Al salir finalmente de la carreta observé a mi alrededor, podía diferenciar con la mirada a quiénes habían cambiado, a quiénes tenían celestes sus ojos, aunque no viera dichos, era algo extraño.
Sentía impulso de alejar a mis chicas de ellas, pero no entendía la razón, decidí intentar controlarme pues obviamente las molestaría si me ponía a actuar celosa.
Caminamos entre la multitud y nos ubicaron en los alrededores, eran muchas istar y nos habían llamado para ayudar a evitar, y contener, conflictos.
La verdad al enterarnos de que finalmente trabajaríamos como si fuéramos parte de la guardia, la mayoría nos emocionamos, aunque no nos tomó demasiado tiempo darnos cuenta por que nosotras lo haríamos en lugar de la guardia.
Era sumamente complicado lograr estar en todas partes a la vez. La verdad es que al final logre controlarme, pero no escuche nada del discurso y apenas tuve tiempo para comer el desayuno simple que nos dieron.
Finalmente al mediodía pudimos almorzar como es debido, para luego descansar, por suerte todo esto había ocurrido a lo largo de la mañana, así que al llegar las once ya había acabado, pero hasta el mediodía seguía habiendo gente.
—¿Realmente creen que sea buena idea lo que indicaron las reinas? —preguntó Kira.
—Dudo mucho que lo sea para todas, pero no se me ocurre otra alternativa… —hablaba Dana.
—¿De qué hablan?, siendo sincera no escuché casi nada del discurso.
—Es bueno que no lo hayas escuchado —soltó Kira.
—¿A qué se refieren?
—No te desesperes, lo sabrás al volver —indicó Dana.
—Y lo dice señorita paciencia —me quejé, observé mi cuello y levanté mi cadena, que nadie sujetaba—. Me he portado bien todo el día —les dije para susurrarme justo después—. Aunque varias merecían algunos golpes —sonreí—. Me pueden quitar esto, casi me terminé asfixiando cientas de veces hoy.
Se miraron y suspiraron, Kira saco una llave de su mochila, Dana se la arrebató y corrió hacia mi para abrir la cerradura, en cuánto lo hizo la abracé.
—Tú cuello esta algo rojo —sonrió Lucía—. Creo que tengo una crema para eso.
—Ya les dije que casi me ahorco varias veces porque la gente la pisaba.
—¿Puedes soltarme? —preguntó Dana casi asfixiada, en ese momento me di cuenta de que la estaba abrazando con demasiada fuerza.
—¡Lo siento! —me disculpe soltándola y mirando mis manos.
—Tranquila… No fue nada —me sonrió, pero por como acariciaba sus brazos era obvio que la había lastimado.
Quise decir algo más pero Lucía me detuvo.
—Quédate quieta para que te ponga esto —me dijo poniendo la crema en mi cuello, sus dedos en mi piel me hacía sentir tan… Excitada.
Di un suspiro de placer y ella alejó sus dedos de mi, las miré totalmente humillada al darme cuenta de lo que pasó. No solo ellas, muchas se dieron cuenta.
—Creó que necesitarás ayuda.
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Los Secretos de Miriastir.- Intervención Divina
FantasyPre-estreno 24 de noviembre del 2019 Traslada el 23 de diciembre del 2019 Estreno 29 de diciembre del 2019 a las 19:00 hora boliviana Terminada el 5 de Junio del 202 Nadie sabe cuándo empezó todo, fue años atrás sin que nadie se diera cuenta, o tal...