Capitulo 41 (Editado)

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Pov's: Amelia

- Creo que no es buena idea que te vayas a esta hora - le digo a Alex - esta lloviendo mucho y es peligroso que conduzcas - le digo intentando convencerlo de que se quedara.

- Si Amelia tiene razón es peligroso- dice Bev apoyándome.

Brad lo mira y asiente.

- Bueno creo que tienen razón- dice Alex soltando un suspiro.

- Si y además tenemos muchas habitaciones - dice Brad.

Alex asiente y saca su teléfono del bolsillo.

- Voy a llamar a mi madre para que no se preocupe- dice marcando un número.

Nosotros asentimos con una sonrisa.

- Bueno yo me voy a dormir- dice Bev subiendo las escaleras.

Brad me mira el me hace una señal algo disimulada. Al principio no lo entendí pero después entendí que quería que me fuera.

- Yo creo que también me voy a dormir estoy súper cansada- les digo.

Alex asiente porque está hablando por teléfono.

- Esta bien que descanses- dice Brad con una sonrisa.

Empiezo a subir las escaleras, ya los demás se fueron a dormir solo estábamos nosotros. Son la 1:00 de la madrugada y está lloviendo muy fuerte.

Cuando entro a la habitación las luces están apagadas solo hay una que está encendida, intentó enfocar bien mi vista pero se me hace difícil. Escucho el agua de la ducha así que camino para la cama pero me doy en el pie con la pata de la mesa que está en la habitación.

- Maldición.!- gritó un poco.

Sobo mi dedo del pie intentando que el dolor se vaya. De repente siento unas manos en mi cintura que hacen que mi piel se erice.

- Estás bien?- pregunta Damián.

- Si es solo que...- empiezo a decir pero dejo de hablar cuando me volteo y veo su torso al descubierto dejando a la vista su trabajado cuerpo.

De momento empieza a hacer calor en la habitación.

- Que estabas diciendo?- pregunta mirándome con una sonrisa divertida.

- Es..que me .. di en el.. pie - le digo nerviosa.

(Por Dios Amelia reacciona!) me regañó.

Es que con solo ver su torso al descubierto ya quiero besarlo y tirarlo en la cama.

(Amelia no tú no eres así) me reprendo.

Damián se acerca más a mi y eso hace que un nerviosismo llegue a mi. Él pone una mano en la toalla que tiene en su cintura y me mira con una sonrisa traviesa.

- Ni se te ocurra- le advierto.

- Por favor cariño si tú y yo sabemos que si quieres - dice divertido.

Yo retrocedo cuando el se sigue acercando más a mi.

Aunque el tiene toda la razón no lo voy a aceptar.

- Claro que no - le miento.

Mis piernas chocan con el borde de la cama y él aprovecha para acorralarme.

Sus ojos me miran con diversión, lujuria, pasión, amor y un sin fin de emociones en ellos. El pasa su otra mano por mi brazo y siento como mi piel se calienta con solo su toque.

- vamos admítelo - dice dando un beso en mi cuello.

- Al diablo con esto - le digo.

Pasó mis manos por su cuello y acerco sus labios a los míos en un beso apasionado, el me agarra por los muslos y me acuesta en la cama. Nos separamos un momento para respirar y él aprovecha para quitarme la camisa y el jeans. Yo de un tirón me quito los zapatos así  quedando en ropa interior ante su mirada.

- Eres tan hermosa y solo mía - dice y empieza a repartir besos por mi cuello, brazos y abdomen.

De un tirón quedó totalmente expuesta ante su mirada recorro con mi mirada llena de deseo su cuerpo y veo que la toalla se calló ya hace varios minutos.

- Ya no aguanto mas bebe - dice desesperado.

Su mirada está llena de deseo. Yo asiento porque yo también lo necesito.

El se acomoda entre mis piernas y entra en mi rápido, mi cuerpo lo recibe gustosamente. El movimiento de sus caderas junto con las mías son como un baile.

- Te amo tanto- dice y junta nuestros labios.

El ritmo aumenta y poco a poco vamos llegando a nuestra liberación. Cuando llegamos juntos en ese momento siento que este es mi lugar ya no quiero escapar nunca más de el.

- Yo también te amo - le digo y vuelvo a juntar nuestros labios.

Alpha DamiánDonde viven las historias. Descúbrelo ahora