Viviendo SIN sexo

Advertencias inescuchadas

— Ganaste la apuesta, tendrás tu dinero después.— veo como el señor sale de la puerta y se coloca junto con el que está reportando todo lo que está pasando conmocionada veo como James le planta un beso de boca a la chica que le colocó la medalla y no se porque siento algo raro. Así que aparto la mirada.
Ignoro ese sentimiento y voy detrás de él señor que me acaba de robar 100 dólares, no me importa que sea el papá de Will. Ese dinero es mío.

— ¡Hey!— camino abriéndome paso entre la poca gente que está arriba privilegiada y veo como James me persigue con la mirada, antes de que pueda llegar con su papá me toma del brazo y me detiene.
— ¿Apostaste?— Asiento con la cabeza y James cierra los ojos.— ¿Con el?
— El me pregunto y... si.— frunzo el ceño y trato de acercarme a su papá pero James no me suelta.
— Es una trampa, princesa. A eso se dedican es dinero sucio.
— ¿Y como es que la gente sigue apostando?!— le digo entre gritos mientras siento los ojos de las personas posicionarse en nosotros dos y James me lleva arrastrando de ahí hacia la habitación.

— ¿Porque no apostaste conmigo y si con él?— me dice sonriendo.
— Si te ríes porque aposté a por ti, te haré que borres esa estupida sonrisa— mis palabras solo lo hacen soltar una carcajada.
— No es muy listo de tu parte amenazarme, ¿que no me viste en el ring?
Alzó una ceja.— Si, te dieron una paliza.
— Solo un golpe.
— Huelo a sangre desde acá— le digo cruzándome de brazos.
— ¿Preocupada princesa? No te preocupes debía de hacer que me diera un golpe. Si no, como apostarían en mi contra?— ruedo los ojos sin creerme toda esa porquería. Me trajo hasta acá, se deshizo de Will y me quito cien dólares, no vuelvo a salir con él a ningún lado.

— ¿Y mi dinero?— le digo mientras trato de que aún me suelte. Probablemente me deje marca. Lo odio.
Hace una mueca.— Mañana te lo pagare.
— ¿Porque no ahora?
— Era una trampa y caíste, se lo hacen a los nuevos, ¿quieres que te lo explique de nuevo? Pareces retrazada.
Lo fulmino con la mirada.— Suéltame.
Le digo lo más firme que puedo, James me suelta y me alejo lo más rápido que puedo para salir de esa habitación, no quiero que vea las lágrimas.
— ¿A donde crees que vas, princesa?
Volteo enojadisima y se me quiebra un poco la voz cuando le grito.
— ¡Déjame en paz, idiota!
— Me han dicho peores.— se acerca a mi y cuidadosamente me quita una lagrima que se salió en el momento, ya no hay burla en sus ojos. Solo sinceridad.

Nos quedamos un momento así como los dos hipnotizados por ese momento en donde nuestros ojos se ven directamente.
James se aclara la garganta y se aleja de mi volteando a ver el suelto, no se porque me acercó a él lentamente pero me paro en el acto.
¿Que acaba de pasar?
— Te veo luego. Creo que vi a Will en la salida.— no me deja ver su cara. Solo veo su espalda cuando dice esto y sale de la habitación.

Parpadeo como si hubiera estado en un sueño y las voces de las personas me llenan los oídos de nuevo, camino lejos de ahí sin levantar la mirada para buscar a Will cuando escucho gritar mi nombre.
— ¡Vanessa!— me atrae hacia sus brazos y apoyo mi cabeza en su pecho escuchando su corazón palpitar demasiado rápido.
— Lo siento Will.— el me dice que no pasa nada y me lleva lejos de ahí, el camino de regreso es un poco borroso y se que Will me coloco su chaqueta encima al no sentir frío.
— ¿Te hizo algo?— dice Will al ver que no he dicho nada.
— Eh no.— trato de sonreírle pero tal vez solo me salió una mueca incómoda.

La mañana siguiente tenemos escuela y me despierto hecha un desastre. ¿Todas las mañanas serán así?
Volteo a un lado de mi y veo a Will en mi cama.
Suelto un alarido haciendo que se despierte y me mire sorprendido.
Supongo que toda la casa lo escucho porque no tardan en tocar la puerta. Es Trina.
— ¿Tienes pesadillas cariño?— veo a Will quien lo quiero matar ahora mismo.
— ¡No no todo bien!— le grito desde el otro lado de la puerta y volteo a ver a Will enojadisima.— ¿qué haces aquí?
— Me dijiste que no me fuera.
— Lo imaginaste.— lo empujó fuera de mi cama antes de que se contamine a Will y huela a él de nuevo. Will se cae de la cama y solo escucho un aa au, haciéndome reír. Lo que me hace enojarme mas, lo fácil que tiene Will para hacerme reír.

— ¿Como dijiste que se llamaba?— dice Trina comiendo su lonche junto a mi en la cafetería de la escuela.
Le hecho ketchup a mi hamburguesa y en eso lo veo pasar por la cafetería con una mujer bajo su brazo.
— Es el.
Trina voltea a verlo y abre la boca sorprendida.
— ¿Jaguar?— la miro sorprendida.
— ¿Lo conoces?
— Solo por su apodo, si sabías que se ha acostado con media escuela no?
Casi me trago mi hamburguesa, volteo a ver al resto de la mesa pero cada uno está en sus asuntos Maia le da una papa a Tyler en la boca y Will. Bueno Will no está. Y los del equipo tratan de impresionar a las chicas.

— ¿Como dices? ¿Quien se acostaría con el? ¡Es un idiota!— pero se que Trina me ve fijamente.
— Tienes que tener cuidado Van. Las únicas cosas que he oído de él son bastante malas. Aunque se que a la gente le gusta exagerar.— hace una pausa y lo voltea a ver de nuevo.— Supongo que las chicas creen que lo podrán cambiar.
Volteo a verlo y veo como dos chicas se suben encima de él mientras él trata de quitárselas de encima.
— ¡Que asco!— le digo mientras veo a las chicas con cero respeto por sí mismas.
— Quieren popularidad. Nunca ha tenido una novia o algo más duradero que una noche.
Me rio y veo como James alza los ojos hacia mi.
— Te está viendo.— dice Trina mientras me sonríe.
— Me cacho viéndolo!— le digo mientras retiro la vista de él y la coloco en Trina quien se está riendo.
— ¿Quieres que te descubra más sobre el?— Trina me guiña un ojo y ruedo los ojos.
— ¿Que más hay que saber? Es un idiota.
Volteo a verlo de nuevo y veo que no ha retirado la vista de mi haciendo que conectemos miradas. La bajó rápidamente y veo a Trina quien niega con la cabeza.
— Lo qué pasa es que nadie sabe más sobre el.