UN LARGO VIAJE

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Lo primero que le llamó la atención a Takano, fue el ver a Ritsu tan sonrojado y callado, lo segundo, y de eso no tenía ninguna duda, es que parecía que había trasnochado, así que se animó a preguntarle si se había acostado tarde o algo por el estilo, porque en realidad se veía cansado; la pregunta tan directa sobresaltó un poco a Ritsu, pero luego contestó que sí, que se había pasado la noche en vela haciendo vigilancia por una investigación.

Takano sabía que Ritsu no contestaría más que eso, así que lo dejó por un rato, después de todo y a pesar de los años, aún prefería mantener la vista fija en el camino, pues Ritsu era un conductor demasiado arriesgado, y trasnochado se ponía de muy mal humor.

Mientras enfilaban por la avenida del Canal, rumbo al túnel Holland, Ritsu mencionó que pasaría a cargar combustible en Newport, y de ahí tomaría por Jersey rumbo hacia Newark, todo eso mientras programaba el navegador y conducía por la autopista a casi treinta kilómetros por encima del límite permitido, mientras esquivaba el tráfico como si persiguiera a alguien. Se suponía que eran al menos cuatro horas y media de viaje, pero Ritsu pensaba hacerlo en bastante menos, y al escuchar eso, a Takano no le cupo la menor duda de que, cuando llegaran a su destino, tendría que esperar un poco antes de bajarse para darle tiempo a que su alma los alcanzara.

No fue sino hasta la mitad del trayecto a través del túnel que Takano recordó lo que había soñado la noche anterior, y más que nada, recordó el estado en el que había despertado; agradeció en ese momento el que su rostro no reflejara lo que sentía por dentro, pues literalmente se estaba arrastrando de la vergüenza. Mientras se acomodaba en el asiento, que era bastante más duro y cerrado de lo que se comparaba a un vehículo normal, se preguntó si Ritsu no habría modificado el interior, siendo sorprendido por algo así como una respuesta de Onodera, que le dijo que eran los asientos de fábrica, así que sería mejor si no dijera nada al respecto.

No era como que Takano hubiese pensado en voz alta, sino que no era la primera vez que Ritsu veía a alguien incómodo en el asiento del copiloto, ya le había pasado antes con Ann y con MacGregor, incluso con su padre, así que no era nada nuevo ver a alguien intentando encontrar una posición cómoda dentro de su carro; mientras seguía luchando por quedar mejor sentado en aquel duro asiento, Takano le preguntó qué había hecho con su carro anterior, el Tiburón que se había comprado con los ahorros de casi toda su adolescencia, y la respuesta lo dejó atónito.

"Se lo di a MacGregor como regalo de bodas" fue lo que dijo Ritsu, mientras esquivaba un camión y lo adelantaba como un rayo, a pocos centímetros de volarle un faro; ni siquiera había que mirar la cara de Takano para saber lo perplejo que estaba mientras se agarraba como un gato a los bordes del asiento, pero salió rápido de su estupefacción para preguntar cuándo fue que MacGregor se había casado, y con quién. "Se casó con Abby hace unos ocho meses, se conocieron gracias a ese carro, y como papá me había regalado éste, y no había logrado vender el Tiburón, decidí que era el mejor detalle regalárselos", siguió contando Ritsu, mientras le daba un pequeño descanso al alma de Takano al frenar tranquilamente en una luz roja, luego de salir del túnel; Takano se quedó pensando en silencio un rato, pero luego recordó algo, así que preguntó "oye... ¿tú no tenías una novia que se llamaba Abby la última vez?", a lo que Ritsu contestó con una risita "sí, esa Abby".

Mientras se estacionaba tranquilamente frente a la tienda de servicio de la gasolinera en donde cargaría combustible, Ritsu le siguió contando "MacGregor y Abby se conocieron cuando ella y yo aún estábamos saliendo, pero después ella me terminó porque... bueno, porque yo le ponía más atención a mi trabajo que a nuestra relación, recién me habían ascendido, así que estaba como loco y no pude sostener lo nuestro, siempre la estaba plantando por una y otra cosa y terminábamos discutiendo por lo mismo, y al final ella se cansó; se habían conocido porque le pasé una vez el carro a MacGregor para que fuera a vigilar unas pericias mientras yo me quedaba con unos testigos de un caso, él se estacionó cerca del lugar donde ella trabajaba, ella pensó que yo había ido a hacerle una visita sorpresa, así que se acercó toda coqueta, pero se llevó un chasco cuando vio que quien conducía no era yo, y eso fue todo después del susto y la vergüenza; después de unos meses ellos volvieron a encontrarse, Abby ya no estaba conmigo desde hacía un rato, y aunque a MacGregor al principio le parecía super incómodo el asunto de estar saliendo con la ex de su jefe, al final terminaron casándose después de unos cuantos meses de relación, y como ya te dije, ellos se conocieron gracias a ese carro, así que se los di como regalo de bodas" terminó diciendo, mientras pedía un café negro grande y una rosquilla.

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