Ordinary World. (Tony Stark y tu)

Capítulo 84

Después de una larga siesta, Elisse despertó. El color de sus ojos ya no era cambiante, sino que eran totalmente violetas. Su pelo estaba más platinado que de costumbre, casi blanco. Y su piel se había tornado de una tez más clara.
Pero sin duda, lo que más se destaca es su mirada fría y distante. Es como si fuera el mismo cuerpo pero un alma totalmente distinto. Al mirarla, no la veías a ella... era aún peor que cuando perdió sus recuerdos.

Al despertar, se encontró con Tony tendido en su pecho mientras le lloraba. Esta situación le causo repugnancia y lo alejó tirándolo hacía un lado para ponerse de pie, y luego sacudirse la ropa concretamente dónde había estado apoyado él.
Ella dirigió su mirada analizando a cada uno de ellos, como si los conociera por primera vez. Ninguno entendía nada, ni siquiera el propio Loki pero todos sabían que no era nada bueno.

—Tú.—digo ella dirigiéndose a su hermano menos querido.–Loki.

Éste seguía abajo de Thor. Por lo cuál ella con un simple movimiento de cabeza hizo volar a Thor lejos para que su otro hermano estuviera libre.

—¿Qué prosigue?—preguntó interesada. Loki al principio no supo que responder, estaba atónito. A lo que ella continuó.—¿no tenías un plan?—al decir esto él asintió rápidamente.—¿y qué esperas para decírmelo?

—Si... eh, si.—volvió a afirmar él.—el plan era simple; invadir los nueve reinos para luego reinar juntos sobre todos.

—Perfecto.—aceptó ella.—¿por cuál comenzaremos?

—¿Qué?–exclama Steve muy confundido.—¿te haz vuelto loca?

—Por este, por la Tierra.—contesta un muy sonriente Loki.

—No.—se niega ella.—la Tierra no.
Al decir esto se escucho un gran suspiro aliviador por parte de algunos de los vengadores.

—¿Por qué no?—cuestiona Loki no convencido.—no me digas que te encariñaste con esta gente... ¿los protegerás?

—No tengo interés alguno por este reino, son totalmente inútiles y sin poder alguno que me beneficie.—confesó ella como excusa.—sácales del radar... ¡y cierra ya el agujero!

—No creo que eso sea posible...—anuncia Loki con un poco de miedo.—lo de sacarles del radar.
Aclara.

—Todo me es posible a mi.—afirmó ella mientras se acercaba con paso firme a él.—debes entender eso.

—Yo lo entiendo, tampoco me interesan los terrícolas.—se defendió él al instante.—pero a nuestro jefe si le interesan... y mucho.

—¿Jefe?—pregunta ella esbozando una risa irónica.

—Si, él es increíble.—contó Loki maravillado.—tiene un poder sin igual, con él reinaremos todo el universo. Su nombre es Thanos.

—No me dijiste nada sobre un jefe.—aclaró ella muy molesta al respecto.— creí que el plan era tuyo. Gobernaríamos juntos, no con ese tal Thanos.—siguió aclarando ella y él no supo que decirle, solo le hacía titubear.—llévame con él, deseo conocerlo.

Loki no tenía mucho libre albedrío, debía hacer lo que su hermana menor le ordenara hasta al menos tener un poco más de confianza en la nueva versión de ella. Aún no la conocían, no sabían de lo que era capaz, solo sabía que tenía mucho poder y era peligrosa. Por lo tanto, deberían actuar con cuidado.
Antes de que Loki pudiera realizar su magia y llevarla a donde estaba el titan loco, Thor intervino.