Los Secretos de Miriastir.- Intervención Divina

Capítulo 34.- Cumpleaños 1ra parte

Kira

Desde que Amaris huyó aquella vez, casi no hablábamos, se mantenía lejos aunque nos observaba de manera discreta.

Habíamos salido tanto tiempo, que ya no recordaba la última vez que habíamos estado tan separadas, solo sabía que me dolía pensar que este era el fin del "nosotras".

Al anochecer me dormía un poco más tarde para asegurarme que ella estuviera bien, pues sabía que las pesadillas seguían atormentándola. Además de que era bonito verla dormir.

Nuestra habitación estaba más silenciosa desde entonces, ninguna de las dos se animaba hablar más allá de lo necesario.

Esquivábamos nuestra miradas al vestirnos en las mañanas, la incomodidad mutua era evidente. Pero esta mañana me sentía intraquila por otra razón.

Era cumpleaños de Lucía, cumplía 16, al ser la menor de las cuatro su cumpleaños era el último en celebrarse en cada ciclo, pero en esta ocasión no sabía que podíamos hacer.

El año pasado nos la habíamos pasado bebiendo en Daesrin hasta las una, había pedido a mi hermana que se asegurara de que no nos quedáramos hasta muy tarde, por suerte ella estuvo ahí, porque la resaca que tuvimos en la mañana me dejó en claro que no hubiéramos podido volver.

Pero era obvio que no era una opción esta vez, Lucía ya tenia tres meses de embarazo según las normas de conteo. Según la enfermera debía evitar cualquier bebida que pudiera alterar su mente o medicinal.

—Deséale un feliz cumpleaños a Lucía de mi parte —habló de pronto Amaris mientras abría la puerta de la habitación para salir.

—¡Detente! —le grité enfurecida.

—No es necesario que grites, ¿lo sabes verdad? —preguntó con voz suave.

—Nos vienes evitando ya varias semanas, ¿acaso no te das cuenta de que nos estas lastimando? ¿En serio ni siquiera la felicitaras por su cumpleaños? —proferí molesta.

—Si estoy lejos es mejor para ustedes, después de causarles tanto daño, es lo mejor —respondió escuetamente.

—Si Amaris, cometiste un error, todas nos hemos equivocado alguna vez, pero debes aceptarlo y afrontarlo, no puedes...

—¡Es que no es un simple error Kira! ¿Acaso no te das cuenta? ¿No recuerdas las palabras que los cinco dioses me dejaron recordar? ¡Esto yo lo elegí! Aunque no lo recuerde, este destino fue algo que yo escogí —sus palabras sonaban poco a poco más quebradas, pero aún así firmes.

—Ya te lo dije, todas nos hemos equivocado alguna vez, pero de ti depende aceptar y enfrentar tu error, no se cuántas veces te lo tengo que repetir, pero entiéndelo, no puedes cambiar tu pasado, solo puedes decidir que decisiones tomar en tu presente —asevere molesta, pero aún así no volteó.

—Aunque no lo entiendas, esta es la mejor decisión —me respondió y salió antes de que le pudiera responder.