Frente a un peligro inminente 5 entrenadores pokemon deberán unir fuerzas y enfrentar a poderosos males con el objetivo de proteger a su amada Galar.
De esta forma el entusiasta Hop, la irritable Gloria, la sería Marnie, el elegante Bede y el inseg...
He Estado más o menos una hora entrenando en el área silvestre junto a Sobble, este logró aprender atadura que aunque no es un movimiento espectacular sigue siendo bueno a futuro.
Realmente no dejó de pensar en mi conversación con Sonia, se que debo arreglar las cosas con ella, pero aún me siento enojado y puede que empeore la situación si le habló ahora, no se que hacer.
-Sobble ¿Quieres ir ya a pistón? -. Le pregunte a mi compañero que solo asintió con la cabeza, parece estar bastante cansado.
Seguí mi camino a ciudad pistón a través del área silvestre, lamentablemente no pude atrapar ningún pokémon pues no tengo pokeballs, así que pienso comprar algunas, lo bueno es que ya puedo ver el gran muro y las escaleras que marcan la entrada a pistón.
Apenas entre me puse a ver mis alrededores pues es la primera vez que vengo a pistón que es un gran cambio con respecto a Pueblo Yarda o Pueblo Par que son pequeñas zonas rurales.
Pistón era una gran ciudad llena de máquinas a vapor y construida mayormente a ladrillos cosa que le daba una combinación entre lo medieval y moderno, era realmente increíble.
Mi primer destino al llegar fue visitar el centro pokémon donde cure a Sobble y compre unas cuantas pokeballs para capturar algún pokémon cuando tuviera oportunidad, luego me fui a una boutique para comprar una chaqueta con capucha color gris en caso de necesitarla en algún momento, también pase a comer algo junto a Sobble a un café.
Luego de comer tome dirección al estadio de pistón, luego de pedir algunas indicaciones tuve que tomar una especie de mini ascensor que era sostenido por un gran engranaje, al que luego de subir puedes ver el estadio pistón frente a ti.
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Era un imponente edificio que en esta época estaba completamente rodeado de personas, algunos para ver a los aspirantes y otros siendo aspirantes en si, al entrar ví una acogedora sala de espera llena de personas de todas las edades y como no con Hop y Gloria, aun no estaba listo para hablar con ellos así que me quedé viendo los alrededores del edificio un poco.
—Por como miras los alrededores, asumo que eres más bien de pueblo, si es así ya somos dos—. Quien me habló era una chica algo baja, esta tenía el pelo negro sujetado en dos coletas detrás de su cabeza y un flequillo que casi tapaba uno de sus ojos, lo que si llamó mi atención era su ropa pues llevaba una chaqueta se cuero negra y unas grandes botas con púas que contrastaban con el vestido rosa que tenía.
—Así es, me llamó Víctor y soy de Pueblo yarda, un gusto—. Dije extendiendo mi mano para presentarme.
—Me llamó Marnie, soy de Pueblo Crampon, encantada—. Su forma de expresarse era un tanto sería, apenas estrecho mi mano pude ver que tenía un Morpeko, que era conocido por lo difícil que es de entrenar.
