Capitulo 41

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JOAQUÍN

Y aqui estábamos de nuevo, la mañana estaba mas fría de lo que creía, estábamos Carlos y yo en la pequeña sala que el hotel nos ofrecía, crei que al estar ahí sentado me daría algo de calor, sin embargo, a los 10 minutos de sentado me dió sueño y mas frio por que aquella sala estaba cerca de la entrada y mejor me levanté para ver a través de los ventanales que adornaban las paredes y que dejaban ver el paisaje que nos brindaba Chignahupan, Mientras hablaba con mi hermana por Whatsapp, diciéndome que ya estaba despierta por que según ella, Canela no la dejo dormir por ladrarle al vecino que en toda la madrugada no dejó de salir y entrar a su casa

Emilio despertó antes que nosotros y me pareció raro por que él no acostumbra a levantarse temprano cada que no habia clases, decía que eran los únicos días que tenía para levantarse tarde y aun que quería preguntarle, que tenía, mis preguntas y suposiciones raras se fueron cuando me robo un beso esta mañana mientras compartiamos un momento bastante romántico a decir verdad, habia pasado tiempo desde que nuestro último beso sucedió y crei que se habia olvidado de los sentimientos que teníamos el uno por el otro, pero aquel tierno y romántico beso, me comprobó que lo que yo me estaba creando en mente no era cierto. El que Emilio me cantara me confirmó de nuevo que tenía una hermosa voz al cantar, una voz que todos tenían que apreciar, su voz merecía que todo el mundo le aplaudiera

Carlos estaba viendo lo que el restaurante ofrecía para desayunar y aun que me daban ganas de probar todo, era muy temprano y sabia que estaría comiendo a todas horas en la tarde

-Mira Joaquin, estaba viendo la leche y me pregunté ¿Por que la leche sale empaquetada?.- me dijo Carlos al mismo tiempo que veía la cajita de leche sabor chocolate, lo miré incrédulo, sabia que estaba jugando,

-Ay pues no seas tonto, por que la plantan en el piso y sale una planta de leche con cajas de cartón.- le seguí el juego mirando su reacción

-¿En serio?.- yo asentí-. Pero entonces ¿No ordeñan las vacas?.- quitó su vista de la cajita de leche

-Las vacas ni existen.- me reí

-¿No?.- preguntó exaltado

-Eso es una mentira, un mito, es mas, tienen distintas plantas de cajas de leche para que salga de diferente sabor.- me reí y antes de que él dijera algo, llegó Emilio con nosotros

-De que hablan?.- nos miró

-Joaquin me dijo que las vacas no existen.- le contestó Carlos quitando la envoltura de el popote que tenía la caja de leche se concentró en tomar el liquido que tenia dentro

-¿Como no van a existir?.- contestó burlón-. ¿Y que no se supone que debes de pagar eso antes de tomarlo?.- señalo la caja de leche que estaba entre las manos de Carlos

-Bueno, ahorita la pago.- contestó mi amigo restándole importancia a lo que habia dicho Emilio-. Escuché que cuando vayamos para Veracruz vamos a bajar a el centro

-Wow en serio? Sería divertido.- contesté con entusiasmo-. ¿Cuando escuchaste eso?

-Hace rato.- me contestó agitando la pequeña cajita que ya no tenía leche, para después, apretarla-. Cuando pase por la habitación de la mamá de Diego, escuche que se lo dijo a su hermana

-¿No usaste el elevador?.- lo miré

-No.- contestó divertido

-¿Se lo dijo a la hermana de la mamá de Diego?.- preguntó Emilio con burla

-No.- lo miró-. La señora Miriam se lo dijo a su hija, creo que es Cristal, la que tiene 4 hijos

-Ha ella.- le restó importancia

-Como creen que sea Veracruz?, Yo he visto en internet que es muy bonito.- hablé yo, regresando al tema

