reencuentro.

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Iba hacia el centro. Caminaba tan rápido que siquiera alcanzaba a distinguir rostros. Suspiré y le vi. Le vi tan tenso y neutro.

Se le notaba inseguro pero al mismo tiempo no sabías si en realidad lo estaba siendo. Mi cuello dolió, ahí donde alguna vez pensé en llevar una marca.

Volteaba su rostro múltiples veces pero totalmente lento como si buscase algo y no quisiera que lo supieran.

Dio un paso atrás, mis feromonas se hicieron presentes y eso le alteró, lo pude sentir incluso a metros. Estábamos hecho un lío ahora. Suspiré y decidido me acerqué.

Más antes de que yo me diese cuenta ya estaba siendo estrechado por sus brazos.

- H-Hyunjin... ¿Q-Qué haces...? - murmuré fingiendo desagrado pero la felicidad de mi Omega en mi olor me delataba. Suspiré.

- Jeongin... - empezó más no continuó como si se hubiese retratado de sus palabras y rápidamente me soltó. - ¡L-Lo siento...! -

Si tan solo hubieses dicho eso hace un año las cosas serian tan diferentes. Suspiré y puse mi mechón de cabello tras mi oreja y le miré.

Su rostro era el mismo en cuanto a físico, sus mejillas para nada abultadas, sus labios rosados y esponjosos, su barbilla tan definida. Más la expresión que llevaba en su rostro era tan diferente.

Cualquiera habría dicho que era un Alfa renovado, pero... Yo no lo creía así. Las consecuencias lo habían obligado a cambiar.

Y por fin hablé.

- N-Necesitaba habla contigo. -

Hyunjin abrió los ojos como con una combinación de sorpresa y nostalgia.

- ¿Si? - Murmuró metiendo sus manos en los bolsillos.

- Quieres... ¿Tomar algo? Yo invito, es un tema serio y... No puedo hablarlo tan... A la ligera. - dije observando a mi alrededor refiriéndome a este.

Hyunjin asintió levemente y luego de unos minutos estábamos en un café de allí.

Hyunjin bebió de su posillo mientras yo le miraba.

- Pues... Yo... Solo... - suspiré y conté hasta diez. - Hyunjin, nosotros somos pareja destinada, no podemos negarnos, pero lo nuestro es muy claro que no funciona- — me interrumpió.

- Funcionó. - me corrigió rápidamente para luego mirame con una seña de que siguiera hablando.

- Como sea... No... Funcionó... Pero llevarnos mal nos hará más daño. -

- Ya nada puede hacerme daño.

- Pero a mí sí. Así que intentemos no... Llevarnos mal.

- Jamás he tenido la intención de llevarme mal contigo. - la indiferencia de Hyunjin me estaba hartando. Parecía que no lo importara el hecho de todo... Esto.

- Hyunjin... Hiciste cosas mal, reconocelo.

- Reconozco que hice cosas malas.

¿Me estaba tomando del pelo?

- idiota. - susurré y suspiré tomando mi té.

- Reconozco que hice cosas malas y ahora que te encuentro en verdad me gustaría que supieras que quiero repararlas.

Abrí mis ojos sin mirarle, solo miré mi taza de té. ¿Qué? Yo no... No pretendía hacer que volviesemos... De hecho creo que es lo último que haría. O... Tal vez lo primero.

- No digas tonterías, si nos encontramos es porque necesitamos que nuestros lobos vivan en paz.

- ¿Cuál lobo?

Y en ese momento supe que era mejor callarme, que si no diría lo que él quería escuchar mejor no dijera nada porque a pesar de todo... No quería herirlo.

Sigo siendo su destinado, su omega... Y no podría decirle un "no".

He vuelto, siento mucho hacerlos esperar pero cómo os dije ahora tengo menos tiempo libre pero estoy segura que con su apoyo este fic no seria nada, así que muchisisisisismas gracias uwu

Just One Second. »Omegaverse« →HyunIn.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora