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Jisung, Jeongin, Felix y Seungmin veían fastidiados al resto, mientras decidían quien conduciría primero.

- Jueguen piedra, papel o tijeras.- sugirió el menor de todos.

Los tres chicos estuvieron de acuerdo y comenzaron. El primero en quedar libre fue Bang, quien les hizo burla mientras se alejaba del círculo, quedando la final entre Minho y Hyunjin.

- ¿Porque el idiota no juega si el también sabe manejar?.- decía el mayor dirigiéndose a Seungmin.

- Porque no quiero hacerlo.- respondió simple.

- Pues yo tampoco quiero.- respondió

- Pues no me importa.- sabía que estaban siendo infantiles, pero le valía.

- Ya, ya, terminemos con esto.- hablo el azabache.- Piedra, papel o tijera.- Ambos chicos mostraron sus manos, siendo Minho el perdedor. Hyunjin hizo su bailesito raro, celebrando su victoria.

- Carajo!.- él mayor planeaba pasar el camino haciéndole caricias en el cabello a Jisung, no conduciendo.

Todos rieron por la reacción de ambos y se dispusieron a entrar a la minivan.
Minho se dirigió al asiento del piloto, siendo su copiloto Jisung, en el asiento de atrás, estaban Felix, Hyunjin y Jeongin, quedando en los de más atrás Chan y Seungmin. Y así el auto se puso en marcha.

- Pararemos en el marcado Jagalchi, y allí cambiamos.- hablo el azabache, dirigiéndose al piloto.

- Me parece bien.- respondió este.

El viaje estaba siendo más tranquilo de lo que Minho imagino, a su lado, Jisung se había quedado dormido, dándole la mejor vista, incluso mejor que la del paisaje frente a él, el menor era igual a un ángel durmiendo, un ángel muy sensual. Los del último asiento iban sumergidos en sus pensamientos, mientras escuchaban música desde sus audífonos. En el asiento de adelante era otra cosa, Hyunjin y Felix bromeaban sobre cualquier cosa, mientas Jeongin solo participaba de vez en cuando, prefería reírse de las ocurrencias del de pecas y su hermano. Estaba más concentrado en ver al australiano desde el reflejo de su ventana. Tenía sus ojos cerrados, y su cabello rubio caía sobre su frente. El menor no se imaginaba algo más atractivo que ese hombre, simplemente no existía.

Bang mantenía sus párpados sellados, para evitar mirar al menor frente a él. Pero aún así, la imagen del chico no dejaba de aparecer en su mente. Era una maldita tortura. A su lado un pelirrojo, con la mirada perdida en las calles que recorrían, no podía dejar de pensar en que cierto azabache, era un poquito demasiado atractivo, y eso le provocaba ganas de golpearse, porque no quería admitir que le podría estar comenzando a gustar.

El tiempo pasó, y Minho ya estaba moviendo suavemente al chico a su lado para que se despertara, ya que estaban por llegar a su primera parada.

Todos salieron del automóvil, y se adentraron en el pintoresco lugar. Jisung y Jeongin se fueron al baño, mientras que los otros buscaban algún lugar para comer algo. Cuando consiguieron un puesto de comida solo, se sentaron, para que no llegara alguien y se quedarán sin lugar. El azabache texteo a su hermano, diciéndole en dónde se encontraban. Los menores llegaron y se dispusieron a comer un montón de bocadillos.

Cuando estuvieron llenos, regresaron a la minivan, y El azabache tomo el lugar de Minho, siendo ahora su copiloto el pelirrojo, y no es porque quisiera hacerlo, pero prefería eso, a estar en el asiento con Jisung y Minho mientras compartían saliva.  Quedando en los asientos del medio Jeongin, rodeado de ambos australianos. El de pecas se puso cómodo, disponiéndose a dormir, mientras que el de brackets quería lanzarse por la ventana, ya que Bang no dejaba de rozar sus piernas descaradamente y quería, de verdad quería que no le gustase, pero sería una maldita mentira. " Será un largo camino". pensó mientras cerraba sus ojos, fingiendo que dormía.

Kill This Love •Minsung•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora