Safe and burn.

ORDEN 41: Control mental parte 3

Un restaurante viejo cuyas ventanas estaban pintadas de negro, no dejaban ver nada pro adentro sin embargo tenia un gran secreto pro adentro. Un amplio espacio con algunas computadoras, armas almacenadas y sobre todo provisiones: balas, uniformes, dinero y entre otras cosas esenciales. Todos vivían de una forma clandestina huyendo de los héroes con los que alguna vez trabajaron en conjunto y poseían el mismo rango que ellos. No había algún peligro de ser descubiertos tan pronto debido a que el lugar estaba en la ultima calle de la ciudad urbana en los barrios bajos, además de que estaba abandonado los demás locales y casas a su alrededor. Ellos bajaron inmediatamente y entraron en el local, mientras que un pequeño dron sobrevolaba el lugar, era pequeño como un mosquito y prácticamente invisible ante el lente de algún otro sistema de seguridad.

—¿Qué es lo que ves? —Pregunto un Incinerador muy extraño, con un gran cuerno y un extraño traje, pero poseía unas garras bastante prominentes, mientras que a su lado iba otro incinerador pequeño con una forma más amigable pero con una extraña aura oscura. Los dos iban dentro de una limosina negra que viajaba por la ciudad.

—Bueno, los rastros de la mayor concentración de calor en la ciudad me indican que fueron a ese apestoso lugar. —tan pronto termino de decir eso comenzó a bostezar y dejo el dispositivo donde controlaba al don a lado de ella. —Chofer, por favor llévenos a la dirección que le mande a su GPS.

Aquel Daemonium que iba manejando no dudo en obedecer, ya que no había de otra forma. Tenia un miedo horrible ya que en los pies de aquellas dos creaturas se encontraban los cadáveres mutilados de los dueños de aquel vehículo y solo podía sentir como lo miraban con una sed horripilante de destrucción.

.

.

.

—Kohle... —Dijo una chica de cabello azul que sostenía una foto, ella se encontraba recargada en una silla de oficina mientras bebía algo de agua. Inmediatamente vio como la puerta se abrió y ella rápidamente tomo una pistola de bala fría para apuntar a los supuestos intrusos, pero rápidamente vio que solo se trataba de Jenny.

—Tranquila violenta, somos nosotros.

—Perdón, ¿Qué tal su viaje? —Pregunto María que le dio un trago a su agua.

—Bueno, encontramos a nuestros invitados de SAB.

Tras haber dicho eso, iban entrando: Julieta, Akari y Aqua.

—¿Ustedes son el famoso equipo SAB? —Pregunto María mientras saludaba a todos.

—Safe and burn es solo un lema de los rescatistas de nuestra ciudad, pero en teoría si lo somos. —Dijo Akari mientras le sonreía a aquella mujer, de la cual sintió un gran aura de tranquilidad. —Yo soy Akari Miller, la linda y tierna Animalis de mi derecho es Julieta y Aquaria la mujer de mi derecha.

—Es un gusto increíble conocerlos finalmente, yo soy María, una antigua miembro del cuerpo de bomberos. Soy una aliada del equipo explosivo.

—¿Por qué equipo explosivo? —Pregunto Julieta.

—Bueno, porque literalmente a donde vayamos hacemos que todo comienza a explotar. —Le contesto rápidamente Jenny quien estaba preparando unas tazas de aceite caliente.

—Nosotros, los hemos convocado debido a que pensamos que tenemos una llave que podría suponer un punto y aparte en esta guerra contra Terra.

—¿llave? —Pregunto Aqua quien busco en un refrigerador lejano algo para tomar.

—Por lo que veo... no se encuentra con ustedes el incinerador aliado... ¿Kain se llama no?