The Driver (Six Underground)

7- Feelings.

Alice subió al auto del ruso algo aterrada, pero confiando de que el equipo no la dejaría sola.
En el camino el hombre hablaba de cosas aleatorias con ella, intercambiando algunos toques. Ocho estaba más ocupada en que él no notara que los seguían.
Para suerte de ella decidieron ir a la casa que habían acordado con el equipo, asique parte del miedo se esfumó. Al entrar ella comenzó con lo planeado.

—Besas muy bien muñeca- dijo el hombre robandole una risa-.

Mientras caminaban a la habitación se despojaron del vestido de Ocho y de la camisa del ruso.
Mientras tanto el equipo entraba sigilosamente para no poner en riesgo la vida de su compañera.
Tres y Siete fueron quienes entraron a la habitación, ganandose un grito de sorpresa y alivio por parte de Eight, para luego llevarse al ruso.
Mientras que Cinco tomaba el vestido para que su compañera se vistiera y así volver al auto.

—¿Estás bien?

Alice asintió mientras se colocaba de nuevo la prenda. Billy entró a la habitación sin aviso ganandose insultos por parte de Amelia, por su parte Ocho seguía ignorandolo.

—¿Estás bien Ocho?

Unos disparos alertaron al equipo, saliendo inmediatamente de la casa, Billy intentó tomar el brazo de Alice mientras que ella lo esquivaba y corría fuera de la casa para ayudar al equipo a escapar.

—Esto estaba siendo demasiado fácil- masculló Ocho mientras encendía el motor-.

—Debemos perderlos- dijo Cinco en el asiento del copiloto-. Sabes qué hacer Ocho.

Ambos autos salieron en direcciones diferentes. Dos, Cinco y Diez disparaban intentando perder a las dos camionetas que los seguían de cerca.

—Agarrense- gritó Ocho mientras giraba bruscamente-. Carajo, este tráfico es una mierda.

—Que bonitas palabras- se burló Diez-.

—¿Escuchamos un poco de música?

—¿Todos los conductores van a poner música?- se quejó Dos estirandose para apagar el estereo-.

—No seas aguafiestas, me estaba divirtiendo en ese club- dijo aún con la vista en el camino-. Aún tengo ganas de bailar.

Tuvo que frenar de golpe al ver que se atravesaba la otra mitad del equipo seguidos por tres autos.

—¡Acelera, acelera!- gritó Cinco desesperada-.

—Se notaba que te divertías en la fiesta- bromeó Tres por el auricular-.

—¿Están bien?- habló Siete-.

—De maravilla- respondió Diez- ¿Ustedes?

—He estado mejor- respondió Nueve-.

—Muy bien Ocho, debes ir donde Cuatro para que te quite a uno de encima.

—Si señor- giró y volvió al lugar donde todo comenzó-.

Con el giro perdieron a uno de los autos que cayó a un río.

—¡Carajo!- exclamó Diez-.

—¿Qué? ¿Estás herido?- preguntó Cinco alarmada-.

—Si, lo está, le dispararon en el abdomen.

—¿Ya están cerca?- preguntó Cuatro-.