Un Error Puede Cambiar Muchas Vidas

Debilidades

Las hermanas vuelven a la mansión, un poco más tarde de lo usual porque después de todo se van a quedar a dormir y no hay afán, entre más lento transcurra el día mejor.

— ¡Volvimos! — dice la más alta entrando en la sala, la reacción es la misma que al día pasado con la excepción de que Ruby salta sobre la peli blanca sentada en el sofá.

— ¡¡QUÍTATE IDIOTA!! — regaña haciendo crecer picos de hielo por su cuerpo y obligando a la joven Rose a alejarse.

— Veo que se llevan bien — comenta Yang sonriendo divertida mientras ve a la heredera sonrojarse y apartar la mirada enojada—Cómo sea, estuve pensando que cómo los entrenamientos no han salido tan bien... — dice recordando lo sucedido con anterioridad.

— ¡Vamos a jugar Volleybol! — interviene Ruby saltando con entusiasmo.

—¡Hey! ¡¡Esa era mi línea!!— exclama la más alta mirándola con ojos entrecerrados.

—¡Muy lenta! — mientras las hermanas pelean blanco y negro se miran confundidas.

—¿Y exactamente cómo vamos a hacer eso? — cuestionan levantando una ceja.

—Esa es una muy buena pregunta, y para eso tenemos a Weiss — la rubia sonríe ampliamente y mientras la heredera se prepara para reclamar, Ruby la toma de la mano y desaparecen en una mezcla de pétalos bicolor—¡Vamos! — Yang toma la mano de la pelinegra y ambas corren hacia el jardín.

Cuando llegan ya hay una malla creada con hielo en mitad del césped.

—Se va a derretir — advierte la ojiazul entrecerrando los ojos a causa del sol.

—Puedo ayudar — los ojos de Blake brillan y varias sombras intermitentes se enredan al rededor del hielo —La protegerán un poco —

—Listo, no hay límites, sólo no hay que dejar que el balón toque el suelo — Ruby sonríe y desaparece para dos segundos después aparecer con una pelota de tamaño mediano.

—Pfffff eso no va a durar ni un segundo — la rubia le pide a Weiss que la cubra con hielo y para no romperse las manos la fauno del gato la envuelve en sombras—Parejas, me voy con Blake — cada dúo se ubica en su parte correspondiente y el equipo WR se encarga de sacar.

—Espera, ¿Cómo se juega? — pregunta Blake, nunca había practicado algo parecido y aunque sabe como funciona el deporte nada es normal cuando tiene que ver con las hermanas.

—Es lo mismo, pero con semblanzas, observa y aprende —van a empezar suave hasta que las principiantes entiendan.

—Weiss, ¡Acá! — la peli blanca mira a su compañera elevándose en el aire, lanza el balón y cuando este llega a su objetivo es recibido con una patada potente.

—¡¡Blake no lo dejes caer!! — Yang mira como el balón va en dirección a su compañera, la fauno del gato pasa saliva y extiende los brazos creando una plataforma negra, la bola se unde en ella y es devuelta con gran velocidad hacia la ojiplateada golpeándola en la cara y haciéndola caer al suelo

—... —

—...—

—...—

—Eso fue... — Yang mira a su hermana sobándose la frente con una lágrima involuntaria saliendo de su ojo derecho y a Weiss corriendo para verificar el estado de su compañera.

—¡¡ASOMBROSO!! — Ruby se levanta como si nada dejando a la heredera confundida —¡¿Ya entendiste Weiss?! Ahora si ¡¡Vamos con toda!! —

La peli blanca suspira y comienza el partido de verdad, si la reacción de Blake fue considerada extrema, las chicas no tenían idea de lo que vendría después de eso.