Howard caminaba apresurado ya que iba tarde a una junta con varios inversionistas, llegó a la cocina en donde Jarvis trataba de darle de comer su sopa a un bebé Tony de dos años.
—Buenos días. —saludó Howard sirviéndose una taza de café totalmente apresurado.
—Buenos días. —respondió Jarvis intentando darle una cucharada de comida al bebé pero éste se negó. —No logro que Tony coma...
Howard abrió los ojos y con disposición a irse habló. —Voy tarde no hay tiempo para Tony... —se detuvo y agarró la caja de cereal para verla con detenimiento. —Encuentra a Waldo... —leyó y comenzó a buscarlo. —Aquí está... Ah.. No es... ¿Waldo dónde estás? —cuestionó con desespero.
—¿Tiene tiempo para eso pero no para su hijo? —Jarvis frunció el ceño. —Es increíble. —dijo con sarcasmo.
—Hay prioridades. —habló, vio su reloj y se apresuró aún más. —¡Debo irme, es tarde! —se acercó hasta Edwin y besó su mejilla notando que éste se había enojado. —Nos vemos más tarde, cariño. —salió a paso veloz rumbo a su trabajo.
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A Través De Nuestros Ojos
Hayran KurguLas cosas podrían ser diferentes, las situaciones podrían ser distintas pero ambos sabían que estaban hechos el uno para el otro. ----- Así como podrían ser cortos también podrían ser historias más largas.
