Corazones rotos

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Maia y yo nos quedamos sin habla y cuando se separan Trina nos ve y abre los ojos sorprendida.
No se si alegrarme o enfadarme. Aunque no se porque debería enfadarme, se aman.
Me llevo las manos a la frente y entró de nuevo en la casa ignorando a Trina quien nos habla, ¿y si puedo estar con Will? ¿A escondidas?
Las emociones se amontonan y veo como Alex empapado y con una toalla se acerca.
—¿Le dirás a Tyler?— veo hacia afuera y Trina está hablando con Maia.
— ¿Eso es por lo que se fueron?— y me abandonaron, pienso.
— Queríamos un tiempo a solas para conocernos mejor.— frunzo el ceño.

— Pero ya se conocían bastante bien!— en eso Maia y Trina entran y me ven un poco agitada.
— Me refería a otra cosa.— dice Alex agachando la cabeza.
Ah. Sexualmente.
— Bueno pudieron haber avisado o algo.
— Te vi a ti con Will y supuse que también estaban saliendo.— abro la boca sorprendida al igual que Trina y Maia y me llevo las manos a la cabeza mientras Trina grita.— ¿ESTAS SALIENDO CON WILL?
En eso se escucha la puerta de la casa que se cierra de un portazo y Tyler entra en la casa pasmado por el grito de Trina.
Oh no, ¿es que este día podría ir peor?

— ¡Claro que no!— corro hacia Ty que me quita la mano bruscamente.
— ¿Como pudiste? ¡DÍMELO!— me agarra de los hombros y me agita muy bruscamente lo que hace que Alex intervenga.
— Tranquilo, se que son las reglas pero solo los vi escabullirse juntos...
— ¡No me importan las reglas!— entonces mi alma se va a mis pies, y quiero correr y cerrarle la boca a Ty por lo que va a decir enfrente de Maia, quien se ve confundida al igual que Trina quien también se acercó cuando vio como Tyler se comenzó a poner violento. — ¿Después de lo de ayer?— Tyler agacha la cabeza y creo que veo sus ojos llorosos en su cara rojisima.

— ¡No estoy saliendo con nadie, estoy cumpliendo las reglas Ty!— le levanto la cabeza y veo como me mira tratando de ocultar lo que siente.
— Las reglas no importan. ESO ES LO QUE QUERÍAN SE LOS DOY!— agita los brazos rindiéndose y Trina se muerde el labio.
— ¿De que hablas?— dice Maia acercándose a Ty tal vez creyendo en una oportunidad.
— Las incumplí.— dice Ty.
No. Esto no está pasando.
— ¿Se los dices tú o yo?— veo que Tyler me está viendo y ahora todos me están viendo.
Los ojos de Maia se ponen vidrosos y abre la boca solo un poco y mi corazón se rompe con esa escena.
Trina se cubre la boca.— No lo hiciste Van.
Me agarro la panza para calmar mis nervios y asco de mi misma qué me doy ahora mismo.— Técnicamente no rompimos ninguna regla.

— ¿Así que no tuvieron sexo?!— de Maia alterada.— En el camino cuando te pregunte... soy una tonta.
Maia comienza a llorar al igual que Tyler quien ya se está secando las lágrimas y veo como Maia camina hacia su habitación.
— ¡Maia espera! ¡NO, NO TUVIMOS SEXO!— grito frustrada y Trina se debate entre quien abrazar a mi o a Maia y se va por Maia dejándome a mi sola con mis pensamientos destructivos.— Lo siento mucho... yo
Maia se detiene a escucharme, se me quiebra la voz cuando hablo pero logro terminar.— Nos besamos.
Maia suelta un suspiro de dolor y Trina la abraza más fuerte, Alex se ve demasiado incómodo y Tyler camina afuera de la casa. Esta situación me supera y no se que hacer.

— ¿A donde vas?— le digo.
— Tengo un partido.
¿Como arreglo las cosas con Ty sin hacerle parecer a Maia que me gusta?
— ¡Eres un idiota Tyler!— grita Trina aún abrazando a Maia.
— ¿Yo? ¡Ella fue la que me ilusiono para después enterarme que sale con alguien más!— agarra las llaves y abre la puerta.
— No lo digo por eso.— dice Trina quien se lleva a Maia arriba y me dice con los labios sin hablar un "lo siento" asiento y persigo a Tyler.
— ¿No lo ves?— corro pero no lo alcanzo a tiempo y se sube al auto, por la ventana meto mis brazos.— Maia es la que está enamorada de ti. Le rompiste el corazón allá.

