La vida de ella cambio de repente cuando su padre la desterró de Asgard por "traición al rey".
Y la de él cuando la vio por primera vez en un pequeño y casual accidente.
El amor es hermoso por qué es complicado, imperfecto, y en ocasiones hasta resu...
Había encargado una pizza hace 20 minutos y todavía no había llegado, estaba muriendo de hambre y cocinar nunca fue mi fuerte.
Ya había pasado todos los canales de televisión y nada interesante, termine optando por mirar los simpson.
Recordé que hace algunas semanas atrás un colega me había invitado a su boda, estaba tan aburrido que recordar eso fue como una gota de agua en pleno desierto. Tome el celular y llame a Rhodey, claro que no iría solo.
Llamada telefónica con Rhodey
—Hola, ¿qué pasa?—atendió Rhodey
—¿Puedes creer que hace 20 minutos encargue una pizza y todavía no llego?.— cuestione
—¿Me haz llamado para informarme que no llego tu pizza?
—No, te llame para invitarte a una fiesta.—dije sin rodeos
—Paso. Tengo mucho trabajo hoy, ¿ah... conoces el significado de esa palabra?—soltó en tono burlón
—Venga hombre, sera un rato y ya de paso sales y te despejas, te hará bien. —insistí
—Adiós Tony, ¡que te diviertas! —me colgó y yo quede como un tonto hablando solo
¿Pueden creer que el muy cabrón me colgó el teléfono? yo le marco con la buena intención de invitarle a una fiesta para que se distraiga un poco del trabajo y se divierta, y el tipo me dice ''paso'' estoy indignado, y creo que necesito un nuevo amigo.
Ahora si que estaba fastidiado, no tenía ganas de quedarme aquí sentado mirando los simpson toda la noche, pero tampoco iría a una boda en la cual solo conocía al novio y no lo veía desde la facultad.
Tome las llave del auto y decidí ir yo mismo por mi pizza, era la primera vez que una pizza tardaba tanto, tal vez no tenían personal o llevaban un día complicado y no tenía idea de complicarselo más.
Iba conduciendo un tanto acelerado; la calle estaba tranquila y despejada. Me encantaba conducir así; sentir el viento en la cara mientras avanzaba más y más, pero faltaba algo... Puse el automático y busque el disco de Iron Maiden que si no me equivoco lo había dejado por aquí... ¡Acá esta! estaba a punto de ponerlo cuando se descontroló el volante, el disco voló de mis manos pero llegue a tomar el volante a tiempo y parar el coche. Bajé del auto para ver si el disco aún seguía bien y tomarlo, pero me lleve semejante sorpresa...
¡Joder! ¿Qué diablos? Había atropellado a una chica, juraría que ella no estaba ahí, es como si hubiera caído del cielo. Esto tiene que ser una broma. ¿Cómo podía ser posible? ni siquiera vi de donde vino. Atine en seguida a ayudarle.
—¿Estás bien? —la ayude a levantarse. Ella me miraba extrañada, tenía una mirada tan dulce que pareciera un ángel mismo, yo no creí en el amor a primera vista pero es que...¡¿diablos, qué estoy pensando?!
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—¿Estas lastimada, te duele algo? —pregunté preocupado y ella solo negó con la cabeza, pero vi una mueca de dolor en ella cuando se levanto.
—Dios, dí algo. Acabo de arrollarte con mi auto y solo me miras raro, insúltame aunque sea.—dije ya algo desesperado
—Estoy bien, gracias por ayudarme. — dijo al fin. ¿Ayudarla, acaso estaba siendo sarcástica?
—De verás lo siento, no sé como sucedió pero no te vi. —me disculpe con ella.—¿Levantarás cargos?—pregunté, y era obvio que lo haría, podía sacar mucho provecho de esto
—No. — contestó y me dejo muy sorprendido
—Vaya, déjame invitarte a cenar aunque sea... justo estaba yendo a busca pizza. —Le ofrecí, y volvió a negarme con la cabeza.—¡que terca! déjame ayudarte con algo.—volví a decir, me sacaba de quicio
—¿En dónde estamos? —pregunto ella, ¿habría perdido la memoria? joder
—¿Estás perdida o no recuerdas nada?—pregunte asustado
—¿Qué lugar/mundo es este? —ahora era yo quién la miraba extrañado. Mire hacia mis alrededores, tendría que haber alguien escondido grabando esto.
—¿Bebiste o consumiste algo las últimas horas?—cuestione, notablemente esta chica estaba drogada.
—Me ayudarías mucho contestándome, ¿qué mundo es?— ella volvió a insistir y me di cuenta que iba en serio.
—Bueno, pues... La Tierra.— suspiré, ella se quedó un rato mirándome y después contestó.
—Gracias, de veras me haz ayudado. Te debo una—dijo y se fue caminando.
La observé irse mientras se alejaba e iba haciéndose más chiquita hasta desaparecer. <Wow, eso si que fue extraño> pensé. Mire para mi costado y ahí estaba el disco, sonreí automáticamente al verlo después de todo gracias a él conocí a esa misteriosa chica... que joder, ni su nombre le pregunte.
Tome el disco y quedé observando la portada de Fear of the Dark un rato largo recostado en la parte delantera del coche, hasta que mi estómago interrumpió y recordé el verdadero motivo por el cual estaba allí; ¡Mi pizza!
P.O.V Elisse
Mi padre me había desterrado de Asgard por no cumplir con el juramento que prometí, y ahora me encontraba en un mundo totalmente desconocido; La Tierra.
¿Qué se suponía que tenia que hacer? ¿Cómo sobrevivir en mundo que no conoces, no sabes como se rige, que no sabes sus reglas? Si descubren que no soy de aquí estaré en graves problemas, tenía que adaptarme, ser como ellos. ¡¿Y cómo se suponía que eran ellos?!
Desde que llegue a este extraño mundo solo hable con una persona. Era un hombre, lo note muy preocupado al pensar que me había pisado con su vehículo. Jamás había visto uno así en Asgard pero aquí eran muy comunes, les llamaban ''Auto'' <debo conseguir uno de esos> pensé.
A pesar de estar en otro mundo que no tiene nada que ver con Asgard ni los nueve reinos, es muy parecido. Las costumbres de las personas, el amor de sus familiares entre sí. Las parejas juntas, los niños en las calles.
La Tierra era un lugar hermoso y parecido a mi reino. Por fin comprendí el lenguaje universal de que tanto mi padre hablaba, y es que por más que este en un mundo sea totalmente contrario a lo que es Asgard podía entenderlo, y esto es por algo tan simple como el ''lenguaje universal'' sonreí al darme cuenta, y seguí caminando mientras observaba todo a mis alrededores.
