58. Todo era difícil

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Lau POV

*flashback*

Por primera vez le había podido decir a Ross la razón por la que nunca me lo tomaba en serio. Y odiaba que tuviera ésta reacción como si no entendiera.

—¿Te enojaste? —pregunté.
—Sólo soy realista.
—Odio esa estúpida palabra, siempre que avanzamos un mísero casillero, la dices. Como si lo que vivieramos fuera de mentira. Como si lo que sentimos fuera sólo actuación. Y luego te preguntas por qué no te tomo en serio.
—Deja de buscar excusas estúpidas, estoy cansado de ti. Cansado de esto. Ni siquiera se porque continuamos con ésta relación vacía.
—Asíque sólo tenemos una relación vacía. Bien —me saqué el anillo y se lo di—. Dale esto a alguien que consideres real. Yo soy la que se cansó de ti —empecé a caminar a la salida—. Adiós —me volví a él—. Has con éste lugar lo que quieras, te lo regalo. Vuelve a mostrarselo a tu estúpida Julieta.
—Eres tan infantil, es hora de que madures Laura. Ya no tienes quince años —a pesar de que dijo eso, no me volví. Hasta acá había llegado yo.

Luego de un par de días de no saber nada de Ross, un mensaje llegó.

"Las cosas de ese día quedaron guardadas bajo el escenario. Yo no fui capaz de tirarlas. Si tu quieres hacerlo, hazlo. Yo no necesito ese lugar así que usalo como quieras. Adiós."

¿Sólo eso diría? Estaba aún más molesta.

Lau: ¿No piensas pedir disculpas? ¿Sólo me escribes para decirme algo tan estúpido? Y como ya te dije TE REGALO ESE LUGAR.
Ross: No pienso discutir contigo por cosas tan estúpidas.
Lau: Idiota. Te odio.

El me llamó luego, pero las cosas empeoraron más. Dijimos demasiadas cosas hirientes. Todo se rompía cada vez más.

Al parecer éste era el fin.

*fin de flashback*

Empecé a abrir los ojos y lo primero que vi fueron las caras de mi hermana y Rydel. Parpadee varias veces para acostumbrarme a una brillante y blanca luz.

—¿A donde estoy?
—¡LAURA! Al fin despiertas, me tenías tan preocupada —gritó Vanessa y se tiró sobre mi—. ¿Estas bien?

Alguien sostenía mi mano, mire a mi costado y Ross estaba ahí un poco perdido, como yo.

¿Qué había pasado?

Ross se reincorporó. —San Francisco. Debemos ir allí.

Ahora todo estaba claro, ya no habían más lagunas ni porciones en blanco. Mi memoria estaba al cien, todo había vuelto.

—¿A donde piensan ir? —gritó Rydel—. Ustedes deben quedarse aquí hasta que les den el alta. Estamos preocupados.
—Además San Francisco está bien. No se preocupen y descansen —dijo mi hermana.
Me senté. —¿Pudieron apagar el incendio? —pregunté ya sabiendo la respuesta.
Rydel asintió. —¿Cómo sabes eso?

Vi que Ross ya estaba tratando de vestirse. Yo haría lo mismo.

Mi novio abrazó a su hermana. —Gracias por todo Rydel, eres una hermana tan genial.
—¿Qué quieres?
—Como eres tan genial, nos cubriras, ¿no?
Rydel salió del agarre. —Por desgracia no puedo negarme a un pedido de mi hermano menor. ¿Pero me aseguras que estás bien?
Asintió. —Fresco como una lechuga.
Vanessa tomó mis manos. —¿Tu estas bien? ¿Te duele algo?
Sonreí. —Soy una fresca lechuga como mi novio.
Me soltó riendo. —Vayan, aunque luego nos deben una larga explicación sobre ese lugar. ¿De verdad lo compraron?
Me empecé a vestir. —Vanessa no te cuento todo lo que compro, sería raro —dije sonriendo.

Terminamos de vestirnos, salimos de esa sala como pudimos y sin que nadie nos viera. Cuando salíamos del hospital nos encontramos a Ryland.

—¿Qué hacen acá afuera? ¿No deberían estar en observación? —preguntó preocupado.
—Estamos bien, no te preocupes. Luego hablaremos, por el momento, ¿me prestas tu auto?
Asintió. —¿Seguro que puedes conducir? Si quieren yo los llevo a dónde quieran ir.
—Estamos bien, tu quédate aquí y ayuda a Rydel a cubrirnos.
—¿Van a San Francisco? —asentimos. Él miró para otro lado. —Bien, solo quiero advertirles que el estado en el que quedó no es muy bueno —nos miró—. Se hizo todo lo que se pudo.
—No te preocupes Ryland —dije para tranquilizarlo—. Solo iremos a buscar algo que sabemos que esta ahí. El edificio es lo de menos.

El menor de los Lynch le dio la llave de su auto a Ross y ambos nos fuimos rápidamente. Cuando llegamos no podíamos creer como había quedado el lugar, dolió un poco.

Ross me abrazó. —Lo reconstruiremos, no te preocupes.
—Si, lo se. Quedará aún mejor.

Ross habló con los bomberos que cuidaban el lugar ya que por el incendio habían cosas que aún podían caer, el techo por ejemplo. Les explicó que éramos los dueños y que sólo necesitábamos sacar algo del lugar.

Nos acompañaron hasta el escenario el cual seguía intacto, no tenía ni un rasgo de que un incendio se había producido aquí.

—No sabemos por qué razón al escenario no le paso nada, las llamas se detenían a su alrededor —dijo uno de los bomberos.
—Era como si algo lo estuviera protegiendo —comentó el otro.

Sonreí. Ross caminó a la tabla floja de aún lado del escenario que era donde había metido la caja. Lo seguí. Mire atenta mientras sacaba lo que habíamos venido a buscar.

Los bomberos nos acompañaron de vuelta a la salida, les agradecimos y volvimos al auto. Una vez adentro, abrimos la caja.

—Crei que estas cartulinas ya estarian algo decoloradas —dije tomando las hojas de colores. Iba a leerlas pero Ross me detuvo.
Él sostenía una pequeña cajita entre sus dedos. —¿Quieres volver a hacer esto ahora o quieres que lo hagamos bien?
Sonreí. —Lo quiero ahora, después lo hacemos otra vez sino. Ya estuvimos separados mucho tiempo, y ese día...
Me interrumpió. —Dijimos cosas que no queríamos porque estábamos asustados. Todo era difícil.
—Siempre nos asustabamos cuando éramos impulsivos y hacíamos lo que sentíamos —reí—. Siempre tuvimos miedo de lastimarnos, de que nuestra amistad se arruinara y que todo cambiara.
Sonrió. —Sólo te necesito a ti en mi vida, ya no quiero huir ni negarlo más. Te quiero junto a mi para siempre —paso su mano por mi mejilla.
—Yo también te quiero junto a mi para siempre, contigo me siento completa. Todo es más fácil si tu estás junto a mi.
—Te amo Lau.
—Y yo te amo a ti Ross.

Acortamos la distancia y nos fundimos en un cálido beso.

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Holaaaa!! Aquí nuevo cap y mostrando un poco más lo que pasó.

Se viene una gran explicación de todo en el próximo capitulo, ¿habrá algo más que nadie sepa? ¿Ross y Lau podrán empezar a ser felices juntos?

Gracias por leer, votar y comentar. Nos leemos el domingo, besitos 😙

San Francisco - Raura (Ross Lynch y Laura Marano)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora