Seduciendo a Sr. Hwan | COMPLETA

.15. QUÉDATE CONMIGO

.15.

QUÉDATE CONMIGO

(Paula)

Abracé a mi hermana, con fuerza, en cuanto la vi, mientras Ben se unía al abrazo, era todo un amor.

- Mira a quién nos hemos encontrado en el avión – comenzó mi hermana, justo cuando él llegó hasta nosotros, con su maleta, dándome una agradable sorpresa.

- ¡Yunho! – me percaté - ¿qué haces aquí?

- Quería darte una sorpresa – añadió. Y por supuesto que me la dio, la mejor de todas, me encantaba – iba a quedarme en el hotel luz, pero tu hermana ha insistido en que me quedase con ellos en su casa.

- Mamá va a poner el grito en el cielo cuando se entere de todos los que vamos a quedarnos allí – bromeé, haciéndola reír – vamos, tengo el coche fuera.

La casa que mi madre alquiló estaba en el barrio de mamá, es decir, en el mismo barrio en el que Junsu tenía la casa. De hecho, me percaté de que no estaba lejos de su urbanización.

Saqué el equipaje del auto y acomodé las cosas en mi nueva habitación.

- Tienes que ponernos al día – comenzó mi hermana, en el jardín, justo cuando nos sentamos a tomar un helado que Ben había comprado en el supermercado de la esquina - ¿qué ha pasado con Freddy?

- Parece que se ha pillado por su secretaria, me puso los cuernos y parece que no quiere dejarla por mí, prefiere dejarme a mí por ella – espeté, haciendo que ambos me mirasen con el alma en vilo, al mismo tiempo que Yunho llegaba hasta nosotros – pero sinceramente, me da igual, en este momento me da igual lo que haga con su vida.

- Y... ¿qué pasó con Hwan Junsu? – preguntó mi hermana, sin darse cuenta de que Yunho estaba allí.

- ¿Conoces a Hwan Junsu? – preguntó, sentándose junto a mí, sorprendido por la noticia – hay rumores sobre él por toda Corea. Dicen que ha sido destituido por su hermano menor, que le gusta jugar con chicas extranjeras y que no va a luchar por recuperar lo que es suyo por derecho.

Mandé un mensaje hacia él, tan pronto como recordé que le había enviado la dirección.

Yo:

No vengas, mi amigo Yunho está aquí, sabe mucho sobre ti. No quiero que tengas problemas, que un nuevo rumor se extienda.

Tomábamos unas cervezas, hablando sobre mi viaje a Corea, entre risas, cuando la puerta principal comenzó a sonar, sin lugar a dudas sería mamá, para darles a mi hermana y su marido la bienvenida

- Paula – me llamó Ben, tan pronto como llegó hasta el jardín – Hay un tipo coreano fuera, dice que quiere hablar contigo.

Me levanté con rapidez, al mismo tiempo que lo hacían mi hermana y Yunho, corrí hacia la puerta, siento incluso más rápida que ellos. Pero cuando salí él no estaba, ¿dónde demonios se había metido?

Salí fuera y me asomé hasta a la calle, pero no había ni rastro de él. Justo iba a volver a entrar cuando una mano tiró de mí, apoyándome en la pared de la fachada.

- ¿Qué haces aquí? – pregunté horrorizada – se supone que...

- Acabo de leer el mensaje ahora – aseguró, molesto – estaba tan ansioso por verte... - no dejé que dijese una sola palabra más, tiré de su chaqueta para atraerle hasta mí y luego besé sus labios.