GIROS DEL DESTINO

CAPÍTULO 23 LA IRONÍA DEL AMOR I

CAPITULO 23 ¿BODA FORZOSA?

POR EL HONOR DE LA FAMILIA

¿Qué es correcto, que no lo es? El matrimonio y la lujuria, van de la mano, la gente no ve mal tener relaciones sexuales cuando alguien se casa, entonces ¿Por qué verlo mal cuando dos personas se aman? Miles de cuestiones y conflictos entran en juego en este juego de fuego que muchos se queman antes de llegar a la flama.

El matrimonio solo se debe consumir cuando las personas se aman por eso es ante los ojos de dios para que este bendiga la unión y el amor que ambas se profesan para poder cuidarse, alentarse, llenarse, complementarse y apoyarse para que el otro sea mejor cada día, para que ambos crezcan como humanos y como pareja, como unión, pero ¿Quién realmente lleva a cabo esto? ¿Quién realmente se casa con amor y por amor? Son contadas las personas que llegan a hacerlo y que después de años de matrimonio y unión sigan viéndose con amor y con realismo.

El realismo no es no aceptar a la otra persona como es, al contrario es reconocer sus virtudes y sus errores, que todos cometemos errores es lo primero que uno como persona debe saber para poder aceptar los errores del otro, y aprender y hacer que aprenda también la otra persona sin agredirla, pues de esto trata el amor.

Claro que hay de errores a errores, no es lo mismo un grito a un golpe, no es lo mismo una escapada de la realidad porque el ambiente no es agradable para la otra, por lo que se va para estar solo, a irse a engañar a la pareja porque esta no hace lo que uno quiere.

El amor es unión, comprensión, complementar, mas no es una condición, humillar, torturar y sobretodo no se puede basar en la desconfianza.

Pero cuando no hay amor ¿Cómo puede ver unión? Cuando no hay más que dolor no puede haber amor, por lo que no puede haber matrimonio, porque solo se terminara con más dolor o locura.

¿Cómo salir de los estereotipos que pone la sociedad? ¿Cómo terminar con el tabú que hay al hablar de la virginidad de las mujeres? ¿Cómo aceptar como humanos no como sociedad, que la virginidad si es un tesoro, pero que puedes decidir a quién dárselo? A aquella persona que ha ganado el corazón propio, aquel que ante los ojos de dios sería el único, pues al final unirse ante él, es eso, es amor porque el mismo es un acto de amor, como nosotros debemos serlo siempre.

C.A.

Candy miraba a la tía Elroy con molestia mientras esta insistía en que Neil tenía que reparar la falta que había hecho la otra noche, los Leagan no parecían disgustados al menos no la señora Leagan, pero no se podría decir lo mismo que el padre, quien solo miraba con decepción a su hijo, ¿Cómo era posible que no aprendiera nada de él? Se veía tan avergonzado.

-Lamento mucho lo que paso…señora Elroy yo…

-Se compondrá solamente si Neil se casa con Candice, sé que no era doncella cuando…bueno cuando paso lo que paso ¿Cierto Neil? –Dijo algo avergonzada Elroy

-En efecto tía, pero sé que aun así debería ser hombre y… -Miro a su padre quien estaba ahora con el semblante furioso

-Neil responderá señora Elroy, díganos la fecha de la boda y demás, pero por favor no quiero que den dote de Candy, ese será el castigo de Neil.

-Bueno tampoco hay que ser tan extremistas, Neil no es un niño y Candy tampoco, ambos sabían que estaban haciendo y no es tan inocente ya ella, en todo caso inocente seria mi hijo, ella ya estuvo casada y…

-Eso no está a discusión querida –Interrumpió el señor Leagan tomando la mano de la señora Leagan quien hizo un gesto de molestia pero no volvió a decir nada

-Bien la boda será en una semana porque no quiero que…

-Estoy comprometida ¿Acaso lo olvidan?