—¡Basta María, deja de causar problemas! —Grito Miller asustado a ver dos rescatistas de tan alto prestigio. Prácticamente se levanto e intento taparle la boca a su compañera, sin embargo ella respondió mordiéndole la mano.
—No venimos a buscar problemas, si no ayuda. —Dijo Franklin sentándose en la silla.
—Uh... Franklin... levántate de... la... silla... —Dijo Glatt viendo como la silla se prendía en llamas.
Franklin se sintió bastante avergonzado y saco su cartera para pagarle directamente al dueño del lugar.
Tras pasar esos momentos de vergüenza Franklin invito a María a acompañarlos a su camión de rescate que se encontraba estacionado afuera.
—¿No vienes corazón? —Dijo mirando a Miller que inmediatamente acepto la invitación de aquel rescatista.
Una vez adentro ella se sentó a un lado de Franklin quien encendió el camión y comenzó a andar. Los dos bomberos se comenzaban a sentir sofocados pero de inmediato recibieron mascaras especiales para respirar cerca de un rescatista de parte de Glatt que en la parte de atrás comenzó a leer un libro bastante grueso que hablaba sobre el cultivo.
—¿Te gusta cultivar? —Pregunto Miller.
—Me... gustan... las... verduras....
—Pero... ustedes solo comen carbón ¿no?
Miller veía como Glatt seguía mirándolo.
—Y... las... frutas...
Glatt seguía hablando, aunque era muy lento para la velocidad de reacción de Miller que esta acostumbrado a hablar mucho. Su ansiedad no se llevaba muy bien con la lentitud de Glatt.
—¿El cómo se ven...?
—Verlas... crecer... con el tiempo...
Mientras ocurría eso, María veía como Franklin manejaba a dirección contraria a donde debería de encontrarse su base, inmediatamente eso le dio una espina. Pero de pronto fue interceptada por Franklin.
—Creo que ya te disté cuenta que no estamos en camino a la base de rescatistas.
—¿A dónde estamos yendo? —Pregunto con algo de confianza y a la vez temerosa. El rostro de aquel sujeto claramente escondía algo turbio que estaba escondiéndose en una oscuridad publica... esperando a salir en cualquier momento para mostrar sus garras y dientes afilados.
—Hace mucho tiempo descubrimos que nuestro director, el que nos contrataba y nos suministro la inyección de la cual nos volvió rescatistas de incendios de incinerador... resulto también ser una de esas bestias.
—¿Qué...? —Pregunto María desconcertada.
—Kari, una de nuestras compañeras descubrió eso en el momento en que su hermana fue remplaza en su base... un lugar muy lejos de aquí.
—¿Y eso que tiene que ver?
—Su hermana obtuvo misteriosamente un ataque directo en su corteza cerebral que la dejo en coma... ella prácticamente era un demonio en combate y suena muy sospechoso que después fuera remplazada por una chica de cabello azul...
—¿Y eso que tiene que ver una cosa con la otra?
—Kari, la mujer de la que te hablo fue a investigar y encontró un diario muy viejo con respecto a su trabajo. Uno de sus primeros inicios. Kari tiene más de 10 años de servicio, no son tantos como los de su hermana Mami. Había otros diarios pero no hablaban sobre lo que ella quería investigar.
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Safe and burn.
PertualanganEn un mundo caótico lleno de super poderes, se da la tarea de tener todo en orden, y esa sera su misión. Rescatistas que se encargaran de eliminar bestias llamadas "Incineradores" cuyo objetivo es crear incendios para alimentarse de ellos. Una histo...