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Era una situación extraña ver a YunHo vestido tan informal siendo ya un príncipe, sobre todo cuando iba a tener una cita romántica. Por primera vez HongJoong elegía una camisa simple, un sweater negro, pantalones con líneas escocesas, y un abrigo marrón oscuro que no reflejaban ostentación. YunHo parecía un joven universitario yendo a clases en la mañana, y no un príncipe dispuesto a tener su primera cita con el que sería rey del país.

—Se ve hermoso de todas maneras —el asesor hizo hincapié, pues no quería que YunHo pensara que se veía mal o algo así. Incluso su maquillaje era mucho más suave, apoyando el estilo casual a su outfit—. Yo sabía que el príncipe alfa y usted tenían buena química. Estoy alegre por ambos, porque han encontrado el amor.

YunHo le había contado todo lo que estaba pasando con MinGi y claramente HongJoong no se sorprendió. Es más, le dio algunos consejos amorosos y un tapabocas a él y otro para MinGi con la intención de que pudieran pasar desapercibidos entre las personas corrientes. Todo marchaba tan bien aunque había un inconveniente que ninguno de ellos tenía planificado:

Park SeongHwa.

No es que el joven se fuera a meter a la cama con ambos, sin embargo su presencia arruinaba la intimidad que la cita se suponía debía otorgarles. YunHo dudaba mucho que lograran entrar en esa sincronía, cosa que al llegar a la habitación pudieran hacerlo con confianza y fluidez. En todo caso, no podrían deshacerse del tipo debido a órdenes de los Song, y a estas alturas, YunHo no tenía intenciones de desobedecer. Tampoco quería volver a meter a SeongHwa en problemas pues el pobre hombre había sufrido bastante por eso anteriormente.

—¿Pasa algo, tesoro? —HongJoong, como no, percibió su frustración.

YunHo bufó haciendo un puchero de inconformidad y se miró en el espejo del tocador, revisando por enésima vez su maquillaje.

—Es sólo que MinGi y yo no podremos estar solos porque el futuro consejero nos tiene que proteger por instrucciones del rey —explicó molesto.

—Ya entiendo —dijo el más bajo, analizando su situación—, va a ser vergonzoso si es que quieren besarse o hacer cosas románticas.

—Exacto —enfatizó YunHo, desganado—. No es que SeongHwa me desagrade, es un alfa simpático. No sé si lo recuerdas, hyung... 

—No tengo idea de quién estás hablando —lo interrumpió HongJoong apresuradamente.

YunHo dejó de verse al espejo y vio a su asesor curioso por la forma que este había reaccionado, pero no le tomó mayor importancia.

—Estaba con nosotros cuando el rey nos castigó, y creo que lo ayudaste a encontrar a WooYounggie. Es ese alfa delgado y con olor a laurel.

—Ah, ese —HongJoong cambió rápidamente el tema—. En fin, lo importante es que debes saber que ese tipo no va a interferir entre ustedes. Simplemente está haciendo su trabajo, que es protegerte.

—Lo sé... 

—Créeme, corazón, que esa cita será hermosa con... con SeongHwa presente o solo si están ustedes dos. No te acomplejes por tonterías y disfruta.

HongJoong siempre había sido tan bueno con él, que YunHo quería tenerlo como su asesor para siempre, incluso cuando fuera el rey. Él lo había aconsejado y apoyado en los peores momentos, y nunca olvidaría eso.

—Eso haré —aseguró más animado.

HongJoong se acercó a él un poco cohibido, y liberó una risita nerviosa. Luego preguntó lo siguiente:

—Usted... ¿Se está cuidando, cierto? Me refiero a los supresores.

YunHo obviamente que lo hacía. Si bien ahora no estaba en su celo sí tomaba pastillas para prevenir el embarazo, además de inhibidores de apetito sexual en pleno momento del celo. Además, había dejado preservativos en el cajón de la mesita que estaba al lado de su cama y por si acaso, adquirió un estimulante sexual en caso de ponerse tan nervioso que eso afectara su lubricación. Dudaba que algo así pasara porque confiaba en su esposo, pero siempre había sido un omega precavido y ese día no sería la excepción.

