Just One Second. »Omegaverse« →HyunIn.

no me toques.

- ¿Es enserio, Hyunjin? - Era la segunda vez en lo que llevábamos del desayuno que sonreía su teléfono y dejaba de prestar atención a lo que le estaba diciendo.

- Lo siento, te escucho. - Apoyo su codo derecho en la mesa y su otra mano tomaba la taza de café que le  había servido.

- Te estaba diciendo que me van a promover... Y próximamente podré estar desfilando oficialmente para la revista. - Hablé con orgullo y sonreí achicando mis ojitos y cuando mire a Hyunjin nuevamente estaba en su teléfono.

Me paré de la mesa frustrado y suspiré lavando mi pocillo y mi plato mientras mordía mi labio con impotencia.

Hyunjin pareció darse cuenta y se levantó acercándose a mí.

- Lo siento, Jeonginnie... - me abrazó las caderas, yo puse el plato en el mesón y me solté de su agarre.

- Se me hace tarde. - me coloqué mi gabán y salí de la casa lo más rápido posible.

Mierda, ¿qué tanto había hecho mal? Yo entiendo que me puse un poco muy histérico por lo de la protección pero el debería respetar mis opiniones... ¿o no? Tal vez yo estoy siendo muy estricto... Mierda... De seguro Hyunjin de cansará de mí. Entonces debería conseguir otro método anticonceptivo ¿verdad? Pues... Ese parece ser el problema.

~~~~\\

Suspiré cuando Jeongin se safó de mi agarre y sonreí con burla.

- Se me hace tarde. - Murmuró con su tono inocente fingido como para victimizarse.

No alcancé a decir nada pues él ya había salido. Suspiré y mire mi celular nuevamente.

- Entonces espero y podamos vernos, Hyunjinnie... -

- Y ya estoy un poco mejor pero sigo con tosesita de la feita :( -

- Gracias por preocuparse por mi, Hyung. -

Leí los tres mensajes de Intouch y sonreí enviándole un 'no hay de qué' y unos cuantos emojis.

Salí de la casa también. No me vería con Intouch hoy en el trabajo por lo que él seguía enfermo así que ni habría... ¿cómo decirlo...? Mm... ¿Sesión de besos?

Y si, si, ya se que es malo cortejar a dos omegas al tiempo pero...

Creo que no hay peros... Mierda.

Jeongin ahora vivía en una de las casas de la cuadra por lo que aveces pasaba a visitarlo pero hoy enserio iba tarde por lo que seguí derecho

~~\\

- ¡Jeongin! ¡No puedes  decirme qué carajos hacer! - Me gritó a la par que me daba una cachetada y el fuerte golpe hizo que mi cabeza retumbara.

Pareció volver a sus cinco sentidos. Mi miró con un poco de pena e intentó abrazarme.

- Lo siento, Jeonginnie... Yo... No era mi intención... Yo... - le interrumpí.

- Cállate. - Hablé con la voz débil y rota. - Volveré a mí casa.

Sentencié pero pareció enserio tener demasiadas ganas de disculparse, nótese el sarcasmo.

- Innie... Son las 11 de la noche.

- No me importa. - Fruncí mis labios. Mi mejilla seguía ardiendo y después de colocarme el saco salí de la casa. Y mierda que lloré... lloré mucho. Y si, lo que están pensando, exactamente eso es. Es totalmente ridículo el hecho de que apesar de no haber tenido tantos momentos con Jin esté llorando. Pero mi omega es quien se siente lastimado

Los constantes insultos, los celos que tengo que callar porque el al parecer ya no siquiera quiere cortejarme.  Y es que en un mes todo cambio más de lo que pensé que podría cambiar.

El me había dicho que me quería conocer más... Pero al parecer lo único que se esforzó por conocer fue cada espacio de mi cuerpo. Y luego de unos días de llevarle el almuerzo a su trabajo me dí cuenta de que también se besaba con el otro Omega... Por eso ya no lo hacía tanto conmigo. Suspiro recordando todo y cuando me doy cuenta ya no tengo a donde caminar. Se supone que alquilé mi casa por lo tanto no puedo ir allí... Y no tengo muchos amigos cercanos a lo que ubicación concierne... Solo me queda irme a una residencia.

Y cuando me voy a ir una fuerte y marcada mano me toma por la espalda.

- ¿Jeongin? - y me volteo mirando con una grata sonrisa a quien extrañé tanto.

El toma mi mejilla y suavemente la acaricia.

- ¿Que te he dicho sobre dejarte pegar por cualquier idota que se siente más que tú? - y suspiré bajando mirada, porque si, no era la primera vez que alguien a quien amaba me golpeaba.