Capítulo 25

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Mis nervios crecían cada vez mas, ya se habían llevado a Joaquín en la ambulancia, más yo le explique que tenía que ir a dejar las cosas, después de que ví  que la ambulancia emprendía su viaje rápido hasta llegar al hospital, corrí lo mas que pude, para decirle a Carlos y a Diego.

-¿Que paso?.- me preguntó Diego cuando ya había abierto la puerta de el departamento de Joaquín.

Ignore su pregunta y pase a dejar en la mesa las bolsas que traía conmigo

-¿Emilio? ¿Que paso? ¿Donde esta Joaquín? ¿Por que traes la playera llena de sangre?.- preguntó Diego mientras que junto a Carlos me veían con cara de preocupación. Mis ojos comenzaron nuevamente a llenarse de lágrimas y las deje caer sin importarme nada

-Atacaron a Joaquín cuando ya veníamos para acá, no ví quien era por que despues se fue corriendo.- dije rápidamente interrumpido levemente por las lágrimas-. Y no se, tengo miedo de que algo mas le pase, tal vez todo esto es plan de Vanessa, tal vez quiere ver sufrir a las personas que mas me importan y...- comencé a balbuear cosas, Diego preocupado me tomó por el cuello intentando calmarme

-Escuchame.- me pidió cuando intente soltarme de su agarre-. Emilio, escuchame, necesito que estes bien, no sabes quien fue, Vanessa tal vez ni tuvo la culpa y no la estoy defendiendo pero sabes como es la delincuencia en México

-Pero es que no fue un asalto, no nos quitaron nada, solo atacaron a Joaquín.- suspire intentando contenerme limpiando con mi muñeca mis lágrimas

-De todos modos, tienes que estar calmado, por los nervios te puede dar algo así que calmate.- me dijo Carlos, quien intentaba contener las lágrimas-. Ustedes vayan adelantándose para el hospital, yo llamaré a la mamá de Joaquín.- nos dijo en un intento por no mostrar su desesperación y se alejó de nosotros mientras buscaba algo en su teléfono

Diego intentó convencerme de sentarme un rato para lograr calmarme, más yo no quería, no quería quedarme aquí esperando a que simplemente me marquen para decirme que Joaco está bien. Cuando ya había metido la ropa para Joaquín en la mochila que me dio Carlos, salí de su departamento, acompañado de Carlos y Diego que estaban igual de preocupados

Los familiares de Joaco en cuanto se enteraron de lo sucedido, fueron a el aeropuerto mas cercano y compraron boletos para venir rápido y directamente desde Miami o por lo menos eso nos dijo Carlos mientras íbamos de camino a un sitio de taxis y aun que sabíamos que los doctores no nos dirían algo mas que preguntar que le paso, ninguno de los tres estaríamos conformes con solo estar en casa por lo que no quisimos esperar aun uber a pesar de que el servicio no tardaba mucho en llegar

****

Al llegar al hospital, me di cuenta que no era como aquellos en los que suelen llevar a las personas de situación económica media si no era uno privado. Las paredes eran tan blancas que casi llegaban a enfermar, no había un olor a alcohol y varia gente en serio que se veía preocupada, pero no mas que nosotros, tal vez no nos veíamos muy bien por que tanto el chofer de el taxi que nos llevó y la señorita que nos atendió para saber como estaba Joaquín, nos preguntaron si estábamos bien, aun que solo dijimos que teníamos preocupación por nuestro amigo

Las 12:00 de la madrugada, entraba y salía gente de urgencias en donde estábamos nosotros, nos quedamos por que nadie nos obligo a salir. Solo habían pasado al rededor de 3 horas y mi paciencia ya estaba en su punto máximo al igual que mi preocupación, no podía estar mas de 1 minuto sentado, me puse a caminar lento de un lado al otro, intentando que así mis nervios se intentaran calamar.

-Emilio ya sientate, capaz y haces un circulo en el suelo.- me dijo Diego, era ilógico que me diera ese consejo cuando estaba igual de preocupado que yo

-La familia de Joaco está aquí.- Carlos se levantó de su lugar con una sonrisa algo forzada. Al fin, ya tendríamos mas oportunidades de que cuando el doctor saliera nos dieran directamente el diagnóstico de Joaquín

Tuvimos una mini discusión por saber quien iría a recogerlos, Carlos quería quedarse por que no sabia exactamente donde estaba el aeropuerto, yo también quería quedarme por cualquier cosa, Diego intento convencerme de que no pasarla nada si yo me iba de el hospital y aun que la excusa de Diego fue la menos logica, terminé por ir yo. Me ayudaron con hacer un cartel para identificar a los familiares de Joaco y fui directamente a el aeropuerto

Cuando llegué, no había tanta gente como esperaba, varias personas bajaban por unas escaleras eléctricas por lo que tuve que alzar la simple hoja en la que minutos antes había escrito Familia Bondoni, no tarde mucho en encontrarlos

-Hola.- me dijo una chica parecida a Joaquín y para que no sea su hermana de sangre, se parecían mucho-. Soy Renata, hermana de Joaquín.- me sonrió, la preocupación se veía en sus ojos, detrás de ella venia una señora de al rededor de 40 años o incluso un poco mas junto a un hombre alto y de misma edad

-Soy...- ella me interrumpió antes de que yo pudiera presentarme

-Emilio, si, Joaquín me platica mucho de ti.- al escucharla me sonroje, no sabia que yo era un tema de conversación con su hermana

-Mamá, el es...- me miro y cayo por segundos, supongo que pensando bien sus palabras antes de decirlas-. Emilio, el amigo de Joaquín

¡JA! Amigos, hace mucho que dejaron de ser amigos, quien sabe que son ahora

Intente callar a mi subconsciente y me presenté con los padres de Joaquín con mi típica voz tímida, quienes no tenían mucho interés en saber mi nombre por lo que nos fuimos al hospital

****

-¿Familiares de Joaquín Bondoni?.- preguntó un doctor después de 10 minutos de que haya llegado con los padres de Joaco

-Um... ¿Como esta?.- preguntó la mamá haciendo su mejor intento para hablar el español que según Joaquín ya no hablaba tanto

-La herida se infectó un poco, tuvimos que lavarle y logramos controlar la hemorragia, ya le cosimos la herida, en unos momentos lo pasamos a piso, solo es cuestión de días para darlo de alta.- nos platicó de la manera mas tranquila. Las 6 personas que estábamos en la sala de espera suspiramos sabiendo que no habia pasado algo mas

-Pueden pasar a verlo mañana por la mañana.- nos dijo el doctor antes de irse-. Ahora, es mejor que vayan a casa, las visitas son en la mañana de 6:00 a 10:00 y en la tarde de 2:00 a 6:00

Y con esas palabras dio la vuelta para marcharse.

Los familiares de Joaquín suspiraron tranquilos y se pusieron a hablar con Carlos y conmigo para saber que había pasado


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Mi Ángel GuardiánDonde viven las historias. Descúbrelo ahora