Just One Second. »Omegaverse« →HyunIn.

Yo.

- ¡Ven, ven! Tomemos muchas fotos, todo es hermoso. - dijo y me acerqué a él sonriendo para la foto.

Tomó la foto y salió a correr hacia el mar dejando la cámara a un lado.

- ¡Ven, ven! ¡Juguemos! - fui hacia él y jugamos en el agua casi toda la tarde. Sonreí y lo cargué para echarlo al agua fría y honda.

- Hey, hey, ayuda. - gritó fingiendo terror y fui hacia él dejando muchos besos en su rostro.

- Ya, ya, tenemos que salir... Esta atardeciendo y no quiero que atrapes un resfriado. - sonreímos y tomé su mano saliendo con él del agua.

- Pero... Yo no quiero, no quiero volver al hotel aún todo es muy... Muy lindo. - dijo e hizo un puchero. Yo sonreí y mordí un poco mi labio superior cerrando mis ojos ante su ternura.

Me tenía muy loco, joder.

- ¿Quién dijo que iremos al hotel? -

- ¡¿Planeaste algo?! - le miré con gracia y asentí. - Vamos a cambiarnos y salimos... ¿Te parece?

Cada vez era más oscuro y el asintió.

Fuimos al hotel a cambiarnos de ropa y encendí la tele mientras esperaba a que el saliera del baño.

- ¿Cuánto tiempo demorarás? - di un ligero grito y escuché un quejido.

- Y-Ya salgo... - murmuró y efectivamente salió del baño con la ropa puesta ya.

- ¿Nos vamos? - me examinó de arriba a abajo y sacudió su cabeza abriendo sus ojos.

- ¡E-Espera! ¡Ya vuelvo! - medio bramó y corrió hacia su mochila yendo rápido al baño.

- ¡Hey! - apenas si alcancé a murmurar.

Me senté de nuevo encogiéndome de hombros y él salió un rato después.

- Y-Ya... P-Podemos irnos. - susurró con la cabeza baja y yo levanté una ceja.

- Hey... Si no quieres ir podemos quedarnos, hice este viaje para ti. - dije ignorando el hecho de que tenía todo, absoluto todo preparado.

El negó con su cabeza rotundas veces y me empujó un poco.

- No, no, no. Vamos ... Yo solo... Nada. - dijo y sonrió tranqulizándome al instante.

Salimos de casa, estaba muy nervioso, eran sólo unas horas y...

Y le declararía todo.

Mordí mi labio mientras bajábamos por el ascensor y él me miró.

- ¿H-Hyung...? ¿Está bien? - dijo. Joder, me encantaba mucho cuando me decía Hyung.

- Si, si, solo estaba pensando en la novela que veía mientras te demorabas años en el baño. - dije y río a la par que el ascensor se abría.

Nos dirigimos hacia la playa de nuevo y él me miró confuso.

- Eh... pensé que no iríamos más a la playa. -

- Pues... - dije cuando vi aquella mesa en medio de una carpa blanca, una mesa para dos, elegante que nos daba luz con dos decorados y grandes faroles a los extremos. Nos dejaba una hermosa vista al mar.

Pero yo no me podía concentrar en otra cosa que no fuesen sus ojos.

- Hyunjin... - susurró y cubrió su boca lentamente con la holgada manga de su buso y sentí como su barbilla tembló. - ¿Enserio?

- Enserio. - dije totalmente seguro y le invité a pasar moviendo su silla para que se sentara.

Él no paraba de mirar el paisaje y pronto los platillos empezaron a llegar.