Tenía razón. Las cosas resultaron en que Harry dio un paseo en Hipogrifo y el idiota de Draco resultó herido en el brazo al desafiar e insultar al Hipogrifo, cómo si ya no hubiesen dicho que son criaturas orgullosas, que si no le haces una reverencia no les hables.Ahora tenemos a un Draco en brazos de Hagrid de camino a la enfermería lloriqueando.
—¡Deja de llorar que no te vas a morir! —le grité por sobre sus gritos. —Solo fue un rasguño.
Pero el solo gritaba como si fueran sus ultimas horas de vida. Ahora estaba en la camilla con el brazo sano y vendado porque la señorita Pomfrey es milagrosa.
—¿Te moriste? —le pregunté sentada al lado de la camilla con una carcajada retenida en la garganta.
—Callate Black. —me respondió con un gruñido.
—Eres un tonto. Está bien que molestes a Harry, digo, es tu archienemigo, pero mira que acercártele así a un Hipogrifo de esa manera. —le dije luego de soltar unas risitas.
De Draco solo recibí gruñidos y uno que otro insulto, hasta que se formó un breve silencio entre nosotros y decidí romperlo.
—Sé que somos primos. —dije fijándome en mis manos que se tomaban entre sí. —Mi padre…
—Ya lo sé. —me cortó antes de siquiera decirlo. —Ya lo sabía. Mi madre me lo dijo.
—Sé que más nadie lo sabe porque sino el mundo estaría en pánico. —dije mientras soltaba con voz chillona: “!Es su hija! ¡No puede ser! ¡Auxilio!” recibiendo algunas risas de su parte.
—Más nadie lo sabe, piensan que eres una bastarda ladrona que quiere la fortuna de los Black. —dijo luego de tomarnos un respiro.
—Lo sé, disfrutaré un poco más de esa privacidad. —Dije levantándome dispuesta a irme—Descansa, necesitas fuerzas para tu obra. Casi pierdes tu poderoso brazo.
Horas más tardes en el comedor con algunos estudiantes haciendo sus deberes se escuchaba a Draco lamentarse sobre su brazo con Pansy a su lado viéndole como si hubiese sobrevivido a un ataque de Dragon, y el trio de oro en su mesa viéndole también, diciendo seguramente algunos insultos.
—¡Lo vieron! ¡Lo vieron! —Un chico entró gritando y decidí ignorarlo concentrándome en mis deberes. —A Sirius Black…
Me paralice en mi sitio, pero me recompuse al instante manteniendo mi atención en esa conversación.
“Eso está muy cerca, No vendrá a Hogwarts ¿O si?”
“Hay Dementores en las entradas”
“Dementores… Ya los pudo engañar antes, creo que podrá hacerlo ahora”
Se escuchaban comentarios sobre el tema mientras digería la información, mi padre se acerca cada vez más a Hogwarts…
—¡Eh, Harry! —escuché que dijo Seamus Finnigan, inclinándose para cogerle prestada a Harry la balanza de bronce— ¿Has oído? El Profeta de esta mañana asegura que han visto a Sirius Black.
—¿Dónde? —preguntaron con rapidez Harry y Ron.
Al otro lado de la mesa, me fijé que Malfoy levantó la vista para escuchar con atención. Supongo que debería sentirme afortunada de estar detrás de ellos para escuchar todo.
—No muy lejos de aquí —dijo Seamus, que parecía emocionado— Lo ha visto una muggle. Por supuesto, ella no entendía realmente. Los muggles piensan que es sólo un criminal común y corriente, ¿verdad? El caso es que telefoneó a la línea directa. Pero cuando llegaron los del Ministerio de Magia, ya se había ido.
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Love me, Potter | Harry Potter
Hayran KurguY siempre estuve ahí; y siempre fui yo. Muchos creían que sólo era un juego, pero es más real de lo que parece. -Yo... yo no sé cómo agradecerte-dijo Él sonriendo con nerviosismo. -¿Agradecerme?-Una carcajada salió de su garganta-Ámame Potter.- Si...