La fiesta

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No puedo creer que tenga que ir hasta el olimpo solo porque Zeus quiere celebrar una de sus malditas fiestas

-Señor, Afrodita desea verlo, ¿la dejo entrar?- Pregunta mi ayudante Thetis

-No deseo ver a nadie...- Antes de poder terminar mi frase Afrodita ya estaba entrando por la puerta

-¿No querías recibirme?- Pregunta indignada

-Ufff, Thetis, dejanos a solas- Ordeno mientras me acomodo en mi asiento

-Deberías ser mas considerado con tus visitas- Me regaña mientras se sienta en mis piernas

La verdad es que no esta tan mal, su vestido rojo que se acopla a la perfección con su piel dorada...la verdad es que es sexy

-No pedí visitas- Replico con una leve sonrisa al ver como rodea mi cuello con sus hermosos y delgados brazos

-¿Quieres que me vaya?- Inquiere con su rostro a escasos centímetros del mio

-No, no quiero que te vayas pero tampoco te quiero cerca de mi, sabes que Lauce es algo celosa- Digo mientras rodeo su cintura con mi brazo

-Mmm, eres aburrido, serio y algo cruel...mejor paso- Agrega mientras se levanta y camina hacia la puerta

-Te quiero- Digo en un intento de no verla enojada

-Yo tambien...nos vemos en la fiesta de esta noche- Dice acompañándolo de un beso

Al encontrarme solo me doy el lujo de gritarme interiormente por las estupideces que a veces puedo hacer hasta que suena mi celular

-¿Que pasa Zeus?- Pregunto mientras reviso los informes semanales de las nuevas almas

-¿Es verdad que piensas traer a Lauce?.

-Si, ¿porque?.

-Hera no quiere verla y...bueno, debo mantenerla contenta ahora Hades.

-Le fuiste infiel a Hera otra vez, ¿no?- Interrogo algo enfadado por la estúpida actitud de mi hermano

-Solo fue un malentendido... Hades, hermano mio, ayudame a hacer feliz a mi esposa, no traigas a Lauce- Pide casi suplicando

-No quiero estar solo en la fiesta.

-Hades, no estarás solo, Poseidon y yo estaremos hay junto con todo el olimpo- Agrega

-No es lo mismo.

-¡No lleves a Lauce, Hades!- Grita por lo cual no me da elección

-Bien, bien, supongo que puedo ir solo pero solo sera por poco tiempo- Advierto

-Bien, como digas, gracias por comprender.

-Si, claro, soy muy comprensivo- Agrego en tono sarcástico para luego colgar

Me levanto de mi asiento y camino hacia la puerta hasta que esta se abre dejándome ver a una ninfa de lo mas candente

-Hola idiota- Dice Lauce mientras camina hacia mi

-Hola enana- Digo para luego darle un beso

Debido a que me llega al pecho tengo que tomarla de la cintura y alzarla para poder fundirme en sus labios pero como siempre ella me aparta

-¿Compraste el vestido que queria para la fiesta?- Pregunta con entusiasmo

-Si pero...

-Genial, pasa por mi a las ocho- Agrega sin dejarme terminar

-Lauce, enana, no puedes ir a la fiesta, Hera no te quiere verte allá y Zeus tiene que darle gusto en todo- Explico sin la menor delicadeza

-Zeus me recibirá ya que obviamente te quiere en la fiesta, él sabe que sin mi tu no vas...

-Lauce...

-Sin mi no vas- Gruñe por lo cual me hace enojar

-Escuchame bien, soy un dios, tu rey y tu jefe, no eres quien para hablarme asi y claro que iré a la fiesta de mi hermano- Espeto para luego salir de la oficina aunque siento como ella me persigue

-Si vas a la fiesta sin mi, te olvidas de lo nuestro- Advierte y no logro evitar reírme en su cara

-Como tu hay muchas, mejores que tu sobran...aunque te confesare algo, dudo mucho que encuentre a una tan facil como tu- Agrego para luego desvanecerme y llegar a mi apartamento.

UN AMOR GRIEGODonde viven las historias. Descúbrelo ahora