— Déjame solo Vanessa.— trata de cerrar el vidrio pero no lo dejo.
— ¿No te importa tu mejor amiga? ¡Nunca rompí las reglas! ¿De acuerdo? Así que deja de sentir lastima por ti y date cuenta que lastimaste a tu amiga.
Tyler enciende el auto.— ¿Es que no lo ven? Puse las reglas por una razón. Y era esta, no es mi culpa que esté enamorada de mi.
Tyler arranca y me deja ahí sola de nuevo.
Suspiro y me llevo las manos a la cabeza mientras me meto en la casa y voy hacia el cuarto de Maia.
— No es buen momento Van— dice Alex quien está en la puerta.
— Lo se, pero si me dejarás explicarle lo qué pasó...—
Alex niega con la cabeza.

— ¡Ustedes dos fueron los que rompieron las reglas no nosotros!— lo apunto y bajo las escaleras rápidamente.
— ¿O sea que en verdad Will y tú nunca...?— niego con la cabeza sonrojándome recordando lo del baño.
— Hicimos otras cosas.— Alex alza las cejas y comienza a preparar té.— para el dolor de cabeza.
Me dice y asiento y recargo la cabeza contra la pared.
— Soy un desastre. ¿Sabias que eso fue lo que me dijo Maia en mis primeros días aquí? Parece mil años atrás.— le digo.
— No eres un total desastre solo un poco.— Alex me sonríe y lo veo más alegre que antes. No me había fijado en eso. Bueno lo más alegre que se puede estar con esta situación.

— Así que tú y Trina eh, espero que sean muy felices juntos.— le digo mientras Alex me pasa mi tasa de té.
— Gracias, la amo como no tienes una idea.
Will pasa a mis pensamientos y hago una mueca.
— Ojalá él sintiera lo mismo.— le digo a Alex.
Tomo un trago y Alex me mira fijamente.
— ¿Tú lo amas?
No necesito ni pensarlo y mi cuerpo reacciona antes que yo y asiento con la cabeza.
— Entonces tienes que decírselo.
— No puedo, el rechazo me mataría y además no puedo vivir en una misma casa con Ty y Will y Maia y...
veo a que Alex está sonriendo.
— ¿Porque sonríes?
— Te escuchas como yo hace unos años, y mira no cometas los mismos errores que yo hice. Me quede callado toda mi vida pero pude ser feliz desde mucho antes.— Alex toma de su té y una sensación de emoción me inunda.

— Eso es, le dire a Will lo que siento.
Y si me rechaza que más da! Al menos no me quedaré con las ganas y preguntándome el que habrá sido. Y si lo hace lloraré hoy por Ty y Will y Maia pero después ya no y se acabará.
Le marco por celular pero no contesta.
— No lo encuentro. ¡Háblale tú!
Alex comienza a negar con la cabeza pero le hago ojos de cachorro y rueda los ojos y saca su celular del bolsillo.
— ¿Si no te contesto a ti porque me contestaría a mi?— Tú háblale.— Teclea en el celular y me muerdo el labio de nervios. Will si le contesta a él lo que quita mis sospechas de que me ha estado evitando desde la cita.

— Heey Will, ¿cómo estás?— tomo de mi té y voy por un papel y una pluma para escribir. — Mmm si.
Escribo en el papel. Pregúntale donde está!
— y donde andas?— Alex se ríe.— No, solo por curiosidad.
Alex frunce el ceño sin saber qué excusa poner y me doy un manotazo en la cabeza.
— ¿que haces allá, no es peligroso?
Me muero de la ansiedad, ¿donde estará? ¿No abra vuelto por lo que le dije?
— Ah ojalá y si... Bueno que bueno que estás bien, me tengo que ir que Trina necesita ayuda con algo...
Si, igual.... Adiós.
Cuelga la llamada y lo miro expectante.— Bueno tendrás que esperar.

— ¿Porque?— digo casi tirándome del asiento.
— Anda en unas competencias de motocicleta no sabe cuándo volverá.— Alex se ve preocupado por mi y me rellena la taza de té.
— Pero... ¡podremos ir!
— Está a 6 horas llegaríamos en la madrugada.— me muerdo el labio y suspiro de frustración.— ¿crees que es tiempo de que hable con Maia entonces?
Alex se encoge de hombros.— Yo no se de eso, es de chicas.
Le sonrió.— Ay Alex, bueno muchas gracias por el té. Creo que esperare un rato más.

Todo se está desmontando por un lado está Maia arriba llorando por mi culpa y Will quien sabe donde. Me quedo con Alex un rato más, hasta nos relajamos un tiempo y pudimos quedarnos dormidos en la sala. Sueño que estoy con Will y por fin le puedo decir lo que siento, pero el solo se limita a reírse de mi. — ¡Van!
Me levanto sobresaltada por Alex quien me habla en la oscuridad.
— ¿Está todo bien?— logro visualizar su cara y veo como aprieta los labios, significa que está angustiado.
— Me acaban de llamar... Tyler sufrió un accidente en el partido. Lo llevaron a urgencias.
Me levanto por la conmoción y corro por mi chaqueta para ir al hospital.

Viviendo SIN sexoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora