𝐑𝐞𝐬𝐢𝐝𝐞𝐧𝐜𝐞 ⊹ 𝐏. 𝐉𝐢𝐬𝐮𝐧𝐠

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— Y esta es la piscina. — Dice Jaemin entrando al cuarto gimnasio del campus. Este es de natación, pero también hay de pádel, de golf y de fútbol.

De camino aquí he visto al menos cinco fuentes y diez mesas de ajedrez. Salimos del gimnasio de natación. Los cuatro centros están unidos pared con pared.

— ¿Qué hay ahí? — Señalo a la puerta que hay siguiente a la que acabamos de salir.

— Eso son las saunas y los baños.

Volvemos a la entrada de la universidad.

— Necesito. — Cojo aire. — Sentarme, durante unos minutos. — Me tiro sobre el césped, no me preocupa la falda ya que llevo un pantalón debajo. — ¿Por qué esto es tan grande? Las cosas están muy lejos. — Lloriqueo. Jaemin se sienta junto a mi.

— Por dentro es una universidad normal. Tiene unos cuantos cuadros enormes y esas cosas, pero es normal. — Suelto un suspiro.

— No tendré amigos en mi clase. — Hago una mueca de tristeza mientras me siento de la misma manera que él.

— Eso es mentira, Jisung estará en ella. —Le doy un pellizco en su brazo derecho haciendo que grite. — Agresiva.

— Me cae realmente mal, me ha pintado, en la cara, eso no se hace. — Me cruzo de brazos.

— Vamos, aún tengo que enseñarte las aulas y tienes que recoger tu horario. — Se levanta de un salto, extendiéndome la mano, levantándome a mi al segundo.

— ¿Cómo haces eso? — Pregunto frustrada, en su cara aparece un signo de interrogación. — Ya sabes, lo de levantar personas como si nada.

— Eso es porque estoy. — Flexiona los brazos haciendo posturas. — Mamadisimo. — Dice con voz más grave, provocando mi risa.

Caminamos por el edifico, sigo a Jaemin girando miles de esquinas y recorriendo pasillos infinitos.

— Voy a perder 5 kilos cada vez que tenga que ir a una clase.

— No seas exagerada. — Llegamos a un pasillo sin salida, caminamos hasta la puerta del fondo, la palabra "dirección" está sobre una placa dorada encima del marco. Él toca un par de veces la puerta, después de escuchar un adelante ambos entramos a la habitación. Una mujer con un conjunto gris y unas pequeñas gafas está detrás del escritorio.

— ¿Lee Yoon, no es así? — Asiento. — Me llamo Iris, soy la directora de Rewert School, encantada de conocerte. — Hago una reverencia frente a ella.

— Igualmente. — Digo en el mismo tono serio.

— No tengo mucho tiempo para hablar contigo, los lunes son días ajetreados. Aquí tienes las llaves de tu casillero, es el 135. Pásate por secretaría y allí te darán tu horario. Espero que tu estancia aquí sea agradable.

— Gracias. — Cojo las llaves de la mesa mientras vuelvo a hacer una referencia y salgo de dirección junto a Jaemin. — Es una persona muy seria, ya me ha caído mal. — Digo frente a la puerta de secretaría, él ríe mientras vuelve a dar varios golpes sobre esta. Un señor un poco más bajo que yo abre la puerta.

— Hola. — Dice con una amplia sonrisa.

— Hola, soy nueva, la directora me ha dicho que recoja mi horario. — Digo con una leve sonrisa, este hombre es muy tierno, me recuerda al perro que tenía mi abuelo.

— Adelante, podéis esperar dentro mientras se imprime. — Los dos pasamos, las paredes están decoradas con posters motivacionales de animales y hay cajas de galletas por todos lados. Él pasa delante de nosotros dirigiéndose hacia la impresora. — ¿Galletas? — Se gira repentinamente.