Capítulo 36

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EMILIO

-¿No creen que es increíble?.- preguntó Carlos maravillado por lo que veían nuestros ojos

-Es maravilloso.- le contestó Joaquín para después guardar silencio gracias a la seña que había echo la mamá de Diego

Nuestros ojos estaban apreciando el trabajo que nos mostraban los artesanos que con mucha paciencia pintaban las esferas, y el lugar necesitaba estar en silencio para que las personas no se distrajeran y no quedarán mal su arte. Era increíble por todo lo que pasaba la esfera solo para adornar un árbol de navidad solamente varios días al año, se hacían con tanta paciencia y tanta dedicación que deberían de apreciarse mas de lo que ya se hace, desde un inicio los familiares de Diego, mis mejores amigos y yo quedamos maravillados al saber como se hace el bonito adorno de estas temporadas y no hablábamos mas que para decir lo maravillados que estábamos por ver aquello

Y aun que al igual que mis acompañantes, que me quedaba viendo el proceso de creación de las esferas, varias veces volteaba a ver a Joaquín, solo para poder ver aquel brillo que se le forma en los ojos cuando vemos algo nuevo o ellos conocen algo nuevo de México, el mismo brillo en los ojos que se le formo cuando fuimos a ver el desfile el primero de noviembre

Después de ver el proceso por el que pasan las esferas al hacerse, nos dejaron pasar a la tienda, que mas bien parecía bodega donde ponían a la venta todos los adornos que se hacían en la fabrica

-¿Para que van a comprar esferas si no van a poner un arbolito de navidad?.- escuché a Carlos preguntar, ese chico, siempre tan curioso desde que lo conocí

-¿Quien dice que no lo van a poner?.- respondió Diego esperando a que Joaquín se decidiera por unas esferas para su madre, las que según el, le mandaría por paquetería

-Pues... Yo digo, toda la semana de navidad vamos a estar en Veracruz, tal vez en el hotel ni haya espacio para poner uno.- contestó con simpleza viendo detenidamente las esferas que se encontraban en frente de nosotros, ¿en serio creía que nos quedaríamos en un hotel?

-Somos muchos menso, no es lógico que nos quedemos tantos días en un hotel.- le contestó Joaquín burlón al escuchar la conversación

-¿Entonces nos quedaremos a acampar en la playa?.- preguntó de nuevo

-Hay veces que te escucho y me preguntó como es que pasaste de semestre en la prepa si estas tan piedra.- le hable metiendo mis manos en mi suéter

-¿Piedra?.- me miró con curiosidad

-Si, que estas tonto vaya.- me reí y me acerque mas a Joaquín con la intención de no escuchar las demás preguntas de Carlos

-No se cuales escoger.- me habló Joaquín en cuanto sintió mi presencia mas cerca-. Me gustan estas.- señaló unas de color morado y brillos naranjas con tonos plateados en varias formas-. Pero siento que parecen de Halloween.- me reí suavemente mientras seguía escuchando sus explicaciones-. O estas.- señaló con cuidado de no tocar sabiendo que con cualquier movimiento mal se pueden romper, la esfera era de color azul con varias figuras de color amarillo-. Pero siento que son muy de primavera.- reí de nuevo suavemente

-Mandale estas tú Emilio.- me habló fuerte Carlos, llamando la atención de los pocas personas que estaban de más, ya que la mayoría de los familiares de Diego, se salieron por que tenían niños y lo mas probable era que por correr tiraran y rompieran algo

Hice una señal en forma de que bajara su voz y me acerqué a Carlos y Diego que estaban de el otro lado de el pasillo de donde estaba Joaquín

-¿Cuales?¿Y yo por que le tengo que mandar algo a la mamá de Joaco?.- pregunté llegando a ellos

Mi Ángel GuardiánDonde viven las historias. Descúbrelo ahora