GIROS DEL DESTINO

CAPITULO 14 RENACIENDO DE LAS CENIZAS II

CAPITULO 14 REENCUENTRO II

Cuando el corazón ha sido herido más de una ocasión, no queda más que superarlo ¿no es verdad? Muchas veces escuchamos este tipo de respuestas cuando estamos heridos, este y mil consejos que a nuestra vista no son más que basura barata, para poder darnos "ánimos" que realmente no tenemos o no queremos simplemente tener.

¿Por qué? ¿Cómo le dices a tu corazón que olvide? ¿Cómo sanar heridas que no se pueden sanar tan fácilmente? ¿Cómo decirle a tu mente y todo el sufrimiento que pasaste que lo deje de lado para renacer de las cenizas? ¿Cómo decirle al alma que no llore más que lo supere? Es simplemente sencillo, como sabemos no podemos lamentarnos toda la vida por heridas que nos causaron, pero cuando las heridas marcan nuestro destino ¿entonces olvidarlo es una opción?

Cuando el destino es marcado por el dolor causado...tal vez solo tal vez el renacimiento de entre tus cenizas no sea como todos esperaban...

A.B.A

Elisa miraba colérica al rubio que tenía enfrente, no podía creerlo ¿Con que derecho se atrevía? Aunque pensándolo mejor...no, no podía no era parte del trato que tenía con el señor Evans.

-¿quedo claro Elisa?

-La tía abuela se enterara de todo esto

-La tía abuela, mi tía abuela, sabe que como el jefe de la familia tengo todo el derecho de hacer lo que mejor me parezca y que mis órdenes y reglas son definitivas, Candy es mi hija adoptiva y como tal quiero que se le trate además de que ya sabes que es también la viuda de tu tío a...

-No lo era y lo sabes ¿No?

-Como sea, era lo que era, por lo que te pido más respeto ¿De acuerdo?

-No lo hare y quiero que se vaya...

-No tienes ningún derecho de pedirle que se vaya, solo yo –Albert se puso a un lado de la rubia –Por lo que te digo que no eres bienvenida en mi presencia por lo que te suplico que te vayas y no vuelvas a menos que sea para ver a la tía abuela

-Maldita zorra, seguramente ya engatusaste también al tío y...

-Cuida tus palabras Elisa, no quiero olvidar que eres mujer, digo mujer porque dama no eres

La pelirroja abrió los ojos más molesta que antes y solo atino a apretar los puños y dar media vuelta para irse, antes de salir de la vista de todos miro a Candy –Maldita asesina lo mataste como mataste a Anthony, mi Anthony

-Te sacare a patadas –Dijo Archie reaccionando acercándose rápidamente pero la pelirroja ya había comenzado nuevamente la marcha, por lo que no la alcanzo pero cuando volvió al comedor, ambos rubios seguían parados sin decir nada, Candy mirando al suelo y Albert mirándola con preocupación -¿Pueden explicarme? –Pidió molesto

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Damon estaba en la pequeña terraza de su alcoba, lo que le había comentado Terrence era algo intolerable para el ¿Cómo es posible que un padre pueda hacerle eso a un hijo? Aunque él no era mejor, no desmentirlo era apoyar lo que otra persona inicio pero ¿Qué si le decía la verdad de todo? Seguramente Candy caería a sus pies de nuevo y no quería eso... ¿Por qué no quería eso? ¿Por qué le importaba tanto esa joven? Era obvio que ella no le importaba ¿Entonces porque él estaba como un loco sin saber de ella?

-¿Anthony? –Escucho aquel nombre que le hizo que una corriente eléctrica recorriera todo su ser, como si algo que estuviera dormido despertara un poco de su sueño eterno.