Just One Second. »Omegaverse« →HyunIn.

¿lo quieres? lo tienes.

Capítulo dedicado a milo_skz_ , ¡gracias por tu apoyo, corazón!

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— Uh~... — gemí mientras montaba a Hyunjin de espaldas y él acariciaba mis muslos y cintura suavemente dejando suaves estocadas con sus caderas complementando mi movimiento.

Me estremecí cuando entró un poco más profundo y seguí moviéndome de atrás hacia adelante sintiendo como su pre-semen se iba haciendo espacio dentro mío y acariciaba suavemente mi punto. Gemí un poco más alto y me vine, dejando caer mi pecho reacomodándome y poniéndome en cuatro sobre mis antebrazos para que él se pudiera venir.

Dejo un par de estocadas rudas a mi cuerpo mientras sus uñas se encargaban de rozar mi espalda haciéndome estremecer.

— Uh~, Jeongin... me vengo. — gimió a la par conmigo por la sobre estimulación y me vine con él por segunda vez al mismo tiempo con ligeros espasmos.

— ¡H-Hyunjin! — gemí y tomé su cuello juntando sus labios con los míos en un apasionado beso, el cual se fue apaciguando a la par con nuestra excitación.

Cuando ya nos habíamos calmado y nuestras respiraciones se habían regulado, nos sonreímos.

Habíamos aprendido a hacer el amor con parsimonía, a salir de nuestra zona de confort y probar cosas nuevas, en estos tres meses nos encargamos de aprender a sacar provecho de nuestras experiencias, fueran buenas o malas y de comprendernos mutuamente.

Habíamos aprendido a hacer el amor. Porque hacer el amor no es solo sexo, hacer el amor va más allá de placer carnal, incluso de que nuestras almas se unan, va en la vida diaria.

El amor se practica de mañana a noche.

Desde un buenos días hasta tener una conversación amena, hacer el amor es más que palabras entre gemidos, hacer el amor es una muestra pero sobretodo una capacidad.

Una capacidad que eres solo capaz de desarrollar con la persona correcta.

Así que si, en este caso, hago el amor con Hyunjin desde que me levanto hasta que me acuesto.

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Abrazó mi cintura y me atrajo a él, sonreí sonrojándome, después de tiempo de conocerlo aún así me ponía nervioso cuando actuaba cursi.

Puse mi cabeza en su pecho y un señor detrás de nosotros tocó mi hombro haciéndome recapacitar de que la fila ya había movido.

Le agradecí suavemente con una reverencia y regañé un poco que Hyunin, el cual solo rió y pidió las boletas.

Entramos a la sala de cine, nos sentamos en nuestros puestos 18 y 19 respectivamente para que la película empezara.

— Llegamos justo a tiempo. — le susurré con una ligera risita y el asintió mordiendo su sándwich.

— ¿Quieres? — me ofreció con la boca llena y yo abrí mis ojos para luego reír y morder el sándwich.

Al paso que los cortos habían acabado mi visión se nubló un poco, me apoyé en el asiento del lado intentando recomponerme pero solo sentí un fuerte tirón, pero no el usual que llegaba en el celo, más fuerte, muchísimo más fuerte.

Solté un grito de dolor sin poder contenerme llamando la atención de varias personas en la sala, Hyunjin volteó a mirarme inmediatamente y yo le miré a los ojos pidiendo ayuda, pero el dolor cesó.

Los ojos de Hyunjin me transmitieron calma, algo me decía que no era algo malo.

Hyunjin tomó mis mejillas y una lágrima se escapó de nuestros orbes al tiempo, bajando por nuestras mejillas.

Mientras el sonido de un tercer corazón invadía nuestros oídos.

Nuestras almas.
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No saben cuántas ganas tenía de publicar este capítulo, espero les haya gustado. Les quiero mucho, tengan linda noche o día, cuando sea que estén leyendo esto.