Capítulo LIX parte 1

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Marzo 3

Intentaba pero no podía recordar otro momento en el que se hubiera sentido tan ansiosa como ahora mientras esperaba a la doctora Collins en el bar de Chart House, uno de los mejores restaurantes de Nueva Jersey. Había leído las criticas del restaurante en línea un par de horas antes de llegar y no podía estar más que entusiasmada por confirmar personalmente si los elogios al igual que las quejas, eran ciertos. Sonrió en agradecimiento al camarero por haber rellenado su copa de vino, pero ni todo el alcohol del mundo podía reducir los nervios que sentía recorrer cada centímetro de su cuerpo al saber que dentro de unos minutos volvería a verla.

Luego de aquella tarde en el café la relación tan estrecha que mantuvieron en el pasado volvió a tomar lugar en sus vidas, tanto que no había un solo día que terminara antes de que alguna enviara algún mensaje tonto simplemente por el placer de obtener una sonrisa y hacerle saber a la otra que había pensado en ella. Era demasiado pronto para decir que estaba enamorada pero no para entender que Tyra Collins le gustaba mas de lo que debería.

—Siento llegar tarde —se disculpó con la voz agitada mientras se ubicada a su lado y la saludaba con dos besos en la mejilla, un sutil movimiento por parte de Lauren y el beso hubiera sido en la boca. —La reunión se demoró mas de lo que pensé y el doctor Branson no ayudaba con su insistencia sobre tomar otra copa juntos. ¿Tienes mucho tiempo esperando?

—No demasiado.

—A juzgar por tu aliento, yo diría que es tu segunda copa de vino. Lo cual se traduce a que como mínimo llevas más de media hora esperando. —sintiéndose descubierta y un tanto achispada por el alcohol que ya comenzaba a circular en su sangre, Lauren alzó las manos dándose por vencida mientras esbozaba una sonrisa tímida.— De verdad lo siento. Esta es la primera y ultima vez que te hago esperar. ¿Vamos a la mesa?

—Primero toma una copa conmigo.

—Me parece justo pero yo tomaré esa copa mientras tú me cuentas como ha estado el día.

—¿No hay vino para mí?

—Lo siento pero no, — respondió juguetona— ya agotaste tu ración diaria. Aunque tal vez podría darte un poco, si es que logras convencerme.

La sensación de comodidad que vino después de su pequeño lapsus de risas era tan placentera que ninguna tuvo la necesidad de decir nada, simplemente se mantuvieron en el limbo, sonriendo y sin dejar de mirarse.

—¿Señoritas? — el mismo mesero que había rellenado su copa se atrevió a interrumpirlas, no sin antes esbozar una sonrisa en la que suplicaba no ser reprendido por la intromisión. —Su mesa está lista. Si son tan amables de seguirme yo mismo las llevaré.

Y así fue, el mesero las condujo a través del reducido espacio que dejaban las personas reunidas en el bar que como ellas también esperaban una mesa. Finalmente llegaron a un amplio salón cuyas mesas estaban distribuidas de manera indistinta pero que debido al espacio, daba la sensación de orden, cosa que ambas apreciaban en exceso. Las ventanas altas y transparentes acentuaban las preciosas vistas de un mar tranquilo que acrecentaba la sensación de paz y comodidad que habían notado nada más entrar.

Todo estaba resultando perfecto y Tyra se lo hizo saber en cuanto estuvieron solas.

—Es mi primera vez en este sitio. La verdad es que no suelo frecuentar restaurantes en los que es necesario usar prendas que vayan de acuerdo con el código de etiqueta. —admitió, no sin cierta timidez, misma que Lauren compartió cuando le dijo que ella misma había buscado el sitio en Internet y había comprobado una y otra vez que su atuendo estuviera apegado a la vestimenta del lugar. —Vaya par de ignorantes que somos ¿no lo crees?

It Will Rain (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora