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- Iré al baño. - Mintió, sintiéndose ahogado, debido a la opresión en su pecho.

No espero la respuesta de Lee, y salió de la habitación con un solo objetivo en mente, hablar con su madre. Se lanzó en el sillón en cuanto llego a la sala, y saco de su pantalonsillo el pequeño aparato, marcando el único número registrado.

5 tonos después, la llamada fue atendida, pero nadie hablaba del otro lado. Solo se podían escuchar lejanos sollozos.

- ¿Mamá?. - pregunto, sin saber si era ella al teléfono.

- ¿Qué ocurre Sung?. - respondió con otra pregunta la mujer. Su voz oyendose claramente obstruida debido al llanto.

- Eso me pregunto yo. - susurró. - ¿Por qué te fuiste?. - dijo ahora en un tono más alto.

- No me siento muy bien, es todo pequeño. - hizo una pausa, sorbiendo su nariz. - Aunque ya no lo estés...

Jisung sabía que su madre lloraba al otro lado, aunque se empeñara en disimularlo. - Por eso estás mal - Dijo, siendo más una afirmación que una pregunta.

- Es que...tu...estás tan grande. - Ming no siguió ocultando su silencioso llanto, y comenzó a hipar mientras hablaba. - Y rubio. - dijo lo último en un tono que le saco una risita a Han.

No era momento para reírse, pero la actitud de su madre le causaba entre ternura y gracia. No esperaba que está actuará así. - No llores mamá. - pidió en un susurro. - ¿Soy hermoso cierto?. - quiso bromear, con la intención de subirle un poco el ánimo a su progenitora.

- Lo eres. - dijo riendo, sacándole una sonrisa a Jisung por haber logrado su propósito. - Lo siento Sunggie. - dijo de repente. - Lo siento por no haber estado contigo. - A ese punto ya Han tenía una mueca en su rostro. - Lo siento por no haberte visto crec...

- Ya hablamos de esto mamá. - la interrumpió. - Dejemos eso en el pasado. - dijo lo último en tono serio. De verdad odiaba que su madre se sintiera culpable por lo que había pasado. - Estamos juntos ahora, es lo importante. - sonrió, a pesar de que la mujer no pudiese verlo. - Bueno, no literalmente pero juntos en fin.

- Pareces el adulto aquí. - dijo con un notable mejor humor Park. - Siempre tan maduro. - Se sentía orgullosa. Siempre supo que su hijo sería un gran hombre.

Hubo un silencio de repente. Solo se oía la respiración de ambos en la línea telefónica.

- Quiero verte. - dijo de la nada la mujer.

- También quisiera verte. - respondió con tristeza en su voz.

- No Jisung, en serio quiero verte, hablaré con tu padre. 

La sonrisa que adornaba el rostro de Han desapareció. ¿Su madre se había vuelto loca?. - No...no creo que sea buena idea. - recordó todo lo ocurrido con su padre, sintiéndose molesto.

- No lo sabremos hasta inten...

- Discutimos. - corto la frase que su madre diría. - Créeme, no es buena idea.

- ¿Él te hizo algo?. - la voz de la mujer salió algo mortificada. - ¿Qué ocurrió Jisung?.

- No es nada mamá. - Dijo, resta dile importancia. No quería hablar del tema.

- Han Jisung. - lo reto.

- Hace un par de días salimos juntos, yo de verdad creí que quería pasar tiempo conmigo, pero solo quiere que salga con un chico, quien es hijo del alcalde de Seúl, porque se postuló a las próximas elecciones y el cree que con eso le dará algún tipo de ventaja, cosa que no entiendo. - tomo un respiro, ya que estaba hablando demasiado rápido. - Le dije que no haría éso, y comenzó a gritarme porque quiere que termine mi relación con Minho, aunque no sepa que salgo con Minho. - hizo una pausa, pensando en que detalle se le escapaba. - Ah, y también quiere que Lia, Dios, la odio tanto, el quiere que ella salga con Minho. ¿Puedes creerlo?.

Kill This Love •Minsung•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora