Capítulo 35.- Cumpleaños 2da parte

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Amaris

No lo soportaba, hace solo unos días llegó una carta para Lucía, carta que aunque no leí pude escuchar lo que ella habló con Dana y Kira sobre esta, sus madres vendrían cuándo el año acabara.

Al ser la dilinsta un lugar de entrenamiento militar nuestras madres solo podían venir a vernos bajo circunstancias especiales. El embarazo de Lucía era la circunstancia especial, hacía años que yo no había visto a mi madre por eso.

Cada año eran 13 meses de entrenamiento, pero el primer mes del año, el primer mes de primavera podíamos descansar del entrenamiento, pues se realizaban las ceremonias de nombramiento de las que habían completado el entrenamiento de la guardia y la bienvenida de quiénes recién empezarían su entrenamiento. El primer mes de primavera, mes del cumpleaños de Kira.

Lucía en cambio cumplía años hoy, tercer día del último mes de invierno, ella era casi un año menor que yo. Pues mi cumpleaños era en el tercer mes de primavera.

Lucía era la menor de las cuatro, si es que todavía podía decir que éramos cuatro. Era el sexto día de la semana. Por lo cuál teníamos entrenamiento, pero aún así tras que este terminó, pude escabullirme fuera de la dilinsta para rumbo a Daesrin.

Ahí pagué con varias monedas el paquete que había solicitado. Por diversos motivos conseguir que nos trajeran algo de fuera era difícil, y también estaba limitado que tipo de cosas podíamos poseer de afuera.

El objeto era algo que mostraba los principios a los que quedaríamos atadas al completar el entrenamiento. Una pulsera cuyo dije eran 4 espadas cruzadas, talladas en hierro, me había costado bastante, pero tras lo que había pasado era algo mínimo.

Volví a la dilinsta sin demasiada prisa. No sabía que harían hoy las chicas, pero supuse que si buscaba bien las encontraría.

Me la pasé un largo rato caminando por los pasillos de la dilinsta, esquivando a otras compañeras que ocupaban éstos.

Finalmente las encontré al lado de la habitación de Lucía y Dana, Lucía sentada en el suelo, apoyada justo en la puerta de la habitación, abrazando sus piernas.

Kira estaba parada frente a ella, apoyada en una de las columnas que sostenían el techo abierto del pasillo. Dana estaba parada en medio, observando hacia donde yo estaba. Y no tardó nada en verme.

Y lamentablemente ella reaccionó de manera tan obvia, que tanto Kira como Lucía voltearon. No podía irme ahora para esperar un mejor momento, respire profundo cerrando los ojos para luego hacia ellas.

No mire a los ojos ni a Kira, ni a Dana, volteé directamente a ver a Lucía, podía ser una idiota, pero aunque supiera que era lo mejor no podía alejarme de ellas.

Volteé mi mirada a ver a Lucía, pude notar que había llorado. Me dolía sentir que yo era la culpable de esas lágrimas. Extendí mi mano hacia ella mostrando la manilla.

—Feliz cumpleaños Lucy —fueron las palabras que solté.

—Gra... Gracias Amaris —respondió nerviosa.

—No llores, no me gusta verte llorar —añadí limpiando sus mejillas antes de retirarme sin despedirme.

Odiaba esto, pero lo mejor era alejarme.

Los Secretos de Miriastir.- Intervención Divina Donde viven las historias. Descúbrelo ahora