DORK || Im Jaebum || [COMPLETA]

D i e c i s é i s.

"After II".

Un corto viaje a una tienda, un par de malos chistes y pequeñas risas fueron el principio de la velada.

Luego de haber conseguido cerveza, ambos nos habiamos puesto de acuerdo para consumirlas sentados en una de las persianas de los tantos locales que permanecían cerrados.

Preguntas banales y uno que otro insulto entre sorbos, ignorando por completo como los minutos pasaban, acortando, acercándonos cada vez más al amanecer.

Nos pusimos de pie cuando sentimos nuestros traseros entumecidos por el frío y caminamos sin rumbo bajo las luces artificiales de las farolas mientras compartíamos varias anécdotas de nuestros años más inocentes.

Billie sonreía como nunca la había visto, tonteaba, bailaba sin melodía alguna y gritaba eufórica cada vez que algo en mis historias la emocionaba, suponía que era el efecto que el alcohol causaba en ella.

— Bájate de ahí, te caerás— Hablé entre risas acercándome a ella, quien se había subido a una banca del parque al que habiamos llegado.

— Es mi momento de ser alta, déjame ser— Comentó de igual manera mientras extendía su mano hacia mi, pidiéndome que la ayudara a mantener el equilibrio.

Acepté gustoso su petición, después de todo la cerveza se había encargado de llenarme de aquella seguridad que había creído perdida, motivandome a que rompiera esa barrera que impedía que me acercara a ella de la manera en que yo quería.

Sus dedos entraron en contacto con los míos entrelazandose entre sí, y a pesar de encontrarse fríos, la sensación que me recorrió por completo era todo lo contrario.

—Hablame de ti— Habló luego de unos momentos en silencio, momentos en los que había aproveché para trazar pequeños círculos en la palma de su mano con ayuda de mi pulgar.

—Ya te he contado demasiado ¿No crees?— Pregunté regalándole una sonrisa. Recibiendo una igual de su parte.

—Si, pero saber como fue que perdiste tu primer diente no me da la información que necesito.

— ¿Información? ¿Acaso uno de los momentos más traumáticos de mi infancia no te parece información valiosa?.

—Por Dios, solo te ataron el extremo de un hilo al diente y el otro a una puerta, que te golpearan con ella durante el tirón no se cataloga como evento traumático.

Solté una carcajada, deshaciendo el agarre para limpiar las lágrimas que se me habían escapado a causa de las risas.

No sabía si Billie estaba particularmente más graciosa o el alcohol estaba comenzando a hacer efecto en mí, solo sabía que no recordaba una noche en la que me hubiera reído tanto.

Y me alegraba que la primera fuera junto a la pequeña azulita.

—Ya deja de reírte--Tiró de mi sudadera— Quiero saber más de ti y tu no cooperas.

Me detuve cuando mi estómago comenzó a doler y mis pulmones escaseaban de oxígeno, sintiendo como mi interior se enternecia al ver como un tierno puchero deformaba sus labios.

"Sin duda alguna está ebria"

pensé. Pues la Billie a la que me había acostumbrado -o más bien, la que había idealizado- no dudaría en golpearme para recibir mi atención.