dementores parecen haber desarrollado un interés en ti quizá debería enseñarte, pero después de las fiestas — explicó — por ahora estoy estresado.
...
Eran los últimos de noviembre falta mucho para las fiestas de navidad, fue a la sala común para preparar su salida a Hogsmade, tomó el mapa y la capa. Antes de marcharse tenía que pasar por Luna que aún no tenía edad de ir a Hogsmade.
Harry se encontraba justo afuera de la sala común de Ravenclaw esperando a que Luna saliera de ella.
— ¿A quién esperas? — le preguntaron a Harry.
— Estoy esperando a Luna Lovegood, vamos a salir y vengo por ella — explicó Harry.
— Oh... — hubo un silencio con algo de tensión. — ¿quieres que vaya a buscarla? —preguntó, era una chica morena de la misma edad de Harry, por el uniforme y por el ofrecimiento era obvio que es una Ravenclaw, tiene un toque asiático, es Cho Chang.
— Sí, gracias... — respondió, Harry.
Antes de que Cho pudiera decir la contraseña, Luna salió de la sala, tenía un lindo vestido amarillo con flores, su cabello recogido con una trenza que tenía incrustadas flores reales en ella.
ESTÁS LEYENDO
The Secret
FanfictionEl mundo mágico siempre ha tenido secretos, unos más importantes que otros. Secretos en cada esquina, en cada familia y más si dos personas que no debían estar destinadas a estar juntas, quieren estarlo. Nadie debe saber sobre sus miradas, caricias...