—Claro que los has decepcionado, vivíamos para vengar y ahora que has dañado todo, ¿Para qué seguir viviendo?—Seguía reprochándome mi consciencia.
Vi mi reflejo en el espejo, y mis ojos confirmaban lo que por más que yo intentara olvidar, negar u ocultar no iba a poder. Estaban muy claros y estaban brillando, brillo que fue opacado por las lágrimas que se acumularon en ellos.
—¿Para qué seguir viviendo si no sirves para nada?
¿Por qué tuviste que enamorarme Carlos, por qué?
—Si decepcionas a los muertos, imagínate a los vivos.
¿Por qué tú tuviste que ser el asesino, por qué?
—No le harás falta a nadie, desaparece de aquí y vete con tus padres ya decepcionados.
Miraba mi reflejo con odio y repugnancia hacia mi misma, no podía creer que había echado todo lo que había hecho a la basura.
—Hazlo, hazlo.—Repetía una y otra vez haciendo eco en mi mente.
La mínima parte que me quedaba de sano juicio me decía que no, pero, la mayoría era mi conciencia repitiéndome que lo hiciera.
Mis ojos fijos en el reflejo del espejo expresaban temor e ira contra mi misma y sin pensarlo una vez más alcé mi puño y lo estrellé contra el espejo con todas mis fuerzas causando un dolor agudo en mi mano y que él espejo se rompiera en pedazos, mordiendo mi labio inferior para tratar de controlar el dolor de mi mano, rápidamente agarré el pedazo de vidrio más filoso y extendí mi otro brazo, bajé mi mirada para ver dónde iba a hacer la marca y entre los vidrios vi lo que había agarrado en aquella gaveta a parte de las pastillas, "Perdóname" decía, era la foto, esa foto nunca la vi, y era momento, aparté los vidrios súper rápido temiendo que Carlos escuchara todo y viniera a detenerme volteé la foto y me quedé por unos segundos en shock.
Si quería dudarlo, aunque no quería, no podía.
Él los había matado.
En la foto aparecía yo.
Era una foto que yo perdí hace años.
Esa foto había desaparecido de mi cuarto y la tenía él.
Con más decisión agarré el vidrio y lo afinqué en mi muñeca trazando una raja a lo largo siguiendo el rastro de mis venas para que me desangrara más rápido.
Ahogué un grito de dolor, esto ardía y dolía mucho, era horrible, pero, más me dolía la traición, más horrible fue enamorarme de él.
Fueron tres marcas las que hice, cada vez sintiendo más dolor que en la anterior, lágrimas habían salido de mis ojos y había manchado la foto que aún tenía en mi mano llena de sangre.
La puerta se abrió de repente y vi a Carlos entrar y su rostro cambió de preocupación a terror.
—¡MALDITA SEA SKYLER! ¡¿QUÉ ESTÁS HACIENDO?! ¡ESTÁS LOCA?!
Un dolor infinito acaparó mi cuerpo al verlo tan atemorizado y horrorizado.
—¡¿POR QUÉ, BESTIA?! ¡¿POR QUÉ?!—Comenzó a movilizarse por el baño buscando no sé qué cosa.
Yo simplemente estaba esperando desangrarme siendo consumida por el dolor, no hablaba, no me movía, no nada.
—¡SKYLER, REACCIONA! ¡NO PUEDES ESTAR HACIÉNDOTE ESTO!
Su voz era como un eco, estaba totalmente concentrada en desangrarme y morir hasta que algo chocó con mi cara y alcé mi mano lastimada por darle el golpe al espejo para agarrarlo, era una venda.
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Solo una venganza.
RandomNo todo es lo que parece. No todo lo que parece malo es realmente malo. No todo lo que parece bueno es verdaderamente bueno. Puedes sentir el mismísimo infierno estando en el jodido y perfecto paraíso. Puedes conseguir la belleza en una maldita best...