COMPLICATED MYG (LOVE BOOK 2)

NINETEEN

–Vamos Picazo, tenemos que comprar tus cosas para que cocines.

–Ya voy Min– dije irritada.

Min había decidido que sus amigos vinieran a comer, después de la firma de autógrafos no los había vuelto a ver, y eso fue hace como 3 o 4 meses, y si, yo tenía que cocinar.

Íbamos rumbo al super mercado, como siempre puse mi música a un volumen muy alto, pero vamos YoonGi debía de pagar de alguna manera.

–¿Que quieres que cocine?– dije cuando llegamos al llegar al súper mercado.

–Tu típica comida Mexicana– dijo mientras tomaba un carrito de compras.

La comida Mexicana no es complicada de hacer, lo complicado es conseguir los ingredientes en un país con cosas totalmente diferentes.

Ambos íbamos caminando por los pasillos tomando cosas para la comida, pero de repente escuchamos algo que nos puso muy nerviosos a ambos.

–¿Ya viste cariño? Así nos veíamos cuando éramos jóvenes– dijo una señora a su marido.

–Amor déjalos en paz– reprendió su esposo.

–¡Hey tú! Chica, ¿Cuánto llevan?

–¿Yo?

–Oh, lo siento tal vez no hables coreano– dijo al ver mi cara.

–Tranquila, si, si lo hablo, Amm... y no somos pareja, sólo somos amigos– respondía amable.

–Conocidos– susurró YoonGi.

En verdad este chico buscaba los peores lugares para hacerme sentir mal, ¿Por qué tiene que ser así conmigo?.

–Un gusto conocerlos– dije– tenemos que irnos.

–Igualmente nena– se acercó a mi– te mereces a alguien mejor– dijo y se fue.

Terminamos de hacer las compras y nos dirigíamos hacia el departamento, ambos íbamos en silencio, en especial yo, las ganas de hacer algo el día de hoy se quedaron en aquel pasillo después de ese susurro.

–Lamentó lo que dije Sam– YoonGi rompió el silencio.

–Ya me acostumbré– dije mirando por la ventana.

–Sabes que no soy bueno con las palabras– dijo.

–Si no fueras bueno con las palabras no serias cantante ni compositor, YoonGi, no tengo a donde ir, y no regresaré a Daegu, pero te prometo que en cuanto pueda, te dejaré, esto sólo es temporal– dije e intenté bajarme del auto, ya habíamos llegado, pero YoonGi tomó mi mano.

–Me gusta que vivas conmigo, eres mi mejor amiga Sam, no quiero que te vayas, puedes quedarte el tiempo que quieras– dijo y me beso la mejilla a modo de disculpa.

Ambos comenzamos a bajar las compras que hicimos, después de eso, ninguno de los dos dijo nada más.

–Bien, limpia el departamento y yo haré la comida– le dije a YoonGi y me metí a la cocina.

Como era costumbre puse mi música a todo volumen, a YoonGi ya no le molestaba eso, incluso le gustaban algunas de mis canciones.