Oportunidades

6.5K 313 8
                                    

Narra Marcus

Qué dolor de cabeza me da la jubilación de mi padre. Se cree que puede apartarme de todo y abandonarlo todo dejándomelo a mí de un día para otro.

Precisamente me perdió de vista para que no estuviese en ese mundo, y ahora me lo cede todo...

Me preparo una tila y abro las cartas del día.

Hay varias de mi padre, como si no supiese lo que es el email. También hay un puñado de cosas que pagar y cuando llego al final, veo una sin remitente, sin sello y sin destinatario, cosa extremadamente inusual.

No es posible que haya pasado por la oficina de correos y que esté el sobre en blanco.

Me coloco unos guantes de látex y una mascarilla por si contiene veneno, pero todo parece correcto, son solo un par de papeles escritos en tinta negra, a mano.

Y es su letra.

Me arranco la mascarilla y busco la primera página de la carta con urgencia. Conociéndola, tendré que descifrar algo.

Adrián, sé que ha pasado tiempo pero por fin tengo esperanzas de poder contactarte con esta carta, necesito que sepas de mí.

Mi vida ha cambiado radicalmente, he caído muy rápido y profundo y volver a salir me está costando mucho. Sé que trataron de culparte de un delito que ambos sabemos que no cometiste. Yo lo vi todo y estoy atrapada pero necesito que sepas que estoy bien. Todo lo bien que podría estar.

Sabe lo del asesinato de sus padres y sabe que me culparon de ello. Estaba presente dice... conociéndola, le habrá costado mucho recuperarse de ello.

Y si ya empieza a decir que está todo lo bien que podría estar hay dos: o está muy mal y no quiere decírmelo, o está bien y eso la hace estar mal. Victoria es alguien que se culpa de todo, hasta de lo que no tiene culpa y sentirse bien la puede estar matando por dentro.

Solo el tiempo puede ayudarme, ya lo ha hecho y lo sigue haciendo.

Ahora eres lo único que me queda, me han contado cosas de ti que me han asustado, pero jamás he confiado en nadie más que en ti así que todo está bien.

Como me hayan descubierto y sepa de mi pasado, no volverá a ser ella conmigo nunca más.

Te pido que no me busques, podría ser peligroso y si tú me faltas, ya no me queda nada.

Lo pide de verdad, no quiere que la busque, pero por mí. Cada día es más idiota.

Mis días aquí ahora tienen un sentido, he encontrado luz y debo usarla para iluminar a una chica que me acompaña, ella está más perdida que yo y lo necesita.

Y aunque se esté desmoronando, ella siempre pondrá la vida de los demás delante de la suya propia.

Porque que me nieguen la libertad que tengo por derecho duele, pero yo soy más fuerte que eso.

Tuya en alma; Victoria <3

Esta niña...

Va a estallar y sigue siendo optimista.

Tengo que encontrarla, tengo que...

Cierro los ojos tratando de centrarme. Tengo que encontrarla.

Suspiro hondo y cojo la otra hoja, esta está escrita con rapidez, se nota por la calidad de la letra. Escrita a lo desesperado y en días distintas puesto que la tinta es distinta.

«He luchado en vano. Ya no quiero hacerlo. Me resulta imposible contener mis sentimientos. Permítame usted que le confiese cuán ardientemente la admiro y la amo»

Me gusta mucho esa cita pero más aún esa tarde que pasamos juntos en nuestro lugar especial, casi vivíamos allí de la cantidad de veces que fuimos ese verano.

Me hubiese gustado tener una casa por esa zona, o alguna parecida, pero ya nada puedo hacer.

Esa cita es de Orgullo y Prejuicio, ella me leyó el libro en el bosque. Acabamos reventados y juramos que no volveríamos a andar tanto, así que el que haga este recalque con el lugar quiere decir algo.

El que la reptó vive en el bosque y sabe de mí, son dos puntas importantes.

Y si ha cambiado de idea respecto al rescate es que algo le ha pasado y debo sacarla de allí cuanto antes.

Se lo debo.

MineDonde viven las historias. Descúbrelo ahora