24

2.9K 307 451
                                    

Zayn se giró hacia Liam y, con una mirada casi suplicante, le dijo:
—Por favor, dime que esto es una broma.

Liam tan solo negó, tenía la mirada en sus zapatos, no podía ver a Jade, y menos estando acompañado de Malik.

Robbins aclaró su garganta.
—Dije que ¿qué hacen aquí? —Esta vez sonó más firme.

Zayn volvió su vista a ella.
—Quiero hablar con Miranda.

Jade frunció el entrecejo.
—¿Tú para qué quieres hablar con mi madre? —cuestionó entre confundida y molesta.

Tomó una profunda respiración y respondió con otra pregunta:
—¿Recuerdas a Yaser?

El color que lentamente volvía al rostro de la rubia, se esfumó nuevamente al escuchar aquel nombre. Claro que lo recordaba... No muy bien, pero sus vagos recuerdos fueron reforzados por las narraciones de su madre.
Tragó saliva sonoramente y lo miró directo a los ojos, como si buscará algo detrás de esa profunda mirada color miel... Y entonces, lo encontró. Los mismos ojos. La cara era igual.
Jadeó.
—Por Dios —fue lo primero que atinó a decir.

—Tomaré eso como un sí —dijo Zayn.

—¿Cómo no lo noté antes? —se preguntó atónita—. Eres igual a él.

Malik enarcó una ceja, él sabía de su gran parecido a su padre, pero no esperaba que Jade lo notara, pues ella aún era demasiado pequeña cuando Yaser murió.
—¿Cómo puedes siquiera saber eso? ¿Tienes memoria fotográfica o algo parecido?

Ella negó.
—No memoria, pero sí una fotografía. Es el único recuerdo que tengo del poco hombre que me tocó como pad...

—No te atrevas —la interrumpió molesto.

—¡Por supuesto que me atrevo! —gritó igualmente molesta. Salió al pórtico con ellos y emparejó la puerta detrás—. Yaser fue el peor hombre. No tienes una idea de todo lo que hizo sufrir a mi mamá.

Zayn rió, tan fuerte que resultó aterrador.
—¿Lo que hizo sufrir a tu madre? ¡Ella se lo buscó! La única verdaderamente afectada en todo esto fue mi mamá. ¡Por culpa de tus padres mi mamá sufrió un infierno y yo también en consecuencia!

Jade abrió la boca en una casi perfecta "O", indignada.
—Ah, no. A mi mamá no la culpes de nada. Tu padre la buscó y la sedujo.

—Pero ella sabía que él era un hombre casado y con un hijo... Y ya no te diré esta mierda a ti, quiero hablar con ella.

—No —dijo bloqueando la puerta con su cuerpo—. Lárgate de aquí. Los Malik solo traen desgracias, no permitiré una más en mi familia.

Zayn la tomó por las muñecas y la acercó a él tanto como le permitían los brazos de ambos al centro.
—En eso tienes razón. Y tú también eres una desgracia. Una Malik más.

Ella se zafó del agarre y retrocedió sobando sus muñecas.
—Yo soy una Robbins, no una Malik.

Zayn negó.
—Así lleves el apellido de tu madre, sigues teniendo la sangre de nuestro repugnante padre.

—¿Sabes qué es repugnante? Que mi propio hermano me haya robado al amor de mi vida.

Rió y negó.
—No te confundas, no te robé nada, nunca tuviste el amor de Liam, ese siempre fue mío. Y tú y yo —dijo señalándose y luego a ella—, no somos ni rivales ni hermanos. No somos nada, que te quede claro —le aclaró tocándole fuertemente la cabeza con el dedo índice—. Y quítate que voy a pasar —agregó haciéndola, fácilmente, hacia un lado y entrando a la casa.

Mi salvación || ZiamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora