A Través De Nuestros Ojos

Problemas serios VI

Mientras tanto en la recepción, Erick bajó a Tony y lo observó de pies a cabeza, sintió alivio cuando se percató de que el menor no tenía ni un rasguño.

—¿Estás bien, Tony? —cuestionó Erick de cuclillas.

—Sí, ¿Qué pasó? —El castañito no había entendido por qué se lo había llevado de esa manera.

—Nada, son cosas de adultos... por cierto ¿Quién era ese? —no sabía cómo explicarle al niño sobre los pedofilios.

—Ah, era mi papá Jarvis, quería que cerrara la puerta porque quería ropa, entonces yo cerré la puerta y mi papá me dijo que los había salvado y... —Explicaba el niño pero fue interrumpido por el mayor.

—¿Salvados? —Se confundió el más grande. —¿Tú papá? No me digas que...

—Sí, mis papás.

—¿Cómo se llaman tus papás? —sudó un poco, no quería ni imaginarse eso.

—Mi papá se llama Edwin Jarvis de Stark y mi papá se llama Howard Stark de Jarvis. —sonrió el niño.

—Solo te pregunté el nombre no el nombre completo... —giró los ojos, ¿Por qué Howard no le había dicho que ya había formado una familia? Rara, pero a fin de cuentas una familia. —Pero eso no quita de lado que anden haciendo sus cochinadas en el trabajo y más si esta su hijo.

Pocos minutos después llegó Howard y Jarvis. —Por fin los encuentro. —dijo agitado Jarvis. —¡Lo que vio fue un malentendido!

—Ya lo sé, Tony me dijo todo. —miró a Howard con el ceño fruncido. —Escuchen, no me importa quien se lo mete a quien, pero si van a jugar a las cebollitas, sean más responsables. —regañó a ambos pero parecía que el regaño era más para Howard que para Jarvis. —Son unos pervertidos de mierda, así que hablaremos después, Stark.

—Por favor no le digas a nadie que andabamos de pervertidos. —El pelicafé rogó muy disimuladamente. —¿Si?

—Como son ustedes no es necesario que lo divulgue y tienes suerte que seamos amigos de lo contrario te costaría bastante. —se dio media vuelta y salió del ahí.

—Gracias. —dijeron ambos hombres.

—El señor Erick me dijo que les dijera que se compren un dildo en vez de jugar con los bolígrafos de la oficina. —el menor asintió. —¿Qué es un dildo?

—...

—...