-Creo que iremos a dos lugares de Veracruz

Carlos y yo comenzamos a hablar maravillas de Veracruz, las mismas maravillas que mencionaban los videos de YouTube y que yo ansiaba poder conocer, moría por poder probar la comida de haya y poder ver los increíbles atardeceres cerca de el mar

-Por dios, solo es un Estado mas.- nos interrumpió Emilio con un tono de falsa alegría y camino para ir al elevador

-¿Amaneció de mal humor?.- dijo Carlos viendo como caminaba con prisa para el elevador, supongo que iba a buscar a Diego

-Supongo.- le contesté viendo a la misma dirección que él, aun que me pareció raro, cuando me desperté a verlo estaba muy animado

EMILIO

-¿Tu sabias que íbamos a ir a el centro de Veracruz?.- le pregunté a Diego cuando entró a la habitación

-No, me acaba de decir mi mamá.- me contestó sentándose en la cama que acababa de estar recién hecha

El silencio reinó en la habitación, por lo que revisé mi celular. Aun que Míriam le había marcado a Diego desde temprano, la mayoría de sus familiares aun no estaban en la planta baja de el hotel, por lo que nosostros decidimos aun no desayunar y tampoco bajar las enormes maletas que nos acompañaban, iba a ser desgaste físico y mas tarde no sabríamos que hacer con ellas por que no sabríamos a que lugar iriamos, por eso regresé a la habitación cuando Carlos dio la maravillosa noticia de que si iriamos a el centro de el Estado en donde yo habia nacido.

Mamá tenía razón, tal vez habia sido mala idea en venir a este viaje, tal vez los recuerdos de mi trauma regresarían sin que yo pudiera evitarlo, tengo el presentimiento que nada será como yo lo tenía en mente, tal vez y me aleje de Joaquín, de Carlos y de Diego. Tal vez y hasta me regrese a casa en un intento por dejar de pensar en lo que sucedió hace muchos años. Pero era venir a este viaje o tener que dejar de ver a Joaquín, a puesto que a él no le tomará mucha importancia a que no esté con ellos en la fiesta de fin de año y navidad si es que yo me alejo de ellos

-¿Estas bien?.- escuché a Diego preguntar-. ¿Aun tienes sueño? ¿No dormiste bien?.- me miró con preocupación mientras sacaba cosas de su maleta

-Eh.. No, no es eso.- suspiré y que me quedé en silencio solo segundos  mientras buscaba algo imaginario en mi mochila-. Solo que.. Veracruz me recuerda muchas cosas y también mucho a mi papá, se que es ilógico que recuerde, tenía como 6 años y medio cuando venimos a la ciudad de México.- contesté en voz baja aun que con el silencio que habia en la habitación, él me escucho perfectamente

En parte, eso era verdad y es que en sí, el simple hecho de decir el nombre de ese bello estado me causaba mucha conmocion, la muerte de mi padre, la falta de atención y ausencia por parte de mi madre y el abuso sexual que tuve ahi me aterraba la idea incluso que lo mencionarán, no quería regresar ahi ni aun que fuera por obligación por un papel importante

-Escucha, se que no arreglare nada diciendote "no estes triste" pero deberías de recordarlo de manera feliz.- sonrió-. Además, ahi estaremos los cuatro y olvida que voy a dejar que te hundas en los pensamientos eh.- soltó una risita que yo también lo seguí-. Recuerda que ya no estas solo Emi.- me sonrió de nuevo y me obligó a cambiar de tema mientras yo sobrepensaba todo

Después de minutos, subieron Joaquín y Carlos, diciendo que teníamos que poner en la mochila traje de baño y un cambio de ropa por que iriamos a unas aguas termales y que bajaramos con las maletas, parecían niños chiquitos cuando llegan emocionados diciéndole a sus madres que se apresuraran para irse a la alberca y estar ahi todo un día como pesesillos en el agua

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Mi Ángel GuardiánDonde viven las historias. Descúbrelo ahora