Cuando YunHo y la señora Jung se acercaron al salón para ver qué pasaba, comprendieron de inmediato el por qué de ese intenso olor: Choi San.
San era el amigo de infancia de WooYoung, y tal como el menor de los Jung, era realmente precioso. Vestía con unos pantalones oscuros que le llegaban a las rodillas, y una camiseta tan etérea que se podían ver sus pezones bajo la tela. Llevaba su cabello peinado hacia atrás, y brillaba como si estuviera constantemente mojado, además de lucir un maquillaje espléndido: una pequeña gotita de de cristal, pegada bajo su ojo derecho, perfectamente adornado con un matiz oscuro de sombras, y sus labios rojos, lo hacían ver puro y obsceno al mismo tiempo.
YunHo no pudo evitar expresar un impresionado:
—Woah, San. Te ves perfecto con ese maquillaje.
San hizo una reverencia a los Jung, y sonrió con sus pequeños labios de forma muy adorable. Es que él desprendía, desde que YunHo tenía memoria, esa sensación de ternura. Pero ahora que estaba embarazado, su olor difuso y esa personalidad dócil, lo volvían realmente encantador tanto para alfas como para omegas.
—Si hubieras ido con nosotros, te habriamos maquillado así, Ho —WooYoung, quien se hallaba detrás de San, abrazó a su amigo por la espalda y le dio un beso en el cuello.
—Además JongHo está esperándonos afuera. A ti te agrada mi hermano, cazar lagartijas con él en el bosque y dejar que te quite las pulgas —bromeo San. WooYoung al escucharlo liberó una risotada para nada elegante, y San se alejó un poco, con un gesto afligido, porque el chillido llegó justo en su oreja.
El karma.
JongHo era el hermano pequeño de San, un beta que solía jugar con él en el bosque. JongHo, quien al ser beta no podía transformarse a su forma lobezna debido a su condición, adoraba ver a YunHo (como lobo, claro) siguiendo a las mariposas, o rascándose las orejas, mientras el intentaba seguirle el paso. Fue en una situación de ese tipo, que años atrás, San y WooYoung los pillaron a JongHo y a él, en su forma animal, obvio, muy cerca del otro. JongHo trataba de sacar de su pelaje una mariquita muy molesta y que no quería dañar con su peludo y enorme cuerpo (comparado con el bicho, por supuesto), y desde entonces ellos decían que a JongHo le encantaba quitarle las pulgas.
—Oh, ¿Y por que no ha entrado con ustedes? —consulto la señora Jung, amablemente—. El pequeño JongHo, tal como tú, San, está bienvenido en esta casa.
—Solo vinimos a dejar a WooYoung, andamos de paso —explico San, algo incomodo—. Mi alfa quiere que esté en casa antes del almuerzo.
—Ese alfa malo esta alejándome de mi San —se quejo WooYoung en voz baja, y volvió a apretar al muchacho a su pecho, oliendo su mezcla de omega embarazado, como si fuera un alfa descubriendo a su pareja destinada.
Eso era verdad, lo mencionado por WooYoung. Antes, cuando venía a visitarlos, San se quedaba hasta la cena, pero ahora lo veían mucho menos. Una lástima, pues San era muy agradable, y WooYoung lo amaba mucho.
Tanto así, que YunHo estaba seguro de que si San hubiera sido alfa (o WooYoung, en tal caso), ellos habrian sido destinados.
Pero no. Ambos eran omegas, y uno de ellos ya estaba embarazado. ¡Él incluso había cumplido los diecinueve hace unos días y ya estaba formando una familia! Los clanes antiguos eran demasiado precoces en sus tradiciones, por eso YunHo estaba un poco harto de todo eso. No juzgaba a San, realmente. Si el era feliz así, pues perfecto. Pero el no se sentía preparado para esas cosas tan pronto. Dios… ¡Su propia madre lo había tenido a los dieciséis!
Finalmente, San se despidió de todos, y se marchó. WooYoung, por otra parte, sintió el olor a pollo y fue corriendo a la cocina para robar un poco antes del almuerzo, siendo regañado por su madre, ya que “debía estar esbelto para el príncipe MinGi”.
“Estupido alfa”, pensó Yunho, concluyendo que si él intentaba comer algo tal como su hermano, iba a tener la misma suerte.
Por cierto, habiendo pasado las horas, el olor del omega embarazado seguía persistente en la casa.

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IDEAL [yungi]
FanfictionSe suponía que el perfecto y adorable WooYoung iba a ser el nuevo príncipe omega y futuro gobernante del clan de Corea del Sur. Se suponía que el chico bonito y ejemplo de omega ideal, debía casarse con el alfa heredero al trono: Song MinGi. Debía s...