—Por supuesto —respondió sonriente—. Gracias por preocuparte, hyung —dijo formalmente.

—De nada, cariño.

Así que YunHo salió estoico de la habitación a su encuentro con MinGi, vistiendo como un chaebol y con un tapabocas negro tapando casi toda su bonita cara. MinGi llevaba un abrigo largo que escondía su ropa, y SeongHwa, a su lado, vistiendo un anorak abierto, dejando a la vista un simple sweater con diseño de rombos y jeans oscuros. 

—¿Vamos al cine, entonces? —consultó MinGi al omega antes de subirse al auto. 

YunHo aceptó, y como acostumbraban a hacer, se sentaron juntos en la parte trasera. Sin embargo por primera vez no se subieron adelante dos guardaespaldas, sino que SeongHwa solo, al lado del conductor. 

El alfa encendió el motor y luego se giró hacia los príncipes, asomando su cabeza entre los dos asientos delanteros con un extraño entusiasmo.

—Conozco un buen cine para llevarlos, es tranquilo y pueden besarse sin molestar a nadie —insinuó sin ningún ápice de vergüenza—, incluso con toqueteos... 

—Ya, no seas tan explícito Park —interrumpió MinGi dándole un zape que su amigo alcanzó a esquivar acomodándose en su asiento para empezar a conducir.

—¿Y cómo lo sabe, joven Park? —preguntó YunHo con una sonrisa ladina que su tapabocas ocultó, de pronto muy interesado—, ¿Acaso se ha besuqueado con omegas allí?

—Yo de hecho tuve una cita hace poco con el hijo omega del sublíder de la manada de Daegu.

—Woah... alfa travieso —lo molestó YunHo—, ¿Es su novio?

—¿Saliste con ese omega? —MinGi, al contrario, estaba algo molesto con aquello, y YunHo no entendió el por qué—. Aish, yo echándome encima a los alfas conservadores para defender tu libertad... ¿Y tú tienes citas con el omega de Daegu?  —MinGi se llevó el índice y el pulgar a la zona entre sus cejas y se masajeó, estresado.

—Tranquilo —le contestó SeongHwa sin perder la tranquilidad. Una vez salió de los terrenos del castillo, aumentó la velocidad del vehículo—, no perdía nada con hacerlo de todos modos.

—No entiendo de qué están hablando —expresó YunHo sintiéndose excluido en su propia cita, joder. Era hasta gracioso.

—El alfa sublíder de Daegu quiere casar a su hijo omega con SeongHwa —explicó MinGi conciso—, sin embargo yo le dije que SeongHwa era libre de casarse con quién quisiera y ahora todos los alfas conservadores me odian. Pero SeongHwa aceptó tener una cita con él, además de decírmelo en mi cita romántica. Es el peor amigo de todos— se quejó después cruzándose de brazos y haciendo un puchero infantil.

—Si le consuela, ya no lo volví a ver porque encontró a su pareja destinada, un alfa que conoció en... 

—No me interesa saberlo —lo interrumpió MinGi, aún enojado.

—Vaya, eso es triste. Lo lamento, joven Park —expresó YunHo—, ya llegará su pareja destinada, en serio— aseguró dándole ánimos.

—Será un omega con mal aliento y que no se baña —gruñó MinGi.

—Y nuestra cita será maravillosa —concluyó YunHo con ironía.

Sin embargo, no sabía si la cita era de MinGi con él, o de MinGi con SeongHwa. 

O bien: un desastre.




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F por Yunho

y

F POR MÍ PQ TUVE QUE RESUBIR EL FIC COMPLETO (y llevo tratando de resubir este capítulo durante horas porque wttpd no notifica a nadie que está ya publicado) 😞✊

F POR MÍ PQ TUVE QUE RESUBIR EL FIC COMPLETO (y llevo tratando de resubir este capítulo durante horas porque wttpd no notifica a nadie que está ya publicado) 😞✊

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IDEAL [yungi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora