LOS SENTIMIENTOS DE SASUKE

DESCONOCIMIENTO

Neji gustaba de admirar el lado más femenino de Sakura y esto no significaba que le diera menos importancia a sus increíbles habilidades en el campo de batalla, el joven Hyuga era para Sakura, el hombre del "perfecto balance." Pero a decir verdad ella apreciaba también que el muchacho contemplara con tanto amor su esencia femenina.

Si ya había planeado verlo para explicarle el asunto de la salida con Sasuke, entonces se aseguraría de llevar un atuendo que consiguiera agradarle, aunque pensar en el hecho de que lo había hecho enfadar, le tiraba por completo las ganas de llevar a cabo cualquier esfuerzo por verse bien.

Estaba demorándose tanto en decidir, que ya había empezado a sudar.

Sasuke la escuchó gruñir con enfado severo.

-¡Tendrás que esperarme un momento extra! - gritó tan fuerte como pudo para enterar a su compañero.

No hubo respuesta alguna de parte del muchacho y por un momento ella pensó en la posibilidad de que se hubiera marchado.

Chasqueó la lengua y volvió corriendo de puntitas al baño.

Se metió bajo la regadera y volvió a enjabonarse y enjuagarse el cuerpo tan a prisa como pudo.

Sabía que lo que acababa de hacer era a todas luces una tontería y de haberse dado cuenta de que el joven Uchiha se hallaba bajo su cama, lo hubiera visto llevarse una mano a la frente mientras negaba con la cabeza.

No había duda de que Sakura continuaba siendo una atarantada.

Segundos después, Sasuke había sonreído a medias, mientras pensaba en que no todo estaba perdido.

De alguna forma sentía que el caos en la mente de la joven Haruno, no estaba siendo ocasionado solamente por estar pensando en Neji.

Quizá se estaba engañando para hacerse sentir mejor.

Prefería pensar que aún generaba algo en la mujer que tanto lo había amado antes, a ponerse los grilletes de un sufrimiento cuyo efecto era comparable a estar cubierto por quemaduras de tercer grado.

De pronto decidió largarse de aquella habitación y esperarla en la sala de su casa como se suponía que estaba haciendo.

Una vez saliendo del escondite, se encaminó con máxima tranquilidad hasta la puerta.

No sabía por qué estaba haciéndolo de esa manera, como arriesgándose a ser descubierto por ella.

No tenía idea de lo que quería lograr con su manera de actuar.

Escuchó cuando el flujo del agua se detuvo y un momento después advirtió los pasos de la joven cerca de la puerta.

El tiempo le habría sobrado para desaparecer antes de que ella lo viera. Pero continuó inmóvil, aguardando el encuentro.

Ella avanzaba hablando sola y con la vista en el suelo, mientras con las manos se alborotaba el mojado cabello.

-Me voy a volver loca si continuó de esta forma. Solo me pondré lo que se...- se hizo el silencio durante un largo momento.

El pecho de Sakura subía y bajaba con más rapidez a cada segundo.

Sus ojos se llenaron de lágrimas y la espalda de quien alguna vez fue su compañero de equipo, se tornó borrosa.

Tragó saliva con fuerza y respiró profundo antes de hablar.

Odió que su voz se escuchara quebrada, débil e indefensa.

-¿Qué estas...haciendo aquí dentro? – fue la pregunta que lanzó.

Sasuke no contestó y continuó caminando hasta la puerta.