Alpha Damián

Capitulo 46 (Editado)

Pov's: Amelia

Los nervios y la felicidad se apoderan de mi al ver que el auto se estaciona al frente de la casa.

Un sudor frío llega a mi cuerpo, Damián coge mi mano y la aprieta así tranquilizándome.

Las puertas se abren así dejando ver a mi amada madre que se parece tanto a mi. Cuando baja del auto sus ojos se conectan con los míos y se llenan de lágrimas, ella corre hacia mi.

Suelto la mano de Damián y voy hacia donde ella, cuando estoy cerca la abrazo y la pego a mi cuerpo.

Lágrimas de felicidad corren por nuestros rostros.

- Mi niña no sabes cuanto te extrañe - dice y me aprieta más a su cuerpo.

Siento como papá también se nos une.

- Mi pequeña- dice.

Lo miro y veo algunas lágrimas en su rostro.

- Yo también los extrañé mucho- les digo en medio de un sollozo.

Cuando nos separamos ellos me miran con una gran sonrisa.

- Que bueno que estás bien- dice papá - te estás alimentando bien?- pregunto mirándome.

- Si papá - le respondo con una sonrisa.

Mamá saca un pañuelo de su cartera y seca las lágrimas que bajan por su rostro.

- Me alegra que estén aquí- les digo.

Me acerco a Damián.

- Papá, Mama el es Damián mi pareja - les digo.

Mamá lo mira y le sonríe, mi padre lo mira seriamente.

- Es un gusto conocerlos al fin - dice Damián y los saluda.

Papá y él estrechan las manos.

- El gusto es nuestro- dice mi madre con una sonrisa.

- Te agradezco que estés cuidando a mi hija - dice mi padre mirándonos.

- Siempre la voy a cuidar- le dice Damián con una sonrisa y me abraza por la cintura.

(*************)

- Me alegra tanto que estén aquí - dice Bev mientras abraza a mis padres.

- Si también a nosotros- dicen ellos con una sonrisa.

Bev para ellos es como su segunda hija.

Ahora estamos todos reunidos en la sala ya les presente a mis padres a los primos y hermanos de Damián.

- Bueno ya está la comida- dice una de las sirvientas de la casa cuando entra a la sala.

- Vamos a comer- dice Kami saliendo de la sala.

(*************)

Ya pasaron dos días desde que llegaron mis padres a la casa, ellos están muy felices de poder verme y estar conmigo.

Ayer Damián y yo tomamos la decisión de decirles a mis padres la verdad sobre su especie, estaba algo nerviosa ya que no sabía cómo se lo iban a tomar.

Pero cuando se los dijimos ellos se sorprendieron y se echaron a reír, diciendo que eso no existía y que eran bromas de nosotros.

Damián no tuvo más remedio que llevarlos al patio y transformarse en lobo en frente de ellos.

Ellos estaban sorprendidos y también asustados pero después de un rato lo fueron aceptado.

Me alegro que ninguno se desmayo o algo por el estilo ya que no quería que eso sucediera.

Todavía no lo creen pero poco a poco van aceptando el mundo licántropo que antes estaban ajenos de que